Tengo pendiente desde que salió “La cocinera de Castamar”. Pero, ya sabéis cómo es esto… son tantos los libros que quiero leer y tan poco el tiempo que, a pesar de que leo mucho, siempre hay alguno que se queda acumulando polvo. Y, como también suele pasar, a veces acabo empezando por el nuevo libro del autor. Reconozco que, además, la sinopsis de éste me llamaba aún más la atención que el de la cocinera.
Éstas son mis impresiones
Ficha técnica
Editorial: Planeta
Páginas: 600
ISBN: 978-84-08-24228-4
Sinopsis
Reino de Castilla, 1283 d. C. Alvar León de Lara, cardenal de la curia, vuelve a petición de su antiguo mentor a la abadía que fue su hogar, que abandonó veinte años atrás con el alma rota por un amor imposible. Su maestro desea revelarle algo que cambiará el curso de la cristiandad.
Sin embargo, la llegada de Alvar desencadenará la tragedia: enigmas tras puertas ocultas, crímenes inexplicables, símbolos que conducen a pistas y pistas que conducen a trampas. Un descenso vertiginoso que le enfrentará a la mujer que desgarró su corazón, a la intransigencia de los cobardes, a la lucha por mantenerse entre los vivos y, finalmente, a los Diez Escalones.
Impresiones
Nos encontramos en el año 1283, en plena Edad Media. Alvar León de Lara, a la sazón cardenal de la curia romana, vuelve a la abadía en la que creció y se formó religiosamente. Su mentor, ahora abad, le ha llamado para confiarle algo. No obstante, no tiene apenas ocasión de hablar con él pues, a las horas de llegar a la abadía, el abad aparece muerto, ¿asesinado?
Alvar decide quedarse una temporada en la abadía para averiguar qué le ha pasado a su mentor, qué quería éste contarle y, cuando más o menos lo sabe, descubrir el gran secreto. La vuelta tras veinte años de ausencia removerá los cimientos de su fe y su vida pues se reencontrará con quien fue su gran amor.
Es inevitable, tras leer la sinopsis e incluso durante la lectura del propio libro que el gran “El nombre de la rosa” de Umberto Ecco se aparezca por la mente del lector. “Los diez escalones” recuerda a dicho libro, un clásico moderno (¿es quizás un homenaje que ha querido hacerle el autor?). Misma época, una abadía de similares características, asesinatos, misterios y secretos por descubrir, un libro misterioso y poderoso y un monje – en este caso un cardenal- que se hace con las riendas de la investigación. Luego los derroteros van por otro lado pero es inevitable que este libro recuerde a aquél.
Los personajes están bien desarrollados. Todo gira en torno a Alvar y su investigación, en la que será ayudado por el joven oblato Mario (que era el adjunto del anterior abad y, por ello, el más cercano a él). La relación entre Alvar y Mario es la de profesor-alumno, muy frecuentemente vista en este tipo de novelas, incluso detectivescas. Me encanta cómo Alvar, dotado de una fina inteligencia, va guiando a Mario, enseñándole a pensar y deducir. Junto a ellos, destaca en el elenco de personajes una mujer la cual dará lugar a una subtrama personal . No os voy a decir quién es ni qué pasó, es mejor que lo descubráis por vosotros mismos pero sí os diré que me ha encantado su personaje, he sufrido mucho por ella y me ha hecho odiar profundamente a alguien que se encuentra muy cerca de ella.
La novela se estructura en cuarenta y cinco capítulos sin titular, numerados con números romanos. Precedidos de una especie de prólogo que no recibe el nombre de tal, le sigue un epílogo. Además, el autor nos ofrece un glosario de términos utilizados, muchos de ellos en latín. Es un narrador omnisciente quien nos va contando la historia, focalizando sobre todo en Alvar y en su investigación. Las descripciones de la abadía y de la vida monacal, sin ser tantas que pudieran ralentizar la acción, nos ponen en situación y nos ofrecen un fresco bastante preciso de cómo era la vida en aquella época y lugar: los horarios, las estancias, las relaciones entre los monjes (no siempre todo lo claras y honorables que debieran), etc… Aunque hay bastante diálogo, predomina la narración pero es ésta tan ágil y amena y pasan tantas cosas, que no se hace pesada en ningún momento: todo lo contrario, las seiscientas páginas del libro –un buen tocho- pasan rápidamente y se leen sin ningún esfuerzo.
Me ha gustado mucho la forma de escribir de Fernando J. Núñez, elegante, cuidada, culta. Creo que se ha documentado muy bien sobre la época y lugar en el que transcurre la novela y sobre la forma de expresarse. Utiliza bastantes expresiones en latín que ayudan a “ambientarse” (tranquilos si no estudiasteis latín porque al final tenéis un glosario en el que se recogen todas ellas).
“Los diez escalones” es fundamentalmente una novela histórica pero también mucho más. Tiene su punto metaliterario al girar toda la trama alrededor de un curioso libro. Contiene una preciosa historia de amor, bonita de verdad. Hay crímenes y aventuras. Hay luchas de poder y crítica social: a la detentación de poder por parte del clero (más preocupado por ganar poder que por rezar) y de la nobleza y también a la situación de las mujeres sometidas primero a su padre y luego a su marido. Con todo ello, comprenderéis que es difícil aburrirse con ella.
Conclusión final
He disfrutado mucho leyendo “Los diez escalones”: una novela histórica que me ha llevado a una de mis épocas favoritas, la Edad Media y a uno de sus escenarios más representativos: una abadía o monasterio. Unos personajes potentes, tanto los buenos como los malos (no os podéis imaginar lo que llegué a odiar a uno de ellos, le estuve deseando durante toda la novela que sobre él recayeran todos los males del infierno). Por mi parte no puedo sino recomendaros su lectura.
Si os ha gustado podéis haceros con él a través de los siguientes enlaces:
La tengo pendiente y lo cierto es que la mayoría de opiniones que he leído, sin ser malas, no son tan positivas como la tuya así que, aunque la tenía prevista para el verano, lo cierto es que me entró la pereza.
ResponderEliminarBesos.
Pues me ha parecido una lectura muy interesante, aunque estoy como tú, ¡no me da la vida para leer! Jajaja
ResponderEliminarYo voy anotando, y ya se verá.
Besitos.
Por la época en que está ambientado en la trama veo que este libro va más con los gustos de alguno de mis compañeros de blog así que se lo voy a comentar
ResponderEliminarEstá entre mis pendientes, espero ponerme pronto con ella y disfrutarla tanto como tu. Besos
ResponderEliminarHola, A mi La cocinera de Castamar me gustó mucho y este quiero leerlo, aunque sobre él he visto opiniones de todo tipo. Besos.
ResponderEliminar¡Hoooola!
ResponderEliminarUf, pues justo acabo de leer otra reseña bastante más negativa y ya no se que pensar.
Me atrae la trama, eso de que tenga tantos elementos, el contexto, y que se de un aire a El nombre de la rosa... pero en fin no se, iré con cuidado si me animo a leerlo jaja
¡besos!
Pese a tu buena reseña, en esta ocasión no me termina de llamar así que lo dejo pasar.
ResponderEliminarBesotes!!!
La sinopsis me ha gustado así como que esté ambientada en la Edad Media, que gire en torno a un libro, que haya asesinatos, ...
ResponderEliminarLo que no me ha gustado tanto es que digas que se parece a El nombre de la Rosa porque ha sido el único libro que después de intentar leerlo tres veces he dejado por imposible (incluso después de ver la película). Hay gente que me mandaría al infierno por decir esto, pero es la verdad.
Así que de momento creo que lo dejo estar.
Un saludo.
Hola! No conocía el libro pero lo cierto es que me gusta mucho la ambientación y tiene pinta de ser muy entretenido así que no lo descarto. Gracias por tu reseña.
ResponderEliminarUn saludo!
La histórica no es lo mío :(
ResponderEliminarLa ambientación de este libro es muy buena. Besos
ResponderEliminarHola. A mí es que la Edad Media dentro del género histórico (si es el fantástico la cosa cambia) se me hace bola. Parece muy interesante pero no me veo con esto.
ResponderEliminarBesos