"El aire que respiras" - Care Santos

Hace dos años leí por primera vez algo de Care Santos. Por aquel entonces yo no conocía a esta escritora; lógico por cuanto que, hasta entonces, se había centrado en la literatura juvenil, por la que yo no me suelo prodigar. La novela con la que yo me estrené, fue con la que ella se estrenó en la literatura adultos, la magnífica “Habitaciones cerradas”. Me fascinó esa historia de secretos familiares; tanto que la considero una de mis mejores lecturas del año 2011.

Por eso, en cuanto supe que publicaba nueva novela adulta, la apunté; sin tan siquiera comprobar de qué iba. Me daba igual; tanto me gustó la anterior que, con que sólo se acercase a ella, merecería la pena su lectura. Gracias a la editorial Planeta, hace unos meses que la tengo en casa y he aprovechado el mes de la metaliteratura para leerla.

Éstas son mis impresiones

Care Santos

Nació en Mataró el 8 de Abril de 1970

Escritora y crítica literaria española nacida en Mataró el 8 de abril de 1970. Cursó Derecho y Filología Hispánica en la Universidad de Barcelona, pasando a ejercer después como periodista en medios como Diari de Barcelona, ABC y El Mundo. Fue fundadora de la Asociación de Jóvenes Escritores Españoles, de la que llegó a ser presidenta, y coordinadora del prestigioso sitio web de crítica literaria La tormenta en un vaso.

Como escritora ha publicado especialmente en lengua española, habiendo sido traducida a media docena de idiomas. Ha recibido gran cantidad de premios tanto de novela (finalista del Primavera y ganadora del Ateneo Joven de Sevilla) como de relato (premio Ciudad de Alcalá, premio Ana María Matute y premio Alfonso Cossío, entre otros). Sin embargo, es como autora de narrativa juvenil como ha brillado especialmente, ganando los premio Gran Angular y Edebé, entre otros.

Argumento

Antoni Rogés, presidente del gremio de libreros anticuarios de Barcelona acaba de morir. Su hija Virginia hereda su negocio, la librería Palinuro. Aunque nunca le había interesado la librería de su padre en vida de éste, decide dejar su trabajo como abogada para dedicarse al que fue negocio familiar. Poniendo un poco de orden entre la multitud de libros y legajos que hay en la librería, encuentra un conjunto de papeles –cartas y otros- que pertenecieron a un tal Guillot. Piensa que le podrían interesar a su amiga de la infancia –y pupila de su padre-, ahora escritora y se los deja. Ésta,

Por otro lado, nos encontraremos también en Barcelona pero doscientos años antes. Un francés que llegó para quedarse a vivir en Mataró, tiene una colección de libros prohibidos. Uno de ellos, en especial, es una joya porque ni siquiera es segura su propia existencia: “Memoires d’une femme publique”. Pero es aquélla una época convulsa en la zona y la dominación francesa y los posteriores desmanes que se produjeron, hicieron que los libros fuesen robados y disperdigados por ahí. Son muchos los personajes que a través de los años van a intentar hacerse con la citada colección de libros.enseguida se sumerge en la historia que, a retazos, narran los papeles para construir su nueva novela (¿ésta?)

Datos técnicos

Título: “El aire que respiras”
Autora: Care Santos
Editorial: Planeta
Edición: tapa dura con sobrecubierta
Fecha de publicación: 19/02/2013
592 páginas
ISBN: 978-84-08-03553-4
Precio: 20,90 en papel /14,99 ebook

Impresiones

Tengo sensaciones encontradas respecto a esta novela porque por un lado –el técnico- me ha parecido buenísima pero por otra –el emotivo- me ha decepcionado un poco. El estilo me ha encantado. Es una novela técnicamente perfecta, a la que no puedo achacarle nada, de diez. Pero la historia no me ha acabado de llegar. Intentaré explicaros los motivos…

Empiezo por lo obvio: la preciosa y cuidada edición que nos ofrece la editorial Planeta. El libro resulta muy atractivo a la vista. Tiene tapa dura con una sobrecubierta muy bonita. En ella se ve un legajo antiguo, amarillento por los años, con las esquinas de las hojas deformadas; muy difuminado, vemos una ciudad antigua y, sobre ella, la figura moderna, bastante difuminada también, de una mujer andando. La portada es preciosa pero también lo es el interior. La primera letra de cada capítulo aparece enmarcada en un gris oscuro y un gran tamaño (ocupa seis líneas de texto). Las separaciones dentro de un mismo capítulo vienen diferenciadas por una ramita de acacia con siete hojas (que, como veréis, es una especie de ex libris de uno de los personajes del libro (Guillot). Hay diferentes tipos de letra: además de la normal que ocupa la mayor parte del texto, tenemos letra en cursiva, letras de diferentes tamaños, letra tipográfica imitando a la antigua (por ejemplo, con rabitos alargados o formas redondeadas…). Además, cuando hay un extracto del Diccionario de Excéntricos y Egocéntricos en la Barcelona de antaño, aparece adornado con una especie de guirnalda florida al principio del texto, en la cabecera. Todo ello lo convierte en un libro precioso, que da gusto mirar.

La forma de escribir de Care Santos es una maravilla. En ella podemos reconocer fácilmente el estilo que, al menos a mí, me cautivó en Habitaciones cerradas. El libro está francamente bien escrito. En él Care demuestra perfectamente que domina el arte de escribir, atendiendo a diversos registros, cambiando de estilo y tempus narrativo según lo exige la historia, adaptándose a la idiosincrasia de los personajes, desarrollando estos al máximo… La verdad es que si tuviera que calificar esta novela en cuanto a la forma que está escrita, le daría un diez.

Es una obra muy bien documentada. Care se ha empapado de la historia de Barcelona, de los hechos que ocurrieron durante la dominación francesa y los años posteriores; no sólo de los hechos históricos sino de la vida de la propia ciudad y de sus habitantes. Nos ofrece un fresco precioso de la vida en Barcelona en el siglo XIX. Care juega con el lector haciéndole creer que ha encontrado unos papeles antiguos que son los que tiene en cuenta para formar en torno a ellas una novela: ésta. ¿O no es un juego? ¿Realmente existen esos papeles y realmente la autora los ha utilizado para crear la historia? La verdad es que lo desconozco; no he investigado ni leído entrevistas ni historias similares para ver si la autora ha contado algo del tema. Pero lo cierto es que podría ser, perfectamente. La protagonista del libro, la escritora a la quien la heredera del librero le da los legajos, no tiene nombre. Por lo tanto, bien podría ser la misma Care, no es descabellado pensarlo. Como tampoco lo es pensar que existan documentos antiguos que reflejen los datos que Care nos cuenta, correspondencia de un tal Pérez de León, etc… Así como los personajes históricos que la autora menciona en el libro: José Bonaparte, Fernando VII, etc… existieron, supongo que también lo hicieron todos o gran parte de los personajes que pululan por la novela. Personajes que no son conocidos fuera de su ámbito, circunscrito a la ciudad, pero que es probable que aparezcan en los anales ciudadanos: jefes de policía, militares, alcaldes… Sería interesante comprobar cuánto de verdad hay en lo que la novela nos narra.

La escenificación de la novela es perfecta. Se nota que la autora se ha documentado profundamente sobre la vida de la ciudad en el período histórico en la que se sitúa y sabe crear un escenario que se nos muestra como muy real.

La disección de la personalidad de los personajes es perfecta, incluso en los más secundarios. Todos aparecen dotados de una entidad cierta que los hace parecer muy reales. Pero me he encontrado con el problema de que son muchos, demasiados. Al principio me hice un poco de lío con ellos, no conseguía situarme ni cogerles el truco y ninguno se me hizo especialmente simpático. Hacia la mitad del libro, el tema mejora y los fui situando mejor y empatizando algo más con ellos; al menos con alguno de ellos.

Si bien al principio pensé que la trama situada en la actualidad iba a ser la principal, pronto me di cuenta de que no sería así: el pasado pronto cogió peso y el presente se convirtió en una mera excusa para dotar de una base a las historias del pasado. La autora construye el pasado como si del resultado de una investigación se tratara. Hay una parte narrativa, en la que veremos actuar a los personajes. Hay extractos de documentos antiguos, correspondencia, etc…, que complementarán lo que la narración nos cuenta. Finalmente, hay capítulos de dos libros antiguos (¿reales o inventados por la autora? No lo sé…) en la que se nos habla de la vida de algunos de los personajes que aparecen, normalmente en un papel bastante secundario, en la novela. Por ejemplo, Ramón Casanova, Vicente Salvá, Próspero de Bofarull, etc…

Es una estructura curiosa, una forma diferente de contar una historia. Me ha gustado la forma pero no tanto el fondo porque, en ocasiones, me ha llegado a aburrir un poco.

Si bien, como digo, me ha encantado la forma en la que está escrita, no le puedo dar la puntuación que en cuanto estilo se merecería. Como he dicho alguna vez, no valoro los libros por lo bien o mal escritos que están, sino por lo que a mí me aportan: lo que a mí me han gustado, en definitiva. Y este libro no me ha acabado de convencer. Me ha costado mucho entrar en la historia; de hecho, no sé si he llegado a entrar de verdad en ningún momento. La he leído a gusto porque, de verdad, leerla es un placer, pero la historia no me ha llegado a interesar realmente en ningún momento. Es cierto que al final se va poniendo interesante y que la conclusión es muy buena, pero para llegar a ella hay más de 500 páginas que, a veces, se hacen cuesta arriba. Quizás con unas cuantas menos, hubiese cogido algo más de ritmo e interés…

Conclusión final

Una novela técnicamente perfecta, escrita con una gran maestría, muy bien documentada y con una estructura original, cuya historia no me ha acabado de convencer. Me quedo con “Habitaciones cerradas”, sin duda.

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