Leí hace unos años “Phobia” y “La psiquiatra” y me gustaron mucho así que no dudé en hacerme con la nueva novela de este autor de thrillers psicológicos que tanto me gusta.
Éstas son mis impresiones
Ficha técnica
Editorial: Duomo
Páginas: 362
ISBN: 9 7 8 8 4 1 7 1 2 8 5 7 9
Sinopsis
Laura Schrader despierta rodeada de sirenas de ambulancia completamente perturbada y herida. Está embarazada, y acaba de sufrir un accidente cuando circulaba por una carretera montañosa entre la niebla y la lluvia. En el maletero del coche, la policía descubre el cadáver de una niña con evidentes signos de violencia y ninguna pista coherente. No hay ni rastro del extraño que la socorrió y avisó a emergencias, la aldea cercana parece desierta y la historia que Laura cuenta suena increíble. El psiquiatra Robert Winter se hará cargo del caso dispuesto a descubrir qué hay de verdad en su desconcertante relato y tras su mirada de desconfianza y terror. Algo está sucediendo en la larga y oscura noche, bajo un cielo negro lleno de odio y solo si confía en esta mujer, podrá averiguarlo.
Impresiones
Como suele ocurrir en las novelas de este autor, la historia comienza fuerte. Una mujer, Laura Schrader, despierta rodeada de sirenas de ambulancia. No sabe dónde está ni qué ha pasado pero está llena de sangre. En el maletero de su coche, el cadáver ensangrentado de una niña. Alguien avisó a los servicios médicos y policiales del lugar donde estaba el coche accidentado de Laura pero, ¿dónde está el hombre que llamó? Para complicar más las cosas, cuando la policía empieza a investigar por los alrededores descubren algo muy perturbador: el pueblo está desierto, no encuentran allí a ninguno de sus habitantes.
A pesar de lo que me gusta este autor, empecé el libro con un poco de prevención porque había leído comentarios muy elogiosos pero otros que no lo eran tanto y porque ya desde el primer momento descubrí un punto de terror y la posibilidad de un punto sobrenatural. Y ni uno ni otro me suelen atraer (lo que no quita que haya novelas de uno u otro estilo que sí me hayan gustado –y mucho en algunos casos-). Pero no hay de qué preocuparse pues fue empezar a leer y estar ya enganchada. Esos pequeños toques de terror y sobrenatural están bien llevados (o llevados de la forma que a mí me gusta) y lo que prima, en mi opinión, es un thriller psicológico de esos que no puedes parar de leer.
Como digo, el libro comienza muy fuerte planteando ya de primeras una situación que hace surgir en el lector todas las alarmas. Y presentándonos a uno de los grandes personajes de la novela: Laura. Una Laura que parece trastornada; al menos, la policía no puede dar crédito a la historia que ella intenta contarles. Así que llaman a un psicólogo experto en trastornos para que la interrogue y dilucide lo que puede haber o no de cierto en su historia. Y Laura empieza a contar cómo ella, su hermana y su sobrina Mía decidieron pasar unos días tranquilos en un pueblo perdido. Laura irá contando –o irá siendo interrogada- toda su historia. Lo hará durante una larga noche en la que se retrotraerá unos días atrás, cuando todo empezó. Por otro lado, el psicólogo que la interroga va hablando con los miembros de la policía encargados de la investigación y así nos vamos enterando de lo que éstos van descubriendo. Finalmente, hay unos capítulos sueltos que se desarrollan en diferentes partes del mundo y están protagonizados por niños a los que les pasan cosas; al principio no sabremos qué pintan allí.
La novela está muy bien ambientada, con el punto exacto de oscuridad que la trama requiere. Lugares aislados, noche oscura, tormentas…; llega a ser muy claustrofóbica. En un ambiente como ese parece que cualquier cosa puede ser posible. Incluso lectores con los pies muy pegados al suelo como yo no dudamos en echar mano de explicaciones extrañas, fantasiosas… ¿Habrá alguna explicación racional para todo lo que ha ocurrido o la explicación va más allá de lo que la mente humana puede contemplar?
Es una novela con muy pocos personajes. La más importante es Laura ya que será la que nos dará una explicación (otra cosa es que la aceptemos) de lo que ha pasado. A pesar de ello, el autor utiliza la tercera persona, no la primera (que quizás sería lo lógico en una novela de este tipo). Pero no, toda la novela está contado por un narrador omnisciente y cuando es Laura la que habla lo hará en forma de diálogo, a través del interrogatorio al que la somete el psicólogo de la policía. No es un personaje fiable y estaremos dudando de ella –o, mejor dicho, de su cordura- durante toda la novela. Junto a ella tenemos a su hermana y a su sobrina, una niña pequeña. También a su ex cuñado (que es quien dio el aviso a la policía de que había encontrado el coche accidentado de Laura) y el psicólogo de la policía. Y poco más.
El estilo es el típico de los thrillers. Mucho diálogo, mucho ritmo y muchas sorpresas. Aderezado como he dicho al principio con un punto de terror y un toque sobrenatural (o que lo parece: si queréis saber si realmente lo es o no, tendréis que leer la novela porque yo ya no cuento más)
Conclusión final
Aunque se aleja un poco de “Phobia” y de “La psiquiatra”, a mí me ha convencido como ya lo hicieron aquellas. Me ha resultado una novela muy entretenida e inquietante, no he podido parar de leerla y, en definitiva, la he disfrutado mucho
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