"Mil soles espléndidos" - Khaled Hosseini

"Cometas en el cielo" me gustó tanto que, en cuanto supe que Khaled Hosseini había escrito otra novela, supe que tenía que leerla.

Khaled Hosseini

Nació en Kabul, Afganistán, en 1965 pero emigró a EE.UU, junto a su familia, tras las invasión soviética. Mientras trabajaba como médico, escribió su primera novela, Cometas en el cielo, que se convirtió en un gran éxito de ventas en todo el mundo e incluso fue llevada al cine. Yo he leído la novela -como os he dicho más arriba- y me encantó. La película aún no la he visto pero por casa anda esperando su momento. Por lo que me han dicho, es uno de esos raros casos en los que la pelicula está a la altura del libro.Su segunda novela es Mil soles espléndidos.

Argumento

Mariam es hija ilegítima de un rico hombre de negocios. Se cría junto a su madre en una casa perdida, en las afueras de Herat y vive por ver a su padre, quien sube a verla una vez a la semana. Su padre es lo que más quiere en el mundo y su padre también le quiere a ella pero, curiosamente, es un hombre débil de carácter que no sabe imponerse a sus mujeres (curiosamente, digo, por ser afgano, teniendo en cuenta el papel que las mujeres y los hombres cumplen en Afganistán). Cuando su madre muere, su padre le casa con un zapatero que vive en Kabul. Un hombre mucho mayor que ella, viudo, enorme, con mal genio. No le queda más remedio que acatar sus órdenes y se va a vivir con él a la otra punta del país. Pronto empieza a conocer a su marido, Rashid, y lo que ve no le gusta nada...

Años después, en Kabul, en el mismo barrio en el que vive Mariam, cae un misil (es la guerra contra los soviéticos) y una niña de 14 años, Laila, ve morir a sus padres. Hundida en la miseria y herida por la metralla del misil, es recogida por Mariam y Rashid. Cuando descubre que está embarazada de su amor de toda la vida, Tarik, que ha emigrado con sus padres a Pakistán, no le queda más remedio que aceptar la propuesta de matrimonio de Rashid.

Las relaciones entre Laila y Mariam al principio son dificilísimas, pero pronto algo les une: un enemigo común, su esposo y se da inicio a una maravillosa y tierna amistad entre mujeres.

Impresiones

Resumo diciendo que''' es una historia maravillosa con unas protagonistas de altura'''.

Es de esas historias que''' tocan la fibra sensible''' y que te provocan un millar de sensaciones. Una novela que no se lee, sino que se siente, se llora y se disfruta con ella, se vive. Una historia que te atrapa y no te suelta. Siempre me han gustado las historias de mujeres y las historias que transcurren en lugares exóticos. Ésta tiene ambos ingredientes. "Mil soles espléndidos" es una maravillosa historia de amistad entre dos grandes mujeres. Asistimos a cómo era y cómo es la vida de las mujeres en Afganistán. Cuando lees cosas de éstas piensas "qué suerte tuve de nacer en Europa!". Es tremendo ver lo poco que vale una mujer en esos países: su opinión no cuenta para nada, no puede comprar un billete de autobús ni viajar sino es acompañada de un hombre, no puede ni salir a la calle; lo de llevar burka es casi lo de menos! No siempre fue así. La historia transcurre en tres momentos: durante la dominación soviética, durante el reinado de los muyahidines y, finalmente, durante el terror de los talibanes. La época comunista fue la mejor para las mujeres: podían estudiar, trabajar, salir a la calle sin burka... en fin, llevar una vida más o menos normal (aunque estando siempre sometidas a los hombres, eso es una constante en Afganistán). Al expulsar a los rusos, los muyahidinis se hacen con el poder y la cosa se complica para el sector femenino. Pero eso no es nada porque, cuando llegan los talibanes, las mujeres se convierten en esclavas en su propia casa.

En las páginas 256 y 257 de la novela se contienen unas leyes promulgadas por los talibanes. De leerlas se ponen los pelos de punta. Por ejemplo, las mujeres no pueden salir a la calle si no es acompañadas de un pariente masculino so pena de que les azoten, se prohíben los cosméticos, las joyas, mirar a los hombres a los ojos, reirse, hablar si no les preguntan algo, pintarse las uñas (el castigo por infringir esta ley es cortarles un dedo), ir a la escuela, trabajar...No os creáis, que los hombres también tienen lo suyo. tienen que llevar barba con una longitud concreta (si no lo hacen, son azotados), no pueden cantar ni bailar ni jugar a las cartas, juegos de ajedrez, de azar o cometas. No se puede ver películas ni escribir libros.

¿Os imagináis vivir así?

La historia está perfectamente ambientada. Hosseini tiene una facilidad asombrosa para describir el que fuera su país y la forma de vida allí, de tal modo que parece trasladarnos con la imaginación a Kabul. Las casas, la gente, las relaciones familiares y entre las personas están muy bien descritas. Lo hace con mucha sencillez pero, a la vez, con exactitud.

El estilo del escritor es cuidado a la par que sencillo. Usa frases cortas y mucho diálogo lo que hace que sea un libro de lectura muy fácil. Fácil, que no facilona. Porque que el escritor no se enrolle y no use un lenguaje o una sintaxis enrevesada no significa que escriba mal, ni mucho menos. Hosseini escribe bien (a pesar de que con su primera novela pudiésemos dudar de que fuese un escritor prorfesional, creo que con ésta ya ha quedado claro que el éxito de Cometas no fue causalidad), de una forma asequible para todo el mundo. Sus novelas enganchan y no puedes soltarlas. Pero no porque use ese tipo de trampas que suelen utilizar los escritores de thrillers (tipo sorpresita en la última linea del capitulo para que no te quede más remedio que leer el siguiente) sino porque lo que cuenta es tan tan tan interesante que necesitas saber más. Y eso, la curiosidad, unido a la facilidad de lectura, hace que devores páginas sin casi enterarte.

El acierto principal de la novela -acierto que comparte con Cometas en el cielo- es haber construido unos personajes enormes. Si en Cometas eran dos amigos desde la infancia, chicos, en Mil soles espléndidos son dos mujeres, de diferentes edades (una podría ser la madre de la otra), a las que en principio la vida enfrenta y que, por circunstancias, acaban siendo como hermanas. Tanto Mariam como Laila son dos personajes que amas, desde el principio. Es difícil que te llegue una novela si no consigues identificarte o querer a alguno de sus personajes; pues bien, en Mil soles espléndidos, se llega a querer a las dos. Una es fea, inculta y sin ninguna gracia; la otra es bellísima, lista y con todas las gracias del mundo. Pero tú sientes con las dos y quieres para ellas todo lo bueno.

Me ha parecido increíble la sensibilidad que muestra el escritor. La anterior novela era una novela masculina, en el sentido de que los protagonistas eran niños-hombres y que se contaban historias de hombres ( a mi siempre me pareció que el niño rico era un alter ego suyo). Ésta, sin embargo, parece escrita por una mujer. Hay que ver la facilidad que tiene para meterse en la piel de una mujer y transmitirnos lo que ella siente. De veras, me ha resultado asombroso.Me han dicho por ahí que no les apetece leer esta novela porque es una historia triste. Yo os diría que si ese es el motivo, lo olvidéis, He llorado como una magdalena, pero no considero que sea una novela triste. Más bien al contrario; es una novela de amor, una novela de amistad y una novela sobre la vida de unas personas en un determinado y conflictivo lugar. A veces les pasan cosas malas, qué duda cabe, están en guerra y sometidas a un señor, pero la historia está llena de esperanza, de fe, de algría y de amor. Sí es una historia que emociona, y mucho, pero no deja para nada un sabor amargo; al contrario, me ha dejado el regusto de una historia bellísima que he disfrutado un montón.

El final

He dicho al principo que el final le quitaba un poco de nivel a la historia. No sé lo que pensaréis los que ya la habéis leído. Lógicamente, no voy a contaros cómo termina (tampoco es que haya ninguna sorpresa ni nada raro...). Pero sí os diré que no me ha acabado de convencer lo rápido que termina. Así como a lo largo de la historia el escritor se ha deleitado en los detalles, al final me ha dado la impresión de que quería ya terminarla (se habría quedado sin folios?) y quería contarlo todo pero en pocas líneas. Así que las últimas diez o veinte páginas me han parecido un poco telegráficas, demasiado esquemáticas. Hay un montón de frases cortísimas y cuenta un montón de cosas en pocas líneas. Yo hubiese alargado la historia un poco más y hubiese explicado mejor todo. Es como si, por poner un ejemplo, alguien nos cuenta durante 500 páginas cómo conoció a su mujer, deteniéndose en todas las anécdotas que le ocurrieron en los seis meses que anduvo detrás de ella y, de pronto, acabase diciendo "se casaron, fueron felices, tuvieron dos hijos, ella murió a los 60 años, él a los 70, el niño se fue a ultramar y la niña se casó con un ingeniero" y, ala, así, en 20 palabras, nos ha contado cosas que duran toda una vida.Esa, digamos, precipitación en acabar la novela, es la que le ha quitado un puntito. Si bien le he dado cinco estrellas, mi valoración sería un nueve sobre diez (hasta 30 o 40 páginas antes, le hubiese dado un diez). No digo que sea malo el final, sino que es un poco esquemático, me parece que la novela tendría que haber acabado así, como acabó, pero contándolo de forma más detallista.

Conclusión final

Es un libro que me ha encantado. Me ha provocado un montón de sensaciones y de sentimientos. Me ha atrapado desde el principio hasta el final y he disfrutado muchísimo con su lectura.

Desde luego, Hosseini tiene en mí una lectora fiel. Si hay una tercera novela, no dudéis que la leeré. Así que ya sabéis: tenéis que leer tanto ésta como Cometas en el cielo. Ambas me parecen novelas completísimas con todos los ingredientes para contentar a casi todo tipo de lectores.

Saludos.