Hoy os traigo la reseña de un thriller político que nos lleva de cabeza a los últimos años del franquismo.
Éstas son mis impresiones
Ficha técnica
Editorial: Roca
Páginas: 221
ISBN: 9788418249464
Sinopsis
Está a punto de que se descubra la gran verdad, de que se desvele uno de los secretos mejor guardados de la reciente historia de España. Santolaya teme que lo puedan relacionar con los hechos y decide que es el momento de huir, de abandonar una carrera que le ha llevado hasta la fontanería de La Moncloa pasando por los servicios de inteligencia. Desde la dictadura a la democracia, más de cuarenta años siempre muy cerca del poder y la toma de decisiones.
En su viaje evoca el pasado en la Barcelona de finales de los sesenta, cuando siendo un ocioso adolescente, la casualidad hizo que empezara a trabajar como lazarillo de un ilustre norteamericano, un agregado comercial con buenos contactos en la embajada. McNamara, sin embargo, se encargaba de tejer las redes de contactos entre todos aquellos actores interesados en tener un papel destacado en la inminente transición española.
Barcelona bulle. Es un campo de minas y de pruebas. De contubernios y conspiraciones. El terreno ideal para las corruptelas, y donde las fuerzas vivas del régimen tienen patente de corso.
Ramón Santolaya, ávido lector y devoto de la radio, se verá envuelto en tramas propias de un mundo que solo creía que existía en la ficción.
Una historia sobre la amistad y los primeros amores, de crímenes y abusos en la España más negra, de traiciones y dulces venganzas.
Una ucronía donde nadie podrá demostrar que todo lo que le ocurre a Ramón Santolaya no pasó tal y como él lo cuenta.
Impresiones
La novela comienza el día 24 de octubre de 2019. Los restos de Franco están siendo trasladados en helicóptero desde el Valle de los Caídos hasta el cementerio de Mingorrubio. Ramón Santolaya sigue el viaje desde un coche. De pronto, ve cómo el helicóptero empieza a bambolearse y, finalmente, se estrella. ¿Qué ha pasado? ¿Un atentado? ¿Un accidente?
A partir de este inicio tan llamativo, la novela se retrotrae al pasado; en concreto, al año 1967 en el que nos encontraremos a un joven Ramón Santolaya que, en primera persona, nos irá contando su vida, desde que empieza a trabajar como aprendiz para un agregado comercial norteamericano hasta la actualidad, uno de los hombres más poderosos del país. Alternando entre el presente y el pasado y teniendo como base una leyenda, teoría o lo que queráis llamar que dice que Franco no estaba realmente enterrado en el Valle de los Caídos, Roberto Sánchez nos trae un thriller político que ocupa las últimas décadas de la historia política de España y que nos habla de espías, de amores y desamores, de acontecimientos políticos y sociales y de la radio que en aquellos años hacía compañía en la mayoría de los hogares españoles.
Debo estar muy nostálgica últimamente porque, no sé si por casualidad o por elección, estos meses estoy leyendo bastante años situados en la década de los setenta u ochenta. Y disfrutándolos. Yo nací en los setenta y, por tanto, viví algunos años de la dictadura franquista aunque era solo una niña y no recuerdo mucho más que aquel famoso discurso en el que en la televisión se nos informaba de la muerte del dictador. Lo que sí recuerdo son muchas cosas de la sociedad de la época, cómo se vivía en los hogares, acontecimientos políticos, etc… Y estas novelas me traen recuerdos, olores y sabores a la mente. En este caso, sonidos: la de esa radio que todas las tardes estaba encendida en el salón de mi casa y que escuchaban mi madre y mi tía. Aún recuerdo a Elena Francis, sí. Esas preguntas que mujeres atormentadas le hacían y esas respuestas que hoy probablemente nos llevaríamos las manos a la cabeza. Sólo por evocar esas tardes de radio, me ha merecido la pena leer el libro.
“Quienes manejan los hilos” nos habla del poder. Del que se ejerce directamente y del que se ejerce desde la sombra (que, en muchas ocasiones, es mucho más grande que el visible). Personajes –los fontaneros del poder como se les suele conocer- que mueven los hilos y manejan a quienes formalmente están en el poder como si de marionetas se trataran. Para ello son necesarios muchos conocimientos y subterfugios y mucha labor de espionaje. De eso es de lo que nos habla Roberto Sánchez. O, mejor dicho, Ramón Santolaya. Un protagonista narrador con el que no es fácil –por no decir que es imposible- conectar. No es un personaje simpático ni pretende serlo. Es una opción arriesgada por parte del autor elegir como protagonistas a personajes antipáticos pero parece que es marca de la casa.
La novela se lee fácil. Avanza a buen ritmo y tiene una estructura compleja pero no complicada. Son pocas páginas, unas doscientas cincuenta y bastante diálogo. Todo ello hace que se lea en dos ratos. Al principio por el interés en saber qué pasó con el helicóptero. Al final, ya casi que me daba igual; lo que me importaba era el dibujo de la sociedad setentera que realiza el autor y cómo se maneja Santolaya en las cloacas del poder.
Conclusión final
“Quienes manejan los hilos” es un interesante thriller político sobre el tardo-franquismo y las personas que, desde la sombra, detentan el poder. Una obra de ficción muy bien ambientada en los años del tardo-franquismo, especialmente recomendada para nostálgicos.
Buenos días, Laky:
ResponderEliminarSuena muy interesante lo que cuentas, pese a ello, esta vez no me la llevo, la verdad es que la novela política no me va. No obstante, te felicito como siempre por tu estupenda lectura y reseña.
Un abrazo fuerte y muy feliz día!!
Los thrillers políticos no me terminan de atraer, esta vez no me lo llevo :)
ResponderEliminarHola, los Thrillers políticos suelen gustarme y hace mucho que no leo ninguno. Me lo llevo apuntado por si se cruza en mi camino. Besinos.
ResponderEliminarEste tipo de libros siempre me parecen muy disfrutones, no lo descarto para cuando me apetezca algo así
ResponderEliminarBesos
Qué bueno ese comienzo.
ResponderEliminarNo me importaría leerlo.
Besotes
No pinta mal, aunque admito que los thrillers políticos me cuestan. No sé si me animaré.
ResponderEliminarBesotes!!!
El tema no me disgusta, pero seguro que a maridín si le gusta, es muy ”Él" 😭☺️😉💋
ResponderEliminar¡Hola! Me alegro que sea una historia de la que has disfrutado. Personalmente no es una lectura que me llame especialmente la atención, por lo que en esta ocasión prefiero dejarlo pasar.
ResponderEliminar¡Nos leemos!
No me importaría leerlo si se cruza en mi camino. Un beso
ResponderEliminarAhora mismo no estoy leyendo nada de este tipo, así que por el momento lo dejo pasar. Besos
ResponderEliminarMe lo apunto porque soy de esa generación... Gracias por la reseña
ResponderEliminarPues si fuera otra época o en otro país me apuntaba sin pensar, que a mí estos tejemanejes de poder me fascinan. Pero esto así tan cercano la verdad es que no me apetece mucho.
ResponderEliminarBesos
Hola! No conocía este libro y aunque parece entretenido tengo demasiados del género pendientes que me atraen más así que por ahora lo dejo pasar. Gracias por tu reseña.
ResponderEliminarUn saludo!
No me termina de convencer este libro, lo dejo pasar.
ResponderEliminarSaludos
Gracias Laky, por lo que cuentas tiene muy buena pinta , es una temática que me apetece porque también me trae ciertos recuerdos infantes, por lo que dices somos de la misma década. Besos
ResponderEliminarLeí uno similar, bueno también alrededor de la tumba de Franco, y aunque este tiene buena pinta, tengo la trama de aquel tan fresca que, de momento, no me lanzo. Besos
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