"Mili... ¡Milagro!"

En septiembre recibí un mail de la escritora Sylvia Martín diciéndome que en unos días iba a publicar con la editorial Tombooktu su novela “Mili…¡Milagro!” Me decía que sí quería leerla, la editorial me enviaría un ejemplar. No había oído hablar de la novela, la verdad, pero lo que ví me gustó mucho: parecía ser una novela muy divertida y entretenida, de un género –el chick-lit- que me gusta leer en ocasiones, para compaginar con lecturas más serias o más “negras”. Al poco, Raquel Antúnez, del blog Contra los límites, organizó una lectura conjunta de ese libro a la que, obviamente, me apunté.

La semana pasada lo leí y éstas son mis impresiones

Sylvia Martín

Sylvia Martin es escritora, técnico de consumo y asesora laboral.
En la actualidad colabora con diferentes medios como el Periódico Bajo Gallego, las revistas Odón de Buen o Singularte y tiene un programa semanal en Cadena Ser Bajo Gallego.

Tras la publicación de” La venganza de Lorraine “, un guión teatral, “Mili… ¡Milagro!” es su primera incursión en el mundo de la literatura chick lit.

Datos técnicos

Título : Mili...¡Milagro!
Autora: Sylvia Martín
ISBN Ed. Impresa: 9788415747376
Encuadernación: Rústica
Páginas: 192
Fecha de publicación: Octubre 2013
P.V.P.: 8,95 €
También disponible en ebook con el ISBN: 9788499675466

Argumento

Milagros, Mili, trabaja en una editorial como teleoperadora: su misión es vender enciclopedias por teléfono. Es la más veterana y la que mejores resultados consigue

Tiene algo más de treinta años, se separó tras pocos meses de matrimonio al pillar a su marido con otra y no tiene ninguna relación seria. Mili es simpática, graciosa, todo el mundo se lo pasa genial con ella. Pero no se considera atractiva; se ve gorda y feucha y los hombres sólo la ven como una amiga.

Cuando vuelve al trabajo tras unas semanas de vacaciones, se encuentra con que su jefe ha contratado a un nuevo trabajador: un chico llamado Daniel. Decir que Daniel es guapo, es quedarse corta; es uno de los chicos más guapos que Mili ha visto y tanto ella como sus compañeras enseguida beben los vientos por él.
No cree tener ninguna posibilidad con él y menos andando por ahí Bárbara, la Barbie particular de la oficina. Pero lo cierto es que se caen muy bien y se hacen amigos

Pero Daniel no sólo ha acudido allí a vender libros y Mili pronto va a averiguar qué se traen entre manos él y su jefe. Una serie de malentendidos, enfrenta a Mili con sus compañeras y le hace darse cuenta de quién le apoya realmente.hacen amigos.

Impresiones

Si bien el chick-lit no es mi género favorito, he de reconocer que cuando, de vez en cuando, leo algo del género, lo disfruto un montón. Dentro de este género hay, a mi modo de ver, dos subgéneros: el del chick-lit más divertido (en el que reina, por méritos propios, Sophie Kinsella y del que también sería exponente Bridget Jones) y el más serio, bastante próximo a la narrativa a secas (tipo Marian Keyes). A mí me gusta más el primer tipo; cuando leo chick-lit es para pasármelo bien y, a ser posible, para echar unas risas. Por eso, Sohpie Kinsella es mi escritora de chick-lit favorita.

Pues bien, “Mili…¡Milagro” pertenece a ese chick-lit más divertido. Su parte cómica es importante y, aunque no he llegado a reírme a carcajadas leyéndolo, la sonrisa en mis labios ha sido constante e incluso he soltado alguna que otra risita.

La novela parte de una situación bastante posible: un chico nuevo en la oficina que hace las delicias de las compañeras del sexo femenino. Los personajes también tienen bastantes visos de realidad: la chica gordita y simpática, el bombón despampanante, la amiga incondicional, el chico que siempre está ahí para ofrecer un hombro en el que apoyarse, el jefe de las ideas locas… Ciertamente, todos están bastante estereotipados pero a mí personalmente, en un libro de estas características, no me importa en absoluto

Mili es la auténtica protagonista de la novela. Una chica muy normalita que a mí me ha caído genial. Como casi todas las mujeres, tiene mil complejos y el espejo le devuelve una imagen que no coincide con la que a ella le gustaría; Mili es bastante normalita, le sobran algunos kilos y ella se ve como una chica del montón o incluso menos. Por suerte, tiene mucha gracia y enseguida hace sentirse cómodos a los que están con ella. Mili es la chica graciosa y salada con la que todos quieren estar, al menos como amiga.

Como todas las mujeres, se come el tarro y, a veces, su alocada mente le lleva a alocadas situaciones, quizás absurdas, pero siempre cómicas sin lugar a dudas.
Como todas las mujeres, también, busca el amor y, como casi todas, lo hace en el sitio equivocado. Cuando ve por primera vez a Daniel, “el chico Coca-cola”, cae rendida a sus pies. Por razones de trabajo, es la que más va a relacionarse con él y se nota que él se siente a gusto; ella cree que podría llegar a haber algo más y se hace ilusiones. Pero no es la única interesada en ese bombón y su competencia directa, la Barbie, es mucha chicha. Por suerte, su amiga Charo está ahí para idear, junto a Mili, un ambicioso plan para conquistar al chaval.

Junto a los dimes y diretes por conquistar a Daniel, que dan lugar a situaciones muy graciosas, tenemos las relacionadas con el tema laboral que lo son incluso más. Daniel no sólo ha sido contratado para vender libros sino que el jefe quiere expandir el negocio en un sentido nada convencional y Daniel es un experto en la nueva rama. Cuando Mili conoce hacia dónde se va a dirigir la empresa, alucina en colores y su aprendizaje resulta ser de lo más gracioso.

Los personajes no están especialmente desarrollados pero, como he dicho en otras ocasiones (refiriéndome a libros de este tipo), a mí no me importa. Cuando quiero una gran profundización en la psique de los personajes, busco otro tipo de libros. Si leo libros como éste es porque busco otras cosas, diversión y entretenimiento básicamente, y no me importa que sean más superficiales (de hecho, es, precisamente, lo que busco). Las pocas páginas del libro tampoco dan para un análisis exhaustivo de sus personalidades. En realidad, a la única que acabaremos conociendo es a Mili; los demás personajes son meramente acompañantes y sus caracteres están meramente esbozados. Pero, ya digo, para mí en este tipo de novelas, eso no es un aspecto negativo.

El estilo de la autora es muy sencillo. Frases cortas y directas, mucho diálogo, lenguaje de la calle. El libro resulta muy sencillo de leer y también muy rápido. La verdad es que te lo ventilas en un par de ratos porque la agilidad de la prosa de Sylvia Martín, el interés de la trama y su poca extensión hacen que vuele entre las manos.

El libro está lleno de humor. La autora tiene gracia y la expresa a través de Mili, una chica que me ha encantado, me ha parecido saladísima. Además, aunque las situaciones que vive no tienen nada que ver con las que vivo yo y están un poco exageradas, en el fondo la he sentido como una persona cercana y real.

El libro está dividido en dieciocho capítulos o, en terminología de la autora, “asaltos”. Cada asalto lleva el título de una película. Así, tenemos capítulos titulados , Proposición indecente, La tentación vive al lado, Algunos hombres buenos o Pretty woman. Son capítulos cortos, que se leen en un suspiro. Y cuando terminas uno, estás deseando pasar al siguiente, y luego al siguiente y, así, llegas enseguida al final.

Para que os hagáis una idea del estilo de la autora, os copio un párrafo (no me digáis que no es genial…) :

“Falta de vitamina S…, ya sabes, “sexo” ¿Dónde encontrarla? Tenemos gran variedad. A ver, algunos te confunden por su apariencia, lo que yo llamo el tipo “jamón serrano”. Te engañan a primera vista: la mayoría necesitan más período de curación. Otros como los “tipos fruta del tiempo” suelen estar muy verdes aún y no merece la pena probarlos. ¡Pezqueñines no, gracias, debes dejarlos crecer!. El caso es que la vitamina S en su justa medida es difícil de encontrar. Demasiada demanda y poca oferta. Ah, y no hablemos de los maduros, porque aunque su dichoso marketing te haga creer que la experiencia es un grado, algunos están ya caducados o pasados de fecha”

Finalmente, quería hacer una mención a la editorial Tombooktú es un sello de la editorial Nowtilus. Se dedica a novelas de corte tipo ligero, tipo chick.lit o de humor. No son muchas las que han editado pero yo he tenido ocasión de leer tres de ellas y la experiencia ha sido muy positiva, por lo que estaré atenta a próximas publicaciones. He leído, además de este libro, Redes de pasión de Raquel Antúnez Cazorla y Las tres vidas de Lucía de Astrid Gallardo. Las tres recibieron cuatro estrellas, así que os podéis hacer una idea de lo que me gustaron. Un punto a favor de este sello es, además, el precio de sus libros. Éste, en concreto, cuesta 8,95 euros, un precio que se puede pagar. Es cierto que es una edición sencilla, sin florituras y de un tamaño bolsillo, pero los libros que edita son novedades y lo importante es, al menos para mí, el contenido y no el continente.

Conclusión final

“Mili…¡Milagro” es una lectura amena, divertida, fresca y entretenida, llena de humor, que os hará pasar un par de buenos ratos.

Se ha comparado con Bridget Jones y a mí sí que me la ha recordado, la verdad. Al menos, la protagonista, que es del mismo estilo que Bridget. Por lo demás, el libro me ha gustado más que el de Helen Fielding pues –no me matéis, que ya sé que tiene muchos fans- no le debí coger el truco o algo, pero fue un libro que pasó sin pena ni gloria por mi vida lectora (de hecho, es uno de esos pocos casos en los que me gustó más la película que el libro)

Si os apetece un libro simpático, para pasar un rato muy divertido, Mili Milagro es una muy buena opción.

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