"Versión original" de José Javier Abasolo y "Mortaja de barro" de Carlos Ollo Razquin

 Con estas dos reseñas de hoy acabo con las reseñas pendientes de mis lecturas veraniegas. Un poco más y me dan las uvas sin haberos hablado de todos los libros que leí en verano. Dado que ambas novelas son de la misma editorial -Erein-, ambas son novelas negras y ambas pertenecen a una serie, me ha parecido apropiado reseñarlas juntas.

Empiezo con la primera que leí:

Editorial: Erein

ISBN: 978-84-9109-715-0

Páginas: 398

Sinopsis

Año 2000. Una serie de asesinatos, bautizados por la prensa como ?los crímenes de la cruz flechada?, trajeron de cabeza a los ertzainas encargados de investigar el caso, entre ellos Mikel Goikoetxa, Goiko, quien, a pesar de esforzarse al máximo, no conseguiría resolverlo, en lo que, a posteriori, supuso el único fracaso en su historial como investigador de homicidios.

Año 2019. A pesar de sus reticencias iniciales Goiko, que ahora ejerce como detective privado, accede a participar como asesor en una película que se rueda en Bilbao, basada colateralmente en los no resueltos ?crímenes de la cruz flechada?. A pesar de ser consciente de que pueden removerse viejas heridas, Goiko confía en que pueda servir como coartada para reabrir un caso en el que no ha dejado de pensar en los últimos veinte años. Para ello contará con la providencial ayuda de una joven ertzaina que no participó en su día en la investigación y que, por lo tanto, está en condiciones de aportar una nueva mirada a lo acontecido.

Impresiones

Este libro pertenece a la serie de Goiko, antiguo ertzaina reconvertido en detective privado. Es una serie que me encanta y de la que he leído sus últimas entregas pero no las primeras (quiero decir con esto que no es estrictamente necesario leerlas en orden).

En esta ocasión Goiko va a actuar como asistente en el rodaje de una película. Un trabajo muy curioso para un detective pero su antiguo compañero en la Ertzantza, hoy comisario, se lo ha pedido como un favor personal. Y es que la película está basada -muy libremente- en unos asesinatos cometidos en Bilbao hace veinte años. Unos asesinatos investigados por el entonces ertzaina Goiko y su compañero y hoy comisario. Por eso, este quiere aprovechar para reabrir extraoficialmente la investigación pues nunca se descubrió al culpable.

Esta novela es un libro y una película dentro de un libro, algo de lo más curioso. Por un lado, tenemos la película. Se basa, en teoría, en los asesinatos cometidos hace veinte años pero de una manera muy muy libre. Tanto que la historia ni siquiera transcurre en Bilbao sino en Estados Unidos, que los policías que la investigan se parecen a los ertzainas como un higo a una castaña, que las víctimas no tienen nada que ver... Sin embargo, en la película tienen que dar una solución porque a la gente que va al cine no le gustan los finales abiertos. ¿Quién será el culpable? Pues esa es una de las intrigas ya que nadie lo sabe (o lo dice). Tenemos aquí la primera investigación: la de la película.

La segunda investigación es la que hace Goiko en la actualidad. De forma extraoficial, como detective y no como policía aunque, eso sí, arropado por el comisario y ayudado por una ertzaina jovencita, va a revisar la investigación que se llevó a cabo hace veinte años. Volverán a mirar todos los documentos, interrogar a quienes estuvieron relacionados con las víctimas, etc...

La tercera investigación es la que se realizó hace veinte años a la que, de manera somera, vamos también a asistir.

Como os imaginaréis, con tanta investigación entrecruzada el entretenimiento está garantizado

Todo ello aderezado con el humor socarrón que era típico de Abasolo que, personalmente, me encanta.

Editorial: Erein

ISBN: 9788491096597

Páginas: 357

Sinopsis

Bajo el embalse se encuentra el antiguo pueblo de Eugi, anegado en nombre del progreso. La quietud de la superficie se ve alterada por la aparición de un cadáver que viene a abrir heridas del pasado. El inspector Villatuerta, acompañado de su hija la oficial Nerea Villatuerta y el siempre malhumorado subinspector Javier Erro, tendrán que investigar un nuevo caso en el silencio del pirineo navarro.
La vida en los años cincuenta del siglo pasado, los contrabandistas que burlaban una frontera impermeable, una fábrica de armas abandonada y un hombre que encerraba bajo siete llaves a su mujer y sus hijas. Nada es lo que parece, todos tienen algo que ocultar

Impresiones

En esta ocasión nos encontramos ante la tercera entrega de la serie protagonizada por el inspector de policía Fausto Villatuerta y su hija, la agente Nerea Villatuerta. Las dos anteriores novelas se titulan "¿Quién con fuego?" y "A la luz del vino" y están reseñadas en este blog. En este caso sí he leído la serie en orden. Creo que no habría problema en leerla en desorden pues de que los dos protagonistas son padre e hija os enteraríais enseguida. Aunque, por supuesto, en este caso y en el anterior, siempre mejor leer los libros según se fueron publicando.

Mientras se están realizando labores de limpieza en el embalse navarro de Eugi, se descubre un cadáver. Amortajado en barro, como reza el título. Pronto se descubre que es el cadáver de una chica joven y, poco después, que es el de una chica que desapareció en el año 1971, justo cuando se estaba construyendo la presa. La aparición del cadáver remueve viejas heridas y supone el inicio de varios acontecimientos, el más importante la aparición a los pocos días del cadáver de un hombre. Asesinado.

La acción transcurre en la actualidad y nos informará de cómo los policías Villatuerta van investigando el asesinato del presente e intentando averiguar qué pasó con la joven cuyo cadáver apareció en el embalse. Mediante continuos flashbacks al pasado veremos cómo era la vida a principios de los años setenta en la Navarra rural. En un pueblo en el que se iba a construir un embalse para aprovisionar de agua a los habitantes de la cercana Pamplona. Siempre que se construye un embalse las opiniones de los vecinos son contrapuestas. Mientras algunos ven en él trabajo y posibilidad de prosperar, otros ven el fin de sus vidas tranquilas y, en los casos más extremos de casas próximas a la zona que se anegará, la pérdida de sus viviendas. Además de las investigaciones y del dibujo de la vida rural, al autor le da tiempo a hablar de relaciones familiares y de ciertas actividades no legales que se realizan en zonas como esta...

En mi opinión, esta serie Villatuerta va a más. Cada novela me ha gustado más que la anterior y esta tercera es, por ello, la que más me ha gustado de las tres. Porque la investigación y el escenario en el que transcurre me han parecido muy interesantes. Pero también porque ya voy conociendo a los personajes y voy profundizando en sus vidas. Además de la relación entre padre e hija, en este caso veremos la relación de Villatuerta con su madre, a la sazón enferma de Alzheimer.

Concluyendo, "Mortaja de barro" es una novela interesante y entretenida, con una trama bien llevada y bien resuelta que me ha gustado mucho

Si os han gustado mis reseñas podéis haceros con los libros (y con los anteriores de las respectivas series) a través de los siguientes enlaces: