"La hija de Ra" - Santiago Morata

No hace demasiados meses que os hablé de “El constructor de pirámides”, primera novela que leía de Santiago Morata y que me encantó. Ya os decía que, al estar situada en el Antiguo Egipto, tenía mucho ganado pues desde siempre me fascina esa época. Pero es que, además, contenía una historia interesantísima, perfectamente situada en el tiempo y en el espacio , con unos personajes inolvidables y un estilo literario impecable.

Así las cosas, cuando me enteré de que se iba a publicar una nueva novela del autor situada otra vez en dicha época y teniendo por protagonista a la única faraón de Egipto, supe que tenía que leerla. Gracias a la editorial Pamiés, la tuve en mis manos incluso antes de su publicación. Hace ya unas semanas que la leí y otra que lo reseñé pero estaba esperando a que llegara diciembre y con él, el mes temático de la novela histórica para publicarla. Además, así lo hago coincidir con el post general dedicado a la novela egipcia publicado ayer.



Santiago Morata

Santiago Morata (Zaragoza, 1969) es pintor y escritor. Además, trabaja en el departamento internacional de una empresa de dietética.

.- Su primera novela, El milenio de la pasión, fue publicada en 2006.

.- A ésta le siguió La Sombra del Faraón en 2008, publicada con gran éxito de crítica y ventas por Ediciones B.

.-El constructor de pirámides es su tercera novela.

.- El mes pasado se ha publicado la cuarta, “La hija de Ra”

En su página web http://www.santiagomorata.com podéis ver noticias sobre sus novelas, sus cuadros, etc… 

Datos técnicos

Título: “La hija de Ra”
Autor: Santiago Morata
Editorial: Pámies, Colección Histórica
400 Páginas Pag.
PVP 19.95 €
ISBN 978-84-15433-09-5
Edición: tapa blanda con solapas



Argumento

Nos encontramos en el año 1500 antes de Cristo, durante el reinado de Tutmosis I. Muertos sus dos hijos varones mayores y no confiando en la inteligencia y facultades para gobernar del más pequeño de sus hijos, de igual nombre que el suyo, decide preparar para el gobierno a su hija Hatsepsut que, desde su nacimiento fue educada como si de un varón se tratara, llevándole a los colegios a los que sólo van los varones, enseñándole a manejar un arma, etc… Su última jugada es ponerle un preceptor muy especial, Sen-en Mut, al que considera el hombre más inteligente del país. Antiguo soldado, actualmente sacerdote y preferido por el sumo sacerdote de Amón, Sen-en Mut va a saber cómo lidiar con la fuerza de carácter de Hatsepsut y entre ambos va a nacer una especial relación amorosa. Sen-en Mut le ayudará a llegar al poder pues aunque es el mayor deseo de Tutmosis no se atreve a tomar una decisión tan radical y convence a su hija para que se case con su hermano de tal forma que éste sería faraón sobre el papel mientras que ella sería la que verdaderamente llevaría las riendas del poder.

De la mano de esta novela, Santiago Morata nos acerca a la figura de la única mujer que fue faraón en el Antiguo Egipto y nos presenta una novela llena de intrigas políticas, asesinatos, traiciones, amistades, enemistades y, por encima de todo, una preciosa y grandísima historia de amor.

Impresiones

La verdad es que casi podría copiar todo lo que dije al hablar de “El constructor de pirámides” porque, cambiando de personajes y, por supuesto de historia, en todo lo demás hay una absoluta coincidencia: en la bonita pluma de Santiago Morata, la perfecta construcción de unos personajes totalmente creíbles, perfilados a la perfección, con apariencia de reales, una escenificación espacio-temporal perfecta, una labor de documentación impresionante y, por encima de todo, una apasionante novela de aventuras.

Si en la novela anterior conocimos a Snefru, el faraón bajo cuyo reinado se pusieron las bases de las fabulosas pirámides (Keops es hijo y sucesor suyo), en ésta conoceremos a Hatsepsut, única faraón en la historia de Egipto y constructora del templo (con permiso de Karnak) más bello del país. Asistimos a su vida desde que deja atrás la primera infancia hasta que es una viejecilla enferma y conoceremos a una mujer de armas tomar, bella, inteligente, con mucho carácter. Una mujer que se rebeló contra su destino de mujer, que le impedía reinar y no se conformó, ni tan siquiera, con gobernar en la sombra.

Hatseptsut perteneció a la XVIII Dinastía y reinó desde 1490 hasta 1468 a.C. y su reinado fue uno de los más prósperos de toda la historia del Antiguo Egipto, una época de prosperidad económica y de estabilidad política. Durante su reinado se construyeron bellas edificaciones, restaurándose los antiguos templos y levantando el templo por el que sería conocida en la posteridad. El templo fue construido en Deir el_bahari, cerca de Tebas, por Sen-en-Mut, arquitecto real. Es templo formado por rampas y terrazas suaves, perfectamente enclavado en su entorno, llegando a parecer que surge de la montaña. En una de sus paredes, en un lugar oculto, aparece una imagen de la reina en actitud amatoria con Sen-en-Mut.

La idea de que Hatseptsut y Sen-en-Mut eran amantes no está demostrada pero hay muchos historiadores que creen en ella basándose en pruebas como la citada. Desde luego, la historia de amor que Santiago Morata crea a partir de esta idea es preciosa y hace desear que ojalá fuese así.

Para los reticentes a la novela histórica por considerarla aburrida, os diré que no tiene por qué ser así y, desde luego, no lo es en este caso particular. Porque “La hija de Ra” puede verse como una novela histórica (lo es, obviamente) pero también como una novela de aventuras y como una novela de amor. Es lo bueno que tiene la historia, la realidad, que casi siempre supera la ficción y en la novela histórica caben subgéneros de todo tipo. “La hija de Ra” es una novela muy entretenida, que se lee fácilmente, que da muchos datos históricos, cierto, pero lo hace de forma muy amena

La ambientación espacio-temporal, como en el caso de “El constructor de pirámides” me ha parecido perfecta. Es obvio que detrás de ella hay un gran trabajo de documentación y que Santiago Morata, además de un gran conocedor, es un apasionado del Antiguo Egipto. El autor realmente ha conseguido trasladarme al Egipto que describe y darme a conocer a los personajes de su novela, he “visto” y vivido la historia como si de una película se tratara. Aún siendo una novela y, por lo tanto, permitiéndose algunas licencias el libro resulta muy instructivo. Nos enseña una cultura fascinante, una forma de vida diferente, unos personajes que vivieron hace 4000 años pero cuyos nombres aún suenan en la actualidad.

El estilo narrativo es sencillo, con bastante ritmo; siempre están pasando cosas. Sin embargo, si la comparo con “El constructor de pirámides”, ésta me resultó aún más entretenida, más “page-turner”, es por eso que le dí mayor puntuación.



Conclusión final

Nuevamente, Santiago Morata nos sorprende con una estupenda novela situada en el Antiguo Egipto, acercándonos a la vida de una fascínante mujer y a una forma de vida que hará las delicias de los amantes de esa cultura milenaria pero que, por la forma amena y cercana en la que está escrita, creo que puede satisfacer a cualquier otro tipo de lector.

Podéis comprarla en Popular libros