"Animalotes. Episodio 3, La pelusilla contraataca" - Aaron Blabey

A finales del año pasado reseñé la segunda entrega de esta serie de cómics infantiles: "Animalotes. Misión implumable". Ya os dije que a mi hija y a mí nos había gustado mucho y es por eso que no dudé en hacerme con la tercera entrega, que acaba de publicarse


Ficha técnica

Título: "Animalotes. Episodio 3, La pelusilla contraataca" 
Autor: Aaron Blabey
Editorial: Anaya
Formato: tapa blanda, tamaño pequeño
ISBN: 978-84-698-3628-6
Páginas: 144
Precio: 9,99 euros



Aaron Blabey

Aaron Blabey (1974) es un escritor e ilustrador residente en Bendigo, una de las principales ciudades de Australia. Además de como autor, ha hecho sus pinitos en la interpretación. Su trabajo le ha valido varios premios y honores, como cuando fue elegido embajador de la literatura nacional en 2012. Animalotes es uno de sus trabajos más reconocidos.


Sinopsis

Los Animalotes se han metido en un lío muy, muy gordo.
El Sr. Lobo y su banda se enfrentan a un científico loco que es... una cobaya. ¡La pelusilla malvada quiere venganza!
¿Sobrevivirán los Animalotes a este peligroso enemigo?
¿Tienen lo que se necesita para ser héroes?
Y lo más importante: ¿dejarán de intentar comerse los unos a los otros por una vez? ¡Empieza la acción!..


Impresiones

Los Animalotes son una panda de "animalitos "que tienen como misión salvar a otros animales en situaciones de peligro. Tenemos a Sr. Serpiente, Sr. Tiburón, Sr. Lobo, Sr. Piraña y Piernecitas, una "preciosa" tarántula

En la segunda entrega, nuestros héroes tuvieron que salvar a un montón de gallinas hacinadas en una granja. Pero,claro, esa granja pertenecía a alguien y ese "alguien" quiere venganza y les tiende una trampa en la que los pobres caen. ¿Conseguirán salvarse?

Como dije en la reseña del libro anterior, me gustan mucho los cuentos que toman a los clásicos malos y los ponen en papeles de héroes. En este caso, los protagonistas son "malos buenos": un lobo, un tiburón, una serpiente, una piraña y una tarántula. Animales que producen miedo, que siempre acechan al héroe  o a la dulce niñita del cuento. A los pobres siempre les toca el peor papel pero, ¿por qué han de ser siempre malos? ¿es que nunca pueden ser los buenos del cuento? Obviamente, ellos piensan que sí y por eso quieren ser los héroes de la película. A veces les costará y tendrán que luchar contra su instinto y su propia naturaleza pero, con voluntad, todo se consigue. Y si uno quiere ser bueno, lo será, es evidente. En esta ocasión, además, conoceremos al "malo" de la historia. Un malo que es el típico bueno: una cobaya que se ha cansado de ser dulce y achuchable. En realidad, la cobaya es un científico loco que ha inventado una máquina para destruir el mundo. Y está tan loca que no dudamos en que apretará ese famoso botón... Los animalotes no sólo tendrán que salvarse a sí mismos sino también salvar el mundo. ¡Se les acumula el trabajo!

En esta ocasión, la serie introduce dos nuevos personajes: el doctor Mermelada (el malo de la historia, el "no-achuchable" cobaya) y la agente especial Fox (otro típico animal "malo" reconvertido en bueno), que forma parte de la Liga internacional de los héroes

Obviamente, el libro sigue la línea del anterior. El formato es tipo cómic. Las ilustraciones, en blanco y negro, son muy sencillas: de trazos grandes, sin mucho detallismo, resultan visuales y expresivas. Son bastante gamberras, como la historia en sí, y acompañan perfectamente a la historia (casi sin leer el texto, sólo viendo las imágenes, podríamos entender perfectamente la historia)

La historia es sencilla, no tiene palabras ni expresiones especialmente complicadas. No hay demasiadas frases por página y se utilizan diferentes grafías, negrita, mayúsculas... para hacer la lectura más amena y entretenida. 

En principio, según la ficha, es para niños en torno a los ocho años pero yo incluso bajaría un poco la edad hasta los seis-siete pues me parece un libro adecuado para cualquier niño que ya sepa leer

El libro trabaja varios valores. La bondad, el esfuerzo para ser buenos, el trabajo en equipo para conseguir un objetivo común, el no juzgar a uno por su aspecto u origen, la posibilidad de conseguir objetivos difíciles si trabajamos duro en ello, etc... Y lo hace desde el punto de vista del humor, sin duda la mejor forma de inculcar valores y enseñanzas a los niños. Se trata de un libro, ante todo, divertido y entretenido que seguro que les va a gustar; pero, además, y como digo, importa un buen número de enseñanzas útiles

Como he dicho, pertenece a una serie y en esta entrega retoma la historia del anterior por lo que, en principio, de ser posible, mejor leerlos en orden (o, al menos, leer el segundo antes que el tercero porque nosotras el primero no lo hemos leído aún y no tuvimos problemas para entender la historia)

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