“Los incomprendidos “ – Pedro Simón

Había leído comentarios realmente elogiosos de este libro y del anterior del autor (“Los ingratos”). Es por eso que me decidí a leerlo y qué bien hice: me ha encantado; de hecho, ha sido mi primer cinco estrellas del año.

Éstas son mis impresiones

Ficha técnica en Casa del libro

Sinopsis

Javier y Celia son un matrimonio de clase media con un hijo pequeño y una hija preadolescente. Él trabaja en una editorial y ella en un hospital; él arregla vidas de mentira y ella arregla vidas de verdad. Tratan de prosperar, se mudan a un barrio mejor, la cotidianidad. Podría ser la historia de muchos. Hasta que tiene lugar una excursión a Pirineos que lo cambia absolutamente todo.

Esta es la historia de un viaje al abismo que habla de otros muchos viajes. El viaje de la infancia a la convulsa adolescencia. El que va de la algarabía infantil al silencio más sepulcral. El de los padres que caminan detrás con su culpa y llegan tarde. El de los abuelos que fueron delante y a los que nadie escucha. El que hace alguien para salvar una vida. También es la historia de ese otro viaje al que todos tenemos miedo: el que habla de nuestro pasado más oscuro y secreto.

Los incomprendidos es una novela sobre la soledad familiar, la incomunicación entre padres e hijos, el horror de decir, pero también, y desde la primera página, sobre la esperanza.

Impresiones

Javier, Celia y sus dos hijos Inés y Roberto forman una familia normal. Él tiene una pequeña editorial. Ella es neumóloga en un hospital. Inés es una niña que está entrando en la adolescencia pues tiene trece años. Roberto tiene ocho y es un niño tranquilo y feliz que no da ningún problema

Su vida transcurre de forma normal, como la de cualquier familia. Hasta que en un corto viaje a Pirineos ocurre algo que lo cambia todo.

Es muy difícil reseñar este libro. Y lo es porque es una novela llena de sentimientos. No hay que hablar de ella, no cabe analizarla ni comentarla. Hay que leerla y sentirla. Es una historia dura, que duele e implica. Una historia en la que quien más quien menos se va a ver reflejado. Porque todos somos padres, hijos o hermanos. Quizás los más jóvenes lectores se vean reflejados en Inés. Es probable que los que ya peinamos alguna cana nos identifiquemos más con Javier, o con Celia. O quizás tengamos en la familia una tía como la tía Clara. O hemos crecido en una familia como la de Javier, o como la de Celia. Quizás también hemos ascendido socialmente y del barrio obrero hemos pasado a una zona de gente guay, chalet incluido. O quizás hemos sufrido en nuestras carnes o en las carnes de nuestros hijos una adolescencia complicada. O, ojalá no sea el caso, hemos tenido que sufrir algo similar a lo que ha sufrido esta familia. Fuera como fuere, seguro que en algún momento, según leemos, pensamos que eso también nos pasó. Por eso, porque te ves reflejado, porque te implica, la novela llega profundamente, hasta el fondo. Y duele.

La novela habla de los incomprendidos. ¿Y quiénes son incomprendidos? ¿Los adolescentes? ¿sus padres? Según la perspectiva desde la que se mire, tanto unos como otros. Cuando empiezas a leer el libro y no sabes lo que ha ocurrido, cuando te crees que es la vida normal de una familia normal con una hija adolescente normal, afirmas con la cabeza según vas leyendo. Tengo ahora mismo una hija de doce años, de esas que contestan con un sí o un no, vale, o un “qué pesada eres”. De las que se meten en su cuarto y sólo salen cuando necesitan comer. De las que te miran como si no tuvieses ni idea de nada mientras que ella lo sabe todo. Y es que, “somos de otra época”. Al principio, me veía reflejada en los padres de Inés. Sin que sea una adolescencia especialmente difícil, cualquier padre o madre de adolescente creo que se sentirá reflejado.

Pero eso es solo al principio. Porque luego vamos descubriendo cosas. No secretos exactamente, pero sí cosas. Los dos narradores (Javier e Inés –aunque al final la tía Clara nos dedica también unas palabras) no dan toda la información de sopetón sino que van contando las cosas según les parece, poco a poco. Por eso, cuando de repente sueltan una bomba (y hay unas cuantas) es como si el suelo se removiese debajo del lector. Te deja a cuadros, con la boca abierta en un gesto compungido y de dolor.

“Los incomprendidos” es una novela desgarradora que te hace sentir. También sufrir, no lo voy a negar. Pero que es una auténtica belleza y que merece mucho la pena leer. Narrada a dos voces con una infinita delicadeza, es una novela llena de amor por la familia. Te da un par de vueltas, te deja pensando, a veces temblando. Una novela en la que Javier se desnuda ante nosotros y nos muestra todo su dolor. También Inés a su manera. Aunque Celia no narre su persona queda tan clara como la de los otros protagonistas.

Hay un montón de frases para subrayar y otro montón para recordar y no olvidar nunca. Como la propia novela, va a ser muy difícil que la olvide.

"Quizás descubrí que las mejores historias, las que más emocionan, las que más nos llegan, no son las que hablan de los otros en sitios lejanos, sino las que hablan de ti. Aquí mismo. Ahora. Y hacen que se te iluminen los ojos y quieras conocer el final"

Conclusión final

“Los incomprendidos” es una auténtica maravilla. Una novela preciosa llena de sentimientos que te pondrá el corazón en un puño. Una novela escrita de una forma bellísima que recibe las cinco estrellas y porque no puedo darle más. Sin duda, estará entre mis mejores lecturas del año.

Si os ha gustado mi reseña podéis haceros con un ejemplar de la novela en Casa del libro