La editorial d’Época, fiel a su espíritu de traernos clásicos no especialmente conocidos, de calidad contrastada, en preciosas ediciones, nos ofrece en su último libro editado un autor que tuvo tanto éxito en su época como Charles Dickens pero que quizás, al menos aquí, no es tan conocido (o igual esto es una impresión mía). E inaugura con esta novela una nueva colección: la biblioteca Anthony Trollope. Pues éste es el famoso escritor del que os hablo y “La señorita MacKenzie” es la novela que hoy reseño
Como en el caso de todos los libros de la editorial d’Época, “La señorita MacKenzie” es un auténtico lujo. En todos los sentidos. Tanto externamente –no hay más que verlo- como internamente –Trollope, qué duda cabe, es un gran escritor y esta novela, una joya.
Éstas son mis impresiones
Anthony Trollope
Anthony Trollope (1815–1882) fue, junto con Charles Dickens, el más respetado, prolífico y exitoso novelista inglés de la época victoriana.
Poseía gran facilidad para la narración, una fértil imaginación para crear personajes y escenas y un estilo que se gana al lector sin esfuerzo. Tanto es así que, durante los bombardeos sobre Inglaterra en la II Guerra Mundial, las novelas de Trollope eran la lectura favorita en los refugios antiaéreos.
Sus novelas más conocidas se encuentran agrupadas en dos series (en su gran
mayoría inéditas en castellano). La primera de ellas, conocida como «Serie
Barsetshire», incluye El custodio (1855), Las torres de Barchester (1857), El doctor Thorne (1858), La casa rectoral de Framley (1861), La casita de Allington(1864) y La última crónica de Barset (1867).
En la segunda saga, la llamada «parlamentaria o aristocrática» o «Serie Palliser», los personajes principales son aristócratas y políticos de distinto rango. Entre ellas se cuentan ¿Puedes perdonarla? (1864), Phineas Finn (1869), Los diamantes de Eustace (1873), Phineas Redux (1874), El primer ministro (1876) y Los hijos del duque (1880).
Poseía gran facilidad para la narración, una fértil imaginación para crear personajes y escenas y un estilo que se gana al lector sin esfuerzo. Tanto es así que, durante los bombardeos sobre Inglaterra en la II Guerra Mundial, las novelas de Trollope eran la lectura favorita en los refugios antiaéreos.
Sus novelas más conocidas se encuentran agrupadas en dos series (en su gran
mayoría inéditas en castellano). La primera de ellas, conocida como «Serie
Barsetshire», incluye El custodio (1855), Las torres de Barchester (1857), El doctor Thorne (1858), La casa rectoral de Framley (1861), La casita de Allington(1864) y La última crónica de Barset (1867).
En la segunda saga, la llamada «parlamentaria o aristocrática» o «Serie Palliser», los personajes principales son aristócratas y políticos de distinto rango. Entre ellas se cuentan ¿Puedes perdonarla? (1864), Phineas Finn (1869), Los diamantes de Eustace (1873), Phineas Redux (1874), El primer ministro (1876) y Los hijos del duque (1880).
Datos técnicos
Título: “La señorita MacKenzie
Autor: Anthony Trollope
Traductoras: Rosa Sahuquillo y Susanna González
Editorial: d’Época
Colección : Biblioteca Trollope
Edición: tapa dura con sobrecubierta y lazo de punto de lectura
Ilustraciones originales para esta edición de Iván Cuervo
ISBN: 978-84-938972-7-7
480 páginas
P.V.P. 24,50 euros
(Incluye como obsequio marcapáginas y lámina réplica de la ilustración de cubierta)
Autor: Anthony Trollope
Traductoras: Rosa Sahuquillo y Susanna González
Editorial: d’Época
Colección : Biblioteca Trollope
Edición: tapa dura con sobrecubierta y lazo de punto de lectura
Ilustraciones originales para esta edición de Iván Cuervo
ISBN: 978-84-938972-7-7
480 páginas
P.V.P. 24,50 euros
(Incluye como obsequio marcapáginas y lámina réplica de la ilustración de cubierta)
Argumento
Encontramos a nuestra heroína en plena Inglaterra victoriana. Margaret Mackenzie, una «solterona» de mediana edad que ha dedicado toda su vida al cuidado de los demás, recibe una inesperada y considerable herencia tras la muerte de su hermano y, por primera vez en su monótona existencia, se siente libre para buscar cierto grado de felicidad. Margaret decide mudarse entonces de su sombría casa de Londres a un alegre apartamento en la próspera y refinada comunidad de Littlebath donde, tal vez con un ojo puesto en su fortuna, los pretendientes se le van presentando uno tras otro...
En La señorita Mackenzie (1865), Trollope dibuja un retrato conmovedor de las dificultades a las que se enfrentaba una mujer soltera cuando carecía de recursos económicos propios, al tiempo que nos regala una descripción magistral de las costumbres sociales de la época victoriana
La señorita Mackenzie es una «joya» inédita en castellano que contiene mucho del arte del gran novelista inglés. Su dominio de la intriga, la profundidad psicológica de sus personajes, su inconfundible y aguda sátira social, así como el irónico retrato de la sociedad evangélica, le supusieron la profunda admiración de Henry James, Raymond Queneau o Lev Tolstói, quien dijo de él: «Me mata, me mata con su maestría
En La señorita Mackenzie (1865), Trollope dibuja un retrato conmovedor de las dificultades a las que se enfrentaba una mujer soltera cuando carecía de recursos económicos propios, al tiempo que nos regala una descripción magistral de las costumbres sociales de la época victoriana
La señorita Mackenzie es una «joya» inédita en castellano que contiene mucho del arte del gran novelista inglés. Su dominio de la intriga, la profundidad psicológica de sus personajes, su inconfundible y aguda sátira social, así como el irónico retrato de la sociedad evangélica, le supusieron la profunda admiración de Henry James, Raymond Queneau o Lev Tolstói, quien dijo de él: «Me mata, me mata con su maestría
Impresiones
“La señorita MacKenzie” es, como todos los libros de la editorial d’Época, un libro bello, tanto por dentro como por fuera. Las ediciones de d’Época son perfectas y poseer cualquiera de sus libros es un auténtico de lujo. En mi caso, sin ninguna duda, los diferentes libros que de ella tengo ocupan un lugar de lujo en mi biblioteca particular. Siempre repito lo mismo pero es que no me canso de repetirlo: son libros que da gusto ver y tener. El trabajo de esta editorial es espectacular y sus ediciones rezuman calidad por todos los costados. Desde los materiales utilizados, los detalles que incorporan (una reproducción de la fotografía de la cubierta y un marcapáginas), el hecho de que cada ejemplar viene envuelto en plástico para que llegue intacto al lector… Es una editorial muy cuidados y detallista y sus libros valen su peso en oro.
Esta editorial recupera libros clásicos, quizás los títulos no más conocidos de sus autores, de calidad contrastada y los envuelve en una preciosa edición, muy cuidada. En este caso, D’Época recupera a un autor inglés clásico, Anthony Trollope. Nos dice que fue, junto a Charles Dickens, el escritor inglés victoriano más respetado y reconocido. Sin embargo, en nuestro país al menos, no es tan conocido. Probablemente porque muchas de sus novelas no han sido traducidas al castellano. D’Época quiere solucionarlo y ha creado la biblioteca Trollope, inaugurada con este título, y que se verá ampliada posteriormente.
En el caso del libro que hoy me ocupa, el volumen tiene tapa dura con sobrecubierta. Un detalle que siempre me gusta cuando se trata de libros con este tipo de encuadernación es que la tapa tenga la misma ilustración que la sobrecubierta. Me da mucha pena cuando la sobrecubierta es preciosa y la cubierta, sin embargo, va en un anodino color liso. La sobrecubierta puede romperse o extraviarse y en esos casos, el libro queda con una tapa anodina y bastante fea. En los libros en los que la cubierta viene también ilustrada, no corremos ese peligro.
Ya veis en la foto cómo es la ilustración de la sobrecubierta y de la cubierta misma. Se trata de la reproducción de un óleo sobre lienzo titulado A portrait of a lady, su autor es Albert Edelfelt (1889). En ella vemos el retrato de una dama que, por edad y por aspecto, bien podría ser la señorita Mackenzie que da título a la novela.
Un detalle que la editorial tiene siempre con los compradores de sus libros: en el interior encontraremos una cartulina que es una reproducción del óleo y, por consiguiente, de la portada, así como un marcapáginas con el mismo motivo. La reproducción es muy bonita, apta para, por ejemplo, enmarcarla y colgarla en la pared. Un detalle precioso que hemos de agradecer a la editorial.
Siguiendo con los aspectos externos del libro, la calidad del papel es insuperable: unas hojas gorditas que rezuman calidad por los cuatro costados. La letra tiene un tamaño adecuado, el interlineado y, en general, todos los aspectos estéticos son los adecuados… En fin, que estéticamente no se le puede reprochar nada a este libro.
Y, dejando ya de lado los aspectos externos del libro, vamos a hablar de la historia en sí y de las sensaciones que me ha provocado.
La señorita MacKenzie ha vivido siempre a la sombra de un hombre; primero de su padre, a la muerte de éste de uno de sus hermanos, el que permanecía soltero. Tras una larga enfermedad en la que ella le curó abnegadamente, Margaret hereda su fortuna. Tiene 35 años y está soltera por lo que la cuantiosa renta anual que va a recibir, soluciona su futuro entero. Su primera disposición como mujer libre es irse a Littlebath, un lugar donde gente acomodada lleva una vida apacible y relajada. Alquila una casa y se dedica a codearse con la alta sociedad del lugar. Pero pronto se le plantea un problema: la alta sociedad de allí está dividida en dos grupos: los stumfoldianos, que siguen a Stumfold, un famoso párroco del lugar, y los que no lo son. Además, una mujer que sólo había tenido un pretendiente en su vida, en breve se va a encontrar con varios. Y es que, ya se sabe: con dinero cualquier mujer resulta sumamente atractiva.
Resulta esta novela un interesante fresco de la alta sociedad victoriana. Una sociedad que Trollope dibuja como hipócrita, sumamente formalista e interesada en el dinero.
Y conoceremos esta sociedad de la mano de Margaret, quien pertenece y no pertenece a la misma. Le cuesta adaptarse a ciertas cosas pero, sinceramente, considero que lo hace muy bien, demostrando tener mucha más valía personal que la mayoría de los que se mueven por allí.
Margaret MacKenzie es un gran personaje. Me ha dado la sensación de que el autor, al principio, nos la quiere mostrar como una persona no especialmente atractiva: ni está dotada de una gran belleza, ni de agudeza mental, ni una gran simpatía. Sin embargo, aún siendo cierto todo esto, Margaret, poco a poco, me fue conquistando, convirtiéndose, sin duda, en mi personaje favorito puesto que da mil vueltas -´por su valía personal, su saber estar y su catadura moral- a cualquiera de los demás. Le toca lidiar con situaciones difíciles. Le ha tocado desde siempre. Como casi todas las mujeres de su época, siempre había dependido de un hombre. Primero de su padre, al que cuidó hasta que murió. Después de su hermano menor, soltero, quien la acogió en su casa familiar y al que de la misma manera cuidó durante su larga enfermedad. Cuando hereda una gran cantidad de dinero todo parece más fácil pero no va a ser así en absoluto pues, si bien el dinero le abre algunas puertas, también dejará entrar por ellas a seres no del todo deseables. Con muchas dudas pero con valentía y elegancia, Margaret deberá ir superando las pruebas que se le presentan.
El estilo del autor es muy pulcro, cuidado y depurado. Su manera de escribir es exquisita y leerlo es un placer. No obstante, he de reconocer que me costó entrar en la historia. La primera parte, con los stumfoldianos y compañía no me acababa de llegar. La veía tan alejada de mí, todo tan rígido, tan hipócrita, que no conseguía meterme en materia. Pero luego la cosa cambia y el interés crece. Y mucho. Las cosas se complican con varias historias de amor (o lo que sea), con giros y sorpresas hasta que al final me encontré realmente metida en la novela, deseando saber cómo terminaba (por cierto, me ha gustado cómo lo hace). Me ha parecido una novela que va de menos a más.
La ambientación es perfecta. Todo está descrito con muchísimo detalle. Nos podemos hacer una idea perfecta de los escenarios físicos (pocos) donde transcurre la historia así como de la forma de comportarse la alta sociedad victoriana
El autor describe todo con esmero, sin dejar ningún aspecto a la imaginación. La novela es bastante descriptiva, aunque también hay diálogo que agiliza un poco la historia.
Conclusión final
En definitiva, una vez más, un acierto el de la editorial d’Época al recuperar este autor y esta novela.
Podéis comprarlo en Popular libros
Al igual que el resto de novelas de esta editorial, con la que todavía no me he estrenado, me atrae mucho por lo que si tengo oportunidad sin duda lo leeré
ResponderEliminarBesos
Los libros de esta editorial tienen unas ediciones preciosas :D
ResponderEliminarNo he leído ninguno de esta editorial, espero cruzarme con alguno, besotes
ResponderEliminarLa transformación y la tranquilidad que transmite la protagonista contrastan con el resto de los personajes,
ResponderEliminarbesucus
Me suelen gustar mucho las lecturas ambientadas en la época victoriana, además las ilustraciones me han parecido preciosas. Me has dado una excelente idea para regalar. Un beso
ResponderEliminarLos libros de esta esditorial,no solo te transportan a épocas pasada,son objetos de deseo,cuidan la edición y por lo tanto,nos cuidan a nosotros,los lectores y eso se agradece mucho.Tengo algunos y ocupan,como los tuyos un sitio preferente en mi librería. Me has creado curiosidad por conocer a esta señorita.Un beso.
ResponderEliminarTodos los libros de la editorial son chulísimos *.*
ResponderEliminar¡ Que preciosidad!, Aún no está en mi poder pero caerá jajaja. Me encantan los libros de esta editorial. Un besote
ResponderEliminarMe encantaría leerla, parece una novela preciosa y la edición es fantástica; el trabajo de esta editorial es para quitarse el sombrero, sin duda. Muchas gracias por la reseña.
ResponderEliminarBesos.
No sera una de mis prioridades pero si cae en mis manos le hare un hueco.
ResponderEliminarSaludos
La verdad que no soy de este tipo de lectura, pero tampoco puedo decir que no me gusta sin intentarlo, si encuentro tiempo probaré a ver que me parece y ya te comento jeje.
ResponderEliminarBesossss
Me apetece muchísimo este libro, creo que como todos los de la editorial.
ResponderEliminarBesos.
No conocía al autor, mea culpa, pero puede ser una ocasión estupenda de hacerlo porque, además, estas historias "victorianas" me encantan; tomo nota. Un abrazo.
ResponderEliminarYo tengo Philippe Derblay y me pasa como a ti. Es un libro que solo verlo me parece precioso de lo bien editado y publicado que está. Espero seguir leyendo los libros de esta editorial. El que reseñas hoy también tiene muy buena pinta
ResponderEliminarUn beso
Paso de puntillas por la reseña porque tengo la novela esperando para ser leída, la gané en el concurso de reseñas de "El misterio de Gramercy Park" organizado por Rustis y Mustis Leen y Editorial dÉpoca (estoy fardando un poquito, jijijijiji). Cuando la lea, me paso a comentar contigo. Besitos!!!
ResponderEliminarNo me importaría leerla si se 'topara' en mi camino.
ResponderEliminarBesos.
Libro ilustrado ;D Me ha encantado el de El misterio de Gramercy Park, no me importaría seguir leyendo libros de esta Editorial ;D
ResponderEliminarYa le tenía ganas así que ahora mucho más.
ResponderEliminarBesotes y feliz año!!!
Oooohhhh... cómo babeo con las ediciones estas...
ResponderEliminarBesotes
Tengo unas ganas locas de estrenarme con esta editorial, es que sus libros me parecen una maravilla en todos los sentidos. ¡Espero poder hacerlo pronto!
ResponderEliminarLo tengo pendiente y con muchísimas ganas de leerlo!
ResponderEliminarBesos
Dices que el libro te ha gustado pero no es lo que se lee entrelíneas. No se si te lo habrá regalado la editoral y por eso te empeñas en decirlo. Pero durante media reseña nos hablas de su aspecto exterior (con un parráfo en el que repites 5 veces la palabra sobrecubierta por si no nos hemos enterado de que la tiene) y la otra media da la impresión de que o no has leído el libro o no te has enterado de su finalidad. Un sitio que publica y es leído debería cuidar un poco más sus contenidos.
ResponderEliminarDigo que me.ha gustado porque así ha sido y no por ninguna razón que tú solo te imaginas..
EliminarHablo del.aspecto exterior porque el trabajo que hace esta editorial con sus ediciones hay que destacarlo. Una y mil veces, si es necesario.
Por supuesto que me he leído el libro. El que quizás no haya leído la reseña o no haya entendido nada pareces ser tú.