Hay autores y autoras a las que lees sí o sí. Una de ellas es, en mi caso, Elia Barceló. La descubrí hace relativamente poco –cinco o seis años, creo- pero, desde entonces, leo todo lo que publica. Me gusta mucho cómo escribe, sus historias, sus personajes…; varias de sus novelas han estado entre mis mejores lecturas del año en el que las leí.
Es por eso que no dudé en leer su nueva novela, recientemente publicada. Con un título atractivo y una portada preciosa, no me hizo ni falta leer la sinopsis. Por cierto, yo de vosotros tampoco lo haría (leer la sinopsis) porque en ella se dice quién es la víctima. En una novela de intriga el lector se esfuerza por adivinar quién es el asesino pero, si encima, haces elucubraciones para intentar averiguar a quién se cargan, mejor aún, ¿no? Máxime cuando la autora se toma su tiempo para matar. Es verdad que, pasadas las primeras cien páginas y no teniendo aún un cadáver que se precie, ya vas imaginándote quién va a ser; pero al principio, ya os digo yo que no.
Y no me enrollo más y os cuento cuáles son mis impresiones
Ficha técnica
Editorial: Roca
Páginas: 377
ISBN: 9788418417498
Sinopsis
Estamos en Santa Rita, un antiguo balneario, que luego fue sanatorio y ahora es la casa de una escritora anciana, Sofía, (que escribe novelas de misterio con un pseudónimo y novela rosa con otro), donde viven unas cuarenta personas de todas las edades apoyándose unos a otros y trabajando juntos, en un concepto de "comunidad cordial" transgeneracional.
La protagonista, Greta, sobrina y traductora de Sofía, llega para quedarse una temporada y, a través de ella, vamos conociendo a los personajes de la historia: Candy, secretaria y mano derecha de Sofía; Robles, comisario de policía retirado; Nel y su grupo, estudiantes universitarios; Miguel, profesor de matemáticas ciego; Reme, madre de una mujer maltratada...
La llegada de un viejo conocido de Sofía con planes propios para el futuro de la comunidad creará los primeros problemas. Pocos días después de haber vuelto, el hombre aparece muerto en la alberca de riego. ¿Accidente o asesinato? De hecho, casi todos los habitantes de Santa Rita han tenido ocasión y no les habrían faltado ganas de hacer desaparecer a Moncho Riquelme.
Greta y Robles se involucrarán en la investigación y, sin pretenderlo, irán desvelando más secretos y descubriendo más misterios de lo que pensaban.
«¿Y si de verdad había sido asesinato? ¿Quién, en Santa Rita, sería capaz de matar? Y ¿por qué? ¿A quién podía beneficiar la muerte de aquel payaso? A todos, claro, ese era el problema: que, exceptuando a Sofía, desde el punto de vista de los habitantes de Santa Rita, hombres y mujeres, viejos y jóvenes, como mejor estaba Moncho era justo como estaba ahora: muerto.»
Impresiones
Santa Rita es la casa en la que vive Sofía, una anciana escritora que se hizo famosa con sus dos líneas de novelas: una de corte criminal y otra de corte erótico-rosa. Sofía ahora tiene noventa y tres años y se encuentra en buen estado de salud, aún escribiendo. Vive, junto a muchas otras personas, en la que fue vivienda familiar pero, antes que eso, sanatorio para mujeres con problemas mentales (o lugar donde las familias recluían a sus hijas díscolas con las que no sabían qué hacer, que de todo hay y hubo). Desde hace ya varios años, Sofía ha ido “acogiendo” a diferentes personas que, por una u otra razón, han querido ir a vivir allí: gente que se ha quedado sin casa, estudiantes, gente que ha querido buscar allí una vida mejor, etc… Ahora mismo hay un grupo heterogéneo de personas viviendo en la mansión y colaborando en todas las tareas propias del día a día. Además de esas personas, está Candy, su fiel ayuda para todo desde hace siglos y su recién llegada sobrina Greta. Greta se ha separado de su marido y ha dejado Alemania donde residía para pasar una temporada en España y decidir qué hace con su vida.
Pero hay alguien que amenaza Santa Rita y, cuando esa persona aparece muerta –a pesar de que parece un accidente bastante evidente- se abre una investigación. ¿Es realmente un accidente o alguien ha buscado una solución rápida al problema?
“Muerte en Santa Rita” es una bonita novela que, acercándose a las novelas clásicas de misterio, no lo llega a ser totalmente porque, como no pudiera ser de otra forma, Elia Barceló imprime su sello personal. Me gustan los escritores que tienen un estilo definido y que, aunque cambien de género, sus letras se siguen reconociendo. Éste es el caso de Elia Barceló: el exquisito cuidado que pone en el dibujo de personajes y escenas y su prosa tan pulcra y cuidada hacen que “Muerte en Santa Rita” se descubra como muy suyo. Por eso, la intriga no es realmente lo más importante de la novela sino todo lo demás: es tanto o casi más una novela que podríamos encuadrar en el género narrativa que en el de novela negra. Negra no puede serlo en realidad porque la luminosidad del paisaje lo impide; lo dejaremos en misterio entonces. En mi caso, he de decir que la intriga se debió al principio a no haber tan siquiera leído la sinopsis y desconocer por tanto quién iba a ser la víctima (os aconsejo que hagáis lo mismo) pero, una vez que se sabe quién va a ser asesinado, la intriga lógicamente consiste en adivinar quién decidió matarlo. Algo que no es excesivamente fácil adivinar por cuanto todos los personajes tenían motivos para hacerlo. A mí me sorprendió, se me pasó por la cabeza quién era el culpable –como prácticamente se me pasaron por la cabeza todos los demás personajes- pero lo descarté por parecerme imposible.
Así que, sí, como novela de intriga me ha funcionado. Aunque como más me ha funcionado es como novela de narrativa que, acercándose a una novela familiar pero sin lazos de sangre, nos habla de unos personajes que han decidido vivir juntos. Interesante cómo se organizan y los apuntes que da la autora de las vidas personales de cada uno de ellos. Son sólo apuntes porque, si no, el ritmo se vería lastrado en demasía pero, como va a haber más novelas situadas en Santa Rita, espero que se desarrollen un poco más.
Y es que esta es la primera novela de lo que la autora tiene previsto sean unas cuantas novelas situadas en el mismo escenario. Así lo cuenta en la nota final en la que, además, nos dice que nos hablará de historias del pasado. Y eso me atrae muchísimo porque uno de los personajes más interesantes, Sofía (la escritora de noventa y tres años) ha vivido mucho: no sólo literalmente sino también figuradamente, pues ha tenido una vida muy intensa. Y ya no sólo ella sino sus predecesores: ese padre y ese abuelo director del sanatorio de Santa Rita seguro que tienen muchas historias interesantes que contarnos.
“Muerte en Santa Rita” es una novela coral. Son muchos los personajes que pueblan sus páginas y no os voy a hablar detenidamente de cada uno de ellos. Baste deciros que me ha gustado especialmente Robles (que, además, la autora ha debido rescatar de una novela anterior), Greta (la más protagonista) y, por supuesto, Sofía (la más interesante). Sofía, como os digo, ha tenido una vida muy intensa y me imagino que en las próximas novelas sabremos más en detalle de aspectos que en ésta tan sólo se han mencionado. Igualmente, supongo que lo ocurrido durante la época en la que el edificio fue sanatorio, puede dar lugar a tramas muy interesantes.
El escenario me ha encantado. Santa Rita está en Benalfaro, una localidad alicantina que realmente no existe pero que bien podemos imaginarla muy cerquita de Elche. El edificio en sí es una maravilla a pesar de que no está rehabilitado y que sus habitantes van haciendo, poco a poco, lo que pueden para adecentarlo. Pero esas habitaciones que antes fueron de las pacientes y ahora son de los habitantes de Santa Rita, sobre todo las de la planta baja con ese pequeño jardín particular. O las más imponentes de la torre donde vive la familia…. Esos jardines, ese mar cercano, esa claridad de la costa alicantina, ese buen tiempo… En fin, que yo me iba a pasar una temporada a Santa Rita.
En cuanto al estilo, es fácilmente reconocible la prosa de Elia Barceló: cuidada, delicada, elegante, precisa… Se toma su tiempo para dibujar los escenarios y, sobre todo, los personajes que son muchos. Por eso se separa de lo que es una novela de intriga convencional y se acerca más a la narrativa. Incluso, como ya he señalado más arriba, casi podría pasar por una novela familiar sino fuera porque en realidad a los personajes no les unen lazos de sangre (salvo a Sofía y Greta). Pero sí que han formado una gran familia a su manera, muy sui géneris eso sí.
Conclusión final
Me ha gustado la nueva novela de Elia Barceló. Una novela en la que prima la historia sobre el misterio que, al final, casi es lo de menos. Pero que, aún así, a mí me ha sorprendido.
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