"Si tú me dices ven lo dejo todo... pero dime ven" - Albert Espinosa

Hace casi dos años tuve ocasión de leer “Todo lo que podríamos haber sido tú y yo de no haber sido tú y yo”. Realmente el momento en que la leí fue malo; era el primer trimestre de mi embarazo y me sentía francamente mal, con naúseas continuas. Leer era un suplicio y, de hecho, tras este libro, estuve dos meses sin coger un libro. La novela no me gustó demasiado y me quedó la duda de si era culpa del libro o de mi estado. Aún así, no tenía intención de leer esta segunda novela pero una amiga me la ha prestado y, dado lo cortita que es y el título tan sugerente que tiene, decidí dar a este autor una segunda oportunidad.

¿Queréis saber qué me ha parecido? Pues seguid leyendo…

 

Albert Espinosa

Ha trabajado como actor, guionista de cine, teatro y televisión así como de ingeniero industrial superior químico.

Igual su nombre no os suena pero sí os digo algunas de las películas que han salido de su ingenio, la cosa cambiará pues es creador de películas como "Planta 4ª", "Va a ser que nadie es perfecto", "No me pidas que te bese porque te besaré" o "Tu vida en 65'".

Como actor, rodó "Abuela de verano", serie que se emitió en la primera de televisión española, donde hacía el papel de doctor Utrera, que le valió el premio al actor revelación del año.

Colabora habitualmente en programas de radio y escribe una columna semanalmente en El Periódico de Catalunya.

Ha publicado:

.- “Todo lo que podríamos haber sido tú y yo de no haber sido tú y yo”.

.- “Si tú me dices ven lo dejo todo, pero dime ven”

.- “El mundo amarillo”

Datos técnicos

Editada por Grijalbo, edición de gran tamaño, tapa blanda con solapas y sobrecubierta.

ISBN: 9788425346071

Páginas: 201

1ª edición: marzo de 2011

Precio: 15,90 euros

Argumento

El protagonista de la novela es Dani, que se dedica a buscar niños desaparecidos, ya sea esta desaparición voluntaria (huida de casa) o forzosa (secuestro). Es muy bueno en su trabajo, quizás el mejor. Pero no es tan fácil contratarle porque tiene ciertas exigencias: nunca se encarga de la desaparición de un niño menor de diez años o que lleve más de dos días desaparecido. Nunca, salvo en el caso de la novela: pues el niño que ha desaparecido tiene más de 10 años y acaba de desaparecer. No sabe si es por la angustia que transmite el padre del niño, o porque ha desaparecido en Capri, o porque necesita huir de su presente y buscarse en su pasado…, el caso es que acepta el caso.

La búsqueda del niño es, en realidad, una excusa para contarnos quién es y por qué es cómo es; su infancia, su huida, sus conflictos de pareja… Una excusa para buscarse a sí mismo.

Isla de Capri

Impresiones

Mi segunda experiencia con Albert Espinosa ha sido, desgraciadamente, bastante similar a la primera así que me temo que no habrá una tercera. No es un mal libro, no está mal, se lee bien, fácil y rápido…, tan fácil y rápido como se olvida.

Casi casi podría copiar y pegar lo que dije en la otra opinión porque muchas de las impresiones que saqué de la lectura de “Todo lo que pudiéramos haber sido tú y yo de no haber sido tú y yo” se han reproducido con la lectura de este libro.

Como en el caso anterior, es un libro de lectura muy fácil y rápida. Es un libro muy corto. Son 201 páginas divididas en 22 capítulos. Cada capítulo supone dos páginas menos puesto que el título viene en una cara y la cara siguiente aparece en blanco. Y muchos capítulos terminan a mitad de página o incluso tras contener sólo un par de líneas, quedando el resto de la página en blanco. Teniendo esto en cuenta, en realidad la novela ocupa tan sólo unas 150 páginas. Además, la letra es grande y tiene muchísimo diálogo. Conclusión: una lectura que nos ocupará unas dos horas.

Al haber tanto diálogo, además de rápido, se lee fácilmente. Es una lectura cómoda, que cuesta un mínimo esfuerzo.

La historia no está mal. Tampoco es que sea para tirar cohetes pero resulta relativamente interesante. Desde el principio, se nos hace referencia a las causas de la separación de Dani y su pareja; se marea un poco al personal con el asunto diciéndonos continuamente que nos va a explicar las causas. Supongo que se trata así de crear misterio y expectación pero esta técnica es algo peligrosa cuando, en definitiva, lo que se va a contar no es nada del otro mundo. Tampoco creáis que el tema de la desaparición del niño va a conseguir manteneros en tensión porque os equivocaríais de plano: no es una novela negra, ni siquiera de misterio y la búsqueda del niño, en el fondo, no deja de ser una excusa que, además, se resuelve en unas pocas líneas. También se juega un poco al despiste con el tema de la naturaleza de la familia de Dani y lo que ocurrió cuando éste tenía unos 13 años pero tampoco el asunto es para tanto. En definitiva, la historia no deja de ser bastante normal, sin grandes sorpresas ni giros inesperados. Como en el caso de la anterior novela, me ha dejado la sensación de que de ella se podía haber sacado mucha más miga. Que se intenta crear tensión narrativa pero que no se acaba de conseguir plenamente. No me gusta nada eso de “os voy a contar pero lo haré luego”: si tienes algo que contar lo haces ya y no des vueltas con ello porque, cuando al final me entero de qué era eso tan misterioso, no me parece tan interesante como para no haberlo contado al principio. Ésta es una técnica narrativa que puede dar buen resultado en ocasiones, no lo niego, pero que no lo da en este caso; al contrario, consigue que la historia pierda fuelle.

Otro aspecto que no me ha acabado de convencer de la novela es los tintes de autoayuda que tiene. No me gustan nada los libros de este tipo y, aunque en el fondo no lo sea, sí que tiene un ramalazo que se deja ver de vez en cuando. Porque en el fondo es una historia de búsqueda personal, de encontrarse a uno mismo, de superar nuestras limitaciones.

Respecto al tema de los personajes, al único que llegamos a conocer más o menos bien, es al protagonista, a Dani. Ello se debe, entre otras cosas, a que es él mismo el que nos cuenta la historia, en primera persona; técnica que, como he comentado otras veces, acerca mucho más al lector al libro que la narración en tercera persona. Los demás están poco perfilados. Especialmente poco perfilada está la novia del protagonista, de la que acabamos la novela sin conocer prácticamente nada. Y, no es que yo esperase una gran novela de amor, pero lo cierto es que en la novela se vislumbra una historia de amor que podría haber tenido bastante interés pero que el auto no ha querido o sabido desarrollar.

Como aspecto positivo, una serie de reflexiones desperdigadas a lo largo del texto; unas cuantas frases para subrayar como:

.- “No puedo vivir sin tí.. .- Sí que puedes... .- Sí, pero no quiero.”

.- “Amar era recordar que has querido y que te han querido, pero siempre en pasado. Querer es el presente, amar el pasado”

.- “La felicidad no existe. Solo existe ser feliz cada día”

Conclusión final

El libro no está mal pero tampoco destaca por nada. Como en el caso de “Todo lo que podríamos haber sido tú y yo de no haber sido tú y yo” pienso que se podría haberle sacado más partido. Se queda en un sí es no y es una pena.

No es un mal libro pues se lee a gusto, pero podía haber sido mejor. Mucho mejor.

Lo bueno es que no, si decidís leerlo y no os convence, como a mí, sólo habréis perdido dos o tres horas. Pero también, decir que lo mejor de un libro es que se termina pronto es muy triste, no?

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