“El asesinato de Sócrates” - Marcos Chicot

Para mí fue una gran alegría conocer las novelas ganadoras de los premios Planeta de este año. Con la trilogía del Baztán de Dolores Redondo disfruté muchísimo (y también lo he hecho con el Planeta cuya reseña podéis leer aquí). Y a Marcos Chicot le sigo desde el principio: desde que, tras quedar finalista del premio Planeta en el año 2012 con la magnífica “El asesinato de Pitágoras”, la autopublicó en Amazon y posteriormente se publicó en papel –con varias ediciones- por la editorial Duomo. He leído las tres novelas que ha publicado con Duomo y, evidentemente, no podía dejar de leer la finalista del premio Planeta. Ya os adelanto que me ha gustado mucho.

Éstas son mis impresiones

Marcos Chicot

Marcos Chicot (Madrid, 1971). Es licenciado en Psicología Clínica, Psicología Laboral y Económicas. Está casado y tiene dos hijos: Lucía (2009) y Daniel (2012).

Tiene en su haber tres novelas publicadas: El asesinato de Pitágoras, La Hermandad y Diario de Gordon. A lo largo de su carrera literaria ha ganado el Premio de Novela Francisco Umbral, el Premio Rotary Internacional de Novela, y con El asesinato de Pitágoras ha obtenido el Premio per la Cultura Mediterranea 2015 a la mejor novela publicada en Italia. Por este mismo título, la ciudad de Crotona le ha otorgado la distinción Encomio Solenne, y en formato digital ha sido la novela en español más vendida del mundo en el periodo 2013-2016.

Pertenece a la organización Mensa, y dona el 10% de lo que obtiene con sus novelas a organizaciones de ayuda a personas con discapacidad.

@MarcosChicot

www.marcoschicot.com

Datos técnicos

Título: “El asesinato de Sócrates”

Autor: Marcos Chicot

Editorial: Planeta

Premio: finalista del premio Planeta, 2016

Edición: tapa dura con sobrecubierta

Publicado en noviembre de 2016

ISBN: 978-84-08-16318-3

Páginas: 768

PVP: 21.90 €



Argumento

Grecia, siglo v a. C.
Un oscuro oráculo vaticina la muerte de Sócrates.
Un recién nacido es condenado a morir por su propio padre.
Una guerra encarnizada entre Atenas y Esparta desangra Grecia.

El asesinato de Sócrates recrea magistralmente la época más extraordinaria de nuestra historia. Madres que luchan por sus hijos, amores imposibles y soldados tratando de sobrevivir se entrelazan de un modo fascinante con los gobernantes, artistas y pensadores que convirtieron Grecia en la cuna de nuestra civilización. A lo largo de las páginas de esta absorbente novela, brilla con luz propia la figura inigualable de Sócrates, el hombre cuya vida y muerte nos inspiran desde hace siglos, el filósofo que marca un antes y un después en la historia de la humanidad.



Impresiones

Nos encontramos en Grecia, en el siglo V antes de Cristo.

S

Sócrates

ócrates es un filósofo, un hombre muy apreciado en su ciudad Atenas. Tanto que su más íntimo amigo acude a Delfos a hacerle dos preguntas al oráculo: ¿quién es el hombre más sabio? ¿cómo morirá? El oráculo responde que Sócrates y que morirá a manos del hombre de la mirada más clara

Por otro lado, en Esparta una mujer acaba de tener un bebé; un bebé nacido sietemesino y con los ojos de un gris extraordinariamente claro. Esa mujer es la viuda de un hombre cercano al trono a la que ha desposado –como era costumbre en la época- el hermano del fallecido. Éste piensa que la gente puede tener dudas sobre la paternidad del bebé, al haber nacido tan pronto, así que se lo arrebata a su esposa y ordena a la partera que lo mate. Ésta lo deja en una zona en las afueras de la ciudad donde se abandona a los recién nacidos con defectos para que las bestias acaben con ellos.

Un artesano vuelve a casa con su mujer embarazada. Pero unos vándalos les asaltan y hieren gravemente a la mujer. Afortunadamente (o no), una anciana les recoge en su choza y cura las heridas del hombre. No puede hacer lo mismo con las de la mujer pero, cuando el hombre al día siguiente encuentra un bebé envuelto en telas, piensa en un primer momento que es el suyo y que la anciana se lo ha arrancado a su mujer de sus entrañas. Luego se da cuenta de que no es así pero, dado que su mujer ha muerto y le ha dejado solo en el mundo, decide hacerse cargo del niño y llevárselo con él a Atenas como si fuera hijo suyo.

Con estas premisas y en el marco de la guerra del Poloponeso, Marcos Chicot teje una novela histórica llena de aventuras.

Lo primero de todo, deciros que estamos ante una novela histórica pura y dura. Que no os confunda el título ni penséis que esta novela mezcla historia e intriga como “El asesinato de Pitágoras” o “La hermandad”. Por supuesto, hay una cierta intriga (referente, sobre todo, a si lo que dijo el oráculo se cumplirá) pero no estamos ante una novela de misterio sino una novela histórica. Dicho esto, como novela histórica es de lo mejorcito que he leído en mucho tiempo.

C

Acrópolis (Atenas)

omo ya había leído otras novelas suyas no me ha sorprendido lo bien escrita y lo magníficamente documentada que está. Sin duda Marcos Chicot es un experto en la historia de la época, conoce bien sus costumbres, la forma de vida en la primera democracia del mundo (Atenas), las guerras que mantuvo con Esparta, las intrigas políticas y los personajes que han transcendido a través de los siglos. Por esta novela van a pasearse algunos personajes muy conocidos como Sócrates, Platón, Mirón… Y lo van a hacer en su faceta más humana. Y esto es lo que más me ha sorprendido (para bien). Marcos les dota de vida más allá de sus obras y nos muestra cómo pudieron ser. Obviamente, no les conoció en persona pero se nota que ha bebido de las fuentes clásicas para intentar dibujar con precisión –a través de sus obras y de lo que quienes conocieron dejaron escrito sobre ellos- cómo pudieron ser. Al principio me sorprendió muchísimo que el gran filósofo que es Sócrates fuera también un guerrero. ¡Qué desperdicio! -pensaba yo- enviar un hombre así a la guerra. Imaginaos qué hubiera sido de la filosofía si hubiera muerto en una de las primeras batallas en las que participó. Además que, de primeras, no me parecía a mí que un hombre que tanto le daba a la cabeza pudiera ser hábil con las armas. Se me olvidaba, claro, la forma de vida en la Antigua Grecia donde todos los varones eran educados, desde pequeños, para la guerra (por lo que el que nacía con alguna tara que iba a impedir hacer de él en un futuro un buen hombre de armas, simplemente era desechado).

También ha sido interesante ver los vaivenes políticos. Atenas es famosa por su democracia pero el autor nos mostrará sus luces y sus sombras y veremos cómo no era todo tan idílico cómo pudiera pensarse en un principio. Sobre todo si tenemos en cuenta las decisiones tan absurdas que en algunos casos llegaron a tomarse por la asamblea (decisiones de las que al poco se arrepentían).

I

Delfos

gualmente interesante es la forma de vida y, lo que más me ha llamado la atención, es el matrimonio: concertado como en muchas otras culturas antiguas (y no tan antiguas). Lo que más me ha chocado es cómo si una mujer quedaba viuda, un hermano del marido se casaba con ella.

Además el libro es una gran lección de Historia sobre las guerras del Peloponeso que tuvieron lugar entre los años 432 y 404 a. de C entre Atenas y Esparta y sus respectivos alíados.

Los escenarios, las batallas, las diferentes escenas están descritos con mucho detalle y en este sentido resultan muy visuales. La novela abunda en descripciones y, si embargo, la lectura resulta bastante ágil. No es que sea un libro para devorar pues al pasar tantas cosas requiere una lectura más bien pausada pero la lectura resulta sencilla y amena, muy entretenida. Hay partes más movidas que otras, como es lógico. Personalmente, las partes que menos me han gustado han sido las batallas pues es un tema que normalmente no me llama la atención y , además, yo estaba deseando saber qué pasaba con Perseo, Deyanira y Casandra. Por otro lado, ya sabía cuál iba a ser el resultado de la guerra mientras que no sabía qué iba a pasar con los personajes con lo cual esa parte personal tenía más intriga que la otra

Al ser una novela tan extensa, hay unos cuantos personajes paseándose por ella. No excesivos para el volumen de páginas pero sí unos cuantos. La mayoría se afinca en Atenas aunque hay también unos cuantos espartanos; así podremos conocer la forma de vida en ambas ciudades que, la verdad, no tenía mucho que ver por mucho que todos ellos fueran griegos. Mis personajes preferidos han sido Perseo, Sócrates, Deyanira y Casandra. Al que más he odiado ha sido a Aristón aunque también hay otros cuantos dignos del odio más profundo. Pero lo de Aristón ha sido por demás. Un personaje que no hay por donde cogerlo y que ahora se consideraría un auténtico psicópata. Los personajes están muy bien caracterizados y todos ellos parecen personas reales, incluso Sócrates al que dota de una personalidad magnética. Me ha gustado ver que en su época fue muy apreciado pues ya se sabe que en general la fama suele llegar una vez muerto.

La historia transcurre a lo largo de algo más de treinta años, desde el momento en el que nace Perseo hasta poco después del final de la guerra. Será un narrador ominisciente quien nos irá contando todo lo que ocurre, fijándose en todos los personajes y estando presente en todos los escenarios y escenas Con un estilo muy cuidado y descriptivo, el autor hace gala de un lenguaje culto, adecuado a la época y a los personajes. Alterna narración y diálogo aunque predomina la primera. En la novela pasan muchas cosas: además de las diferentes batallas de la guerra, tendremos una preciosa historia de amor, maltrato a la mujer, intrigas políticas, envidias y rencillas, amistades.. Hay un poco de todo y por eso la novela resulta muy entretenida. Pero, sobre todo, es sumamente instructiva: tras leerla mis conocimientos sobre la Grecia clásica han aumentado muchísimo.

Para acabar, es de destacar la “Carta a los lectores” que se recoge al final del libro y que no tiene desperdicio para entender el por qué de la novela y refrescar todo lo que, sin darnos apenas cuenta, hemos aprendido.



Conclusión final

Así como la época romana no me suele llamar en literatura, no ocurre lo mismo con la Grecia clásica. Un período no demasiado contemplado en literatura y que Marcos Chicot conoce a la perfección y nos muestra de forma tan instructiva como amena.

Tengo la suerte de conocer algunos de los escenarios de la novela pues mi luna de miel transcurrió en Grecia y , por supuesto, visité entre otros la Acrópolis y Delfos (un lugar impresionante, por cierto). Y me ha gustado ver esos mismos escenarios no como yo los vi sino como los vieron y vivieron Sócrates y compañía

En definitiva, “El asesinato de Sócrates” es una gran novela histórica. Un premio Planeta muy merecido.

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