"Zona prohibida" - David Cirici

No sé muy bien dónde fue, me enteré hace un par de semanas de un reto de lectura que organizaba la editorial Algar. Se trataba de leer, antes de su publicación, el primer libro de una nueva saga distópica: “Zona prohibida” de David Cirici. La editorial enviaría el libro a los participantes y, tras leerlo, podríamos redactar el primer capítulo de la segunda parte de la saga. El elegido ganaría un montón de dinero en libros además de, y esto es para mi lo mejor de todo, ver publicado su capítulo pues el autor lo utilizará como punto de partida para redactar ese segundo volumen.

He leído dos distopías –Los juegos del hambre y sus continuaciones y Delirium de Lauren Olivier (cuya continuación espero poder leer algún día)- y ambas me gustaron muchísimo. Así que leí atentamente la sinopsis y, a pesar de que febrero estaba copadísimo con un montón de libros urgentes por leer, la novedad de la iniciativa me animó a apuntarme. Ese fin de semana envié un mail a la editorial, el lunes me contestaron y el martes tenía el libro en mis manos. Como dio la casualidad de que justo ese mismo día terminé el libro que estaba leyendo en papel, lo empecé de inmediato. Y en dos días más lo terminé.

Éstas son mis impresiones.

David Cirici

Nació en Barcelona en 1954

Escritor, guionista y publicista, ha desarrollado su carrera literaria en lengua catalana, y es conocido por sus libros, cuentos y relatos para niños.

Ha trabajado para medios como TV3 o TVE en varias ocasiones y para agencias como Saatchi&Saatchi.

Entre otros premios, recibió el Premi Apel•les Mestres en 1984 y el premio EDEBE de literatura infantil con la novela “Musgo”

“Zona prohibida” es su última novela, el inicio de una saga distópica, y ha recibido el Premio R. Muntaner de Literatura Juvenil

Podéis visitar su blog elblogdemusgo.blogspot.com.

Datos técnicos

Título: “Zona prohibida”
Autor: David Cirici
Editorial: Algar, colección Algar Joven
Edición: tapa blanda
Páginas: 296
Publicado por primera vez el 24 de febrero de 2014
ISBN: 978-8498456073

Argumento

Una inundación destruye la escuela en la que vive Daia. Las chicas tienen que salir al exterior pero se encuentran con que el lugar que debía ser su destino en una emergencia como ésa, también ha sido destruido. Pronto llegan unos hombres que las atacan y se llevan a Inge, su hermana gemela, y otra de las chicas, matando a una tercera.

Afortunadamente, Daia y el resto de sus compañeras son recogidas por unos jóvenes de su edad que las llevan a la Comunidad de los Alimentos. Allí empezarán a conocer cómo es el mundo exterior, un mundo aniquilado tras un virus que prácticamente mató a toda la población. Los supervivientes se organizan en comunidades, con reglas muy establecidas, pero también hay algunos –a los que llaman salvajes- que viven por su cuenta. Es un mundo hostil y violento, en el que Daia y sus amigas deberán aprender a sobrevivir.

Impresiones

“Zona prohibida” es la primera entrega de una nueva serie distópica. ¿Qué es distopía? Pues, lisa y llanamente, lo contrario de utopía. Se trataría de una sociedad hipotética indeseable. En literatura y cine, las distopías más habituales son las que hablan de una sociedad futura en la que, tras un terrible cataclismo –guerra, pandemia, etc…- la sociedad se ha visto gravemente diezmada y ha debido adaptarse a unas condiciones de vida muy difíciles.

La distopía es un género –o un subgénero de la fantasía o de la ciencia ficción- que se ha puesto bastante de moda en los últimos años. Una gran parte de la “culpa” se debe al enorme éxito que tuvo la trilogía de “Los juegos del hambre”, tanto en literatura como en el cine. Curiosamente también, muchas de las novelas distópicas son consideradas juveniles; y digo curiosamente porque, aunque de partida quizás lo sean al ser sus protagonistas jóvenes, pienso que son novelas para todo tipo de público, tanto juvenil como adulto. Tanto los más jóvenes como los más mayores podemos disfrutar de distopías como la mencionada Los juegos del hambre, Delirium o esta misma que hoy os comento.

Pero no sólo de distopías juveniles vive el lector. También hay otros, muy conocidas como a continuación veréis, que se enmarcan dentro del género y que van dirigidas directamente al público adulto. Como “1984” de George Orwell, “Un mundo feliz” de Aldous Huxley, o “Ensayo sobre la ceguera” de José Saramago

Aunque estas novelas parten de una premisa fantástica, o incluso de ciencia ficción, pienso que no hay que ser aficionado al género para disfrutarlo. Os pongo un claro ejemplo: yo misma. No me gusta la ciencia ficción, ni demasiado la fantasía; no obstante, he disfrutado mucho con las distopías que he leído. Supongo porque, aunque presenten escenarios hipotéticos y reales, lo hacen de tal manera que uno llega a pensar que lo que describen podría llegar a suceder –de esa manera o de otro similar- en un hipotético futuro…

La premisa de la que parte de la novela, por ejemplo, podría darse perfectamente: un virus muy peligroso, contagioso y mortal que diezma a la población. Los adultos deciden, para salvar a la humanidad, internar a algunos niños y niñas en colegios donde, fuera de cualquier contacto con el exterior, serán formados en todas las áreas del conocimiento.

Años después, los jóvenes han de salir al exterior y se encuentran con una sociedad organizada en Comunidades. Cada una de las cinco comunidades que hay, se dedica a una cosa: Alimentos, Fábrica, etc… Daia y sus amigas irán a la comunidad de alimentos donde todo está también compartimentado y organizado. Las chicas serán distribuidas en los diferentes sectores: invernadero, matadero, congelador, etc…

Daia y las demás irán aprendiendo poco a poco como es la vida en el exterior. En el colegio estaban totalmente aisladas y no tenían relación absolutamente con nadie. Todo estaba informatizado; por no haber, no había ni profesores sino solo hologramas de profesores que les daban clases y les organizaban la estancia. Allí vivían muy bien, con todas sus necesidades cubiertas, pero pronto se darán cuenta de que la vida en el exterior es muy dura: la violencia campa por doquier y es muy difícil sobrevivir.

Podríamos definir “Zona prohibida” como una novela de aventuras o una novela de acción. Pasan continuamente cosas, hay luchas, peleas, amistades, historias de amor, de superación…, hay de todo. Y todo contado con mucho ritmo. No paran de pasar cosas y la novela vuela entre las manos porque, además, resulta de muy sencilla lectura. También podríamos definirla como una novela juvenil al ser todos sus protagonistas adolescentes y jóvenes. Pero definiéndola así, nos quedaríamos cortos pues “Zona prohibida” es eso y mucho más. Bajo la apariencia de una novela sencilla, se esconden reflexiones profundas sobre la sociedad y la humanidad. La educación, los sistemas políticos de control de los ciudadanos, la ocultación de información… son temas que, sutilmente en unos casos, más directamente en otros, se tocan en la historia y que pueden dar lugar a interesantes reflexiones pues muchos de ellos se pueden extrapolar a cualquier sociedad, no necesariamente distópica (la actual, sin ir más lejos). Por ello, podemos decir que es, también, una novela con un cierto toque de crítica social.

En estas novelas, también suele haber una historia de amor y en ésta la hay. Pero no es lo más importante de la historia, ni mucho menos, ya que queda relegada a un segundo o tercer plano, siendo más importantes, sin ninguna duda, las historias de amistad y de amor fraternal.

En cuanto al estilo del autor, su forma de narrar es directa, sin artificios. Con mucho diálogo y mucho ritmo, su lectura resulta muy sencilla y ágil. Es el típico libro para devorar. La historia aparece narrada en primera persona por Daia, cosa que, como ya he comentado en muchas ocasiones, me gusta mucho pues nos acerca más que la fórmula del narrador omnisciente al protagonista de la novela. El lenguaje es sencillo pero cuidado y adecuado a la edad que se supone tienen los personajes de la historia.

El personaje que está mejor perfilado es la propia Daia, como no podía ser de otra forma. Es interesante ver su evolución: de haber vivido entre algodones, pasa de un día para otro a enfrentarse a un mundo hostil y es muy bonito ver cómo se va adaptando: su fuerza y su delicadeza, su valentía y sus miedos… Un personaje muy interesante. Junto a ella, está su hermana gemela Inge que en esta entrega no tiene un protagonismo excesivo por algo que pasa bastante al principio y que no os contaré, pero que, supongo, compartirá protagonismo con ella en las entregas posteriores. También Anke, la mejor amiga de Daia. Y algunas chicos y chicas que conocerán en la comunidad en la que residirán. Daia es la mejor caracterizada, como ya os he dicho; los demás, están perfilados a medias, en función de su importancia en la trama.

El final, tengo que decirlo, queda bastante abierto, lo cual es lógico dado que va a haber más entregas (cuántas, no lo sé). Pero como ya lo sabía al empezarlo, no me ha importado, la verdad. Eso sí, te deja con ganas de que salgan pronto las siguientes para poder leerlas y quedarte con la intriga de lo que pasa pues está claro que se avecinan emociones fuertes…

Conclusión final

Hace tiempo que no leía una distopía y la verdad es que me ha gustado hacerlo. No es un género en el que me haya prodigado apenas pero, no sé si casualidad o qué, siempre que lo he hecho lo he disfrutado muchísimo. Como en este caso.

“Zona prohibida” es una novela la mar de entretenida, que he leído con mucho gusto y que me ha dejado con ganas de más

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