jueves, 16 de julio de 2020

"Una tumba en Jerusalén" - José Javier Abasolo


Son ya unos cuantos los libros que he leído de este autor bilbaíno que, lo mismo se calza una novela o saga policíaca, que nos hace reír en el lejano Oeste o, como en este caso, nos trae una obra de ficción histórica llena de nazis, cazanazis y vascos. ¿Queréis saber cómo resulta esta mezcla? Pues seguid leyendo…

Ficha técnica

Editorial: Txertoa
Páginas: 978-84-7148-652-3
ISBN: 312



Sinopsis

Durante la II Guerra Mundial, en el marco de un intento nazi por granjearse la colaboración del nacionalismo vasco, Claude Larrouy, un agente de los servicios de información del gobierno del lehendakari Aguirre en el exilio, se infiltra en la comisaría de Baiona. Desde su puesto, averigua la identidad de un grupo de oficiales de las SS que asesinan brutalmente a mujeres. Terminada la contienda, Larrouy solo tiene un objetivo, localizarlos y matarlos a todos. Y es lo que, con la colaboración del Mossad, ha hecho a lo largo de tres largas décadas. Ahora, en 1973, se encuentra en Madrid, dispuesto a acabar con el último de la lista. Pero no va a ser fácil, pues es la mano derecha en la sombra del delfín de Franco, el almirante Luis Carrero Blanco, que acaba de ser nombrado presidente del gobierno.

Impresiones

En el año 1942 el oficial de las SS Karl Werner intentó atraer a su causa al nacionalismo vasco. Las conversaciones o lo que fueran, se realizaron desde la parte francesa. En esa zona nos encontramos con Claude Larrouy, protagonista de la novela. Larrouy jugará siempre a dos bandas, y a tres y a cuatro, moviéndose como pez en el agua entre nazis, no nazis, cazanazis y gente de todo tipo. Tiene su propia misión en la contienda: averiguar qué miembros de las SS se dedican a torturar y asesinar mujeres. Para ello, consigue que le nombren comisario de la comisaría de Baiona y desde ahí realizará sus investigaciones.

En el año 1973, aún hay nazis huidos a diversos países y camuflados entre la población. El Mossad, cazanazis independientes, el propio Larrouy…; Argentina, Jerusalén y España. A Larrouy sólo le falta por detectar y posteriormente cazar a un nazi: von Frisch, el peor de todos. En un alarde de chulería increíble, éste se quedó en España y, no sólo eso: está muy próximo a las más altas cumbres del poder.

No es fácil hablar del argumento de esta novela porque su estructura es bastante compleja y en ella hay varias tramas que se entrecruzan constantemente, tejiendo una red muy intrincada de historias que, poco a poco, el autor va desenredando. Pero bueno, con lo que os he dicho, ya os podéis hacer una idea de qué trata la novela. Una novela que podríamos calificar de aventuras, de thriller pseudo-histórico, de novela de espías, de intriga…, es un poco de todo.

Aunque “Una tumba en Jerusalén” es una novela de ficción, muchos de los personajes que en ella aparecen así como el trasfondo de la historia, es histórica. Conoceremos la situación de la Francia no ocupada, el gobierno de Vichy, centrándonos en el País Vasco francés. Y, con ello, el autor nos hablará de un hecho que yo desconocía absolutamente: el intento de algunos nazis de llevar a los vascos (y a otros pueblos) a su terreno. Me ha parecido un hecho sumamente curioso y me ha gustado conocerlo.

Aún más interesante aunque ese hecho ya lo conocía –y, de hecho, he leído alguna novela sobre el tema- me parece el tema de los cazanazis. Todos sabemos que muchos nazis huyeron de Alemania, una gran mayoría a países sudamericanos. También sabemos que oficial –y a veces extraoficialmente- se intentó desenmascararles (ya que habían adoptado otros nombres e identidades y a veces se habían metamorfoseado completamente con la población del país que los acogió) y llevarlos ante la justicia por crímenes de guerra. O que , cuando no fue posible, a veces se les condenó y ejecutó sin juicio ni nada. Todo eso lo sabía, he leído lo que he podido sobre el tema y, aún así, no me canso. Me parecen historias tremendas, de una dificultad enorme, persecuciones que se llevaban a cabo durante años, a veces muuuuchos años… Pero me encantan, son historias tremendamente atractivas y a mi personalmente me gusta mucho asistir a esta caza del antes gato perseguido por los anteriormente ratones. Qué menos, ¿verdad? Lo dicho, esta parte la he disfrutado muchísimo.

También tenemos una trama que se sitúa en España en los últimos años del franquismo; en el año 1973 en concreto. Aunque se ocultaba  la población, Franco ya estaba enfermo y había que preparar la sucesión. Por eso, su hombre de confianza Carrero Blanco, es nombrado presidente del gobierno. Éste es uno de los personajes secundarios de la novela. Conoceremos un país que aún vivía con miedo, a una policía la Brigada Político-Social que hacía lo que le daba la gana y a unos tribunales de justicia al servicio del poder.

Y en todos estos escenarios tenemos unos personajes que se mueven como sombras, a un lado y al otro, manteniendo oculta su identidad o, al menos, sus intenciones. Unos personajes de los que no os voy a hablar so pena de desvelar algo que no debo. Lo que sí os digo es que todos ellos son un acierto y que ha sido un gusto conocerlos, especialmente a alguno de ellos.

La novela se estructura en treinta y cinco capítulos de más bien corta extensión. Las diferentes tramas se van alternando, al igual que las localizaciones (Madrid, Jerusalén, Vichy, parís, Baiona, Buenos Aires…) y los tiempos: de julio a septiembre de 1973, últimos meses del año 1942 y años 1958-1960. La estructura de la novela es compleja con tanto salto en el tiempo, tanta trama y subtrama y con unos personajes que no pueden darse a conocer del todo al lector. No obstante, se lee fácil, no tardas en situarte y coger el tranquillo a las diferentes historias y escenarios.

Es siempre un narrador omnisciente quien nos cuenta lo que pasa y lo que hace con un lenguaje cuidado y adaptado a los diferentes escenarios, situaciones y personajes. Es una novela con un ritmo medio tirando a rápido, en la que se mantiene constante la tensión narrativa con unos cuantos giros y sorpresas. El autor va dando migas de información aquí y allá que lo único que consiguen al principio es enredar tremendamente la madeja; así que luego le toca una labor ardua de desenredaje jajaja. Lo que sí os digo es que consigue llevarlo todo a buen puerto y terminar la novela con nota.

Conclusión final

Me ha gustado mucho “Una tumba en Jerusalén”, quizás la novela que más me ha gustado del autor.


8 comentarios:

  1. Intetesantisimo el tema de los nazis y sus conexiones con los Vasco. De este tema, no me canso de leer y aprender. Apuntadisimo queda

    ResponderEliminar
  2. ¡Hola!

    Suena interesante aunque no es una lectura que me apetezca ahora mismo, así que de momento lo dejo pasar :D Pero gracias por la reseña.

    Un besazo! ♥

    ResponderEliminar
  3. Hola! No conocía el libro pero lo cierto es que tiene una pinta estupenda así que me lo llevo apuntado. Gracias por tu reseña, me alegra que te haya gustado.

    Un saludo!

    ResponderEliminar
  4. ¡Hola! Me parece curiosa la gran cantidad de subtramas que incorpora este libro. Ahora mismo no me apetece leer algo así, pero lo tendré en cuenta para futuras lecturas.

    ¡Nos lemos!

    ResponderEliminar
  5. Me gusta lo que nos cuentas sobre esta novela. Hace tiempo ya que no leo nada de Abasolo. Tomo buena nota de ella. Besos.

    ResponderEliminar
  6. Tengo algún libro pendiente de él, a ver que tal está :)

    ResponderEliminar
  7. No lo conocía y aunque de momento lo dejo en stand by quizá le eche un ojo más adelante
    Besos

    ResponderEliminar
  8. Yo tengo varias del autor de las que tú nos has hablado. Esta la tengo que añadir y así todo se convierte en un no parar jejeje...Vaya mañanita que llevo haciendo anotaciones. Besos

    ResponderEliminar

Gracias por tu comentario