“Mensajes desde el lago” - Mercedes Pinto Maldonado

Tras leer “Cartas a una extraña” (por segunda vez), me quedé con muchísimas ganas de saber cómo continuaba la historia pues había algunas cosas que necesitaban explicación y profundización. Por suerte, no tardé en leer “Mensajes desde el lago” con el que toda mi curiosidad ha quedado satisfecha

Éstas son mis impresiones.


Mercedes Pinto

Mercedes Pinto Maldonado nació en Granada, allá por los años sesenta, aunque reside en Málaga desde hace años. Está casada y tiene tres hijos. Estudió medicina en las facultades de Granada y Málaga, pero lo dejó para dedicarse de lleno a la pintura y a la literatura. Con varias exposiciones de pintura en su haber, finalmente se decantó por la literatura, porque es la disciplina artística en la que más cómoda se siente y en la que mejor se expresa.

Tiene cuatro libros publicados con Ediciones B con su línea digital B de Ebooks: «El talento de Nano» (novela juvenil), «La última vuelta del scaife» (novela histórica), «Maldita» (novela trágico romántica ambientada en los años cincuenta) y «Pretérito imperfecto» (novela trágico romántica contemporánea); con Ediciones Click, el sello digital de Planeta de los Libros, ha publicado «El fotógrafo de paisajes» (novela negra); con Libros Mablaz «La caja mágica», cuyos derechos ha cedido a la Ciudad de los niños, y «Pretérito Imperfecto en papel» ; y ha autoeditado «Hijos de Atenea» (novela histórica), «Cartas a una extraña» y “Mensajes desde el lago (novelas de suspense y romántica contemporánea) en Amazon.

Si queréis saber muchas cosas de ella, además de seguirla en las redes sociales, podéis pasar por su página web Soy mi palabra http://mercedespinto.wordpress.com/mis-libros/



Datos técnicos

Título “Mensajes desde el lago”

Autora: Mercedes Pinto Maldonado

Editorial: Amazon Publishing

Edición: papel y digital

Páginas: 308 

ISBN: 978-1503938601

Precio: 9,49 euros en papel / 3,99 versión kindle



Argumento

En la esperada segunda parte de Cartas a una extraña, Berta regresa a Londres para recuperar su vida, sobrecogida aún por lo sucedido tras la muerte de su madre.

Ahora no solo sabe quiénes eran en realidad su madre, su hermana y su querida tata, sino que también ha descubierto que tiene una sobrina de nueve años y conocido las mieles de un amor imposible plasmado en las cartas de un desconocido, un pintor misterioso que vive junto a un lago en Estados Unidos y al que finalmente pudo ver por un instante en París.

Berta no tardará en darse cuenta de que su rutina londinense ha perdido todo sentido, no puede olvidar al pintor ni a la sobrina que ha dejado atrás; en España aún le quedan tareas por concluir. Es entonces cuando decide regresar de nuevo y empezar de cero para recuperar el tiempo perdido y sanar las heridas que aún siguen abiertas. Pero el peligro que la persiguió en el pasado vuelve a acechar sus pasos a la espera de dar el zarpazo definitivo.


Impresiones

En “Cartas a una extraña” vimos cómo Berta regresaba a Madrid para hacer el papeleo pertinente consecuencia de la muerte de su madre doña Alberta, una mujer rígida e inflexible con la que no mantenía ningún contacto desde que huyó a Londres siendo poco más que una adolescente. Al regresar al hogar familiar y descubrir unas cartas guardadas en el desván y escritas por un tal Saúl, amante de su hermana, Berta descubre que la maldad de su madre y de su hermana no conocía límites y va a sacar un montón de “muertos del armario”.

En “Mensajes desde el lago”, Berta regresa a Londres para intentar retomar su vida. Pero todo lo que ha pasado le ha cambiado por completo y su trabajo ya no le motiva. Su amor imposible, lo que ha descubierto sobre su familia y la existencia de una hermana-sobrina hace que no pueda concentrarse en nada. Además, en España se ha abierto una investigación y sabe que en cualquier momento le llamarán desde el juzgado para prestar declaración.

Intenta refugiarse en su amiga Mary y en Alfonso, el detective que contrató en España y que tanto le ayudó. Pero lo que ella no sabe es que aún tiene un montón de cosas por descubrir y que la vida le va a volver a golpear fuerte de nuevo.

Es muy muy difícil reseñar esta novela sin decir nada de “Cartas a una extraña”. Además, aunque en teoría puede leerse sin haber leído la anterior, veo muy recomendable leerlas en orden. De leer ésta primero, luego ya no sé si tiene mucho sentido leer la anterior pues nos habremos enterado de todos sus secretos y más y, aunque la segunda se puede entender sin haber leído la primera (porque Mercedes da las suficientes explicaciones para situarse), sí que se quedarán algunas cosas en el tintero, difuminadas o sin el necesario y conveniente desarrollo. Así que, si decidís leer esta bilogía – cosa que os recomiendo- mejor hacerlo por orden

“Mensajes desde el lago” es, como ya lo fuera “Cartas a una extraña” una novela familiar, que nos descubre los secretos de una familia tan peculiar como enrevesada. Pero también es una novela de intriga o suspense pues hay muchos secretos que descubrir y algunos de ellos tienen su vertiente criminal. Y, finalmente, es también una novela de amor: hay dos personajes que van a vivir una bonita historia de amor, quizás un poco irreal o difícil de comprender; de hecho, creo que sólo puede entenderse desde la perspectiva de dos personas que han sufrido mucho, que no han tenido una vida ni unos amores normales.

Mercedes vuelve elegir la narración en primera persona o, mejor dicho, en primeras personas pues serán dos los narradores: Berta y Saúl. Así podremos tener las dos caras de la misma moneda, las dos versiones de una historia en la que ambos están implicados aunque de diferente forma. En este caso Saúl no se expresa a través de cartas sino de una especie de diario o cuaderno en el que va contando su día a día y desnudando su alma. De este modo, podremos saber qué le ocurrió a Saul desde el momento en el que Berta dejó de leer sus cartas (y es que, os recuerdo, en el primer libro no pudo terminar de leer el fajo de cartas)

Una vez más, son dos los protagonistas de la novela aunque con unos secundarios de lujo. Berta y Saúl son los mejor caracterizados de todos los personajes. Ya lo estaban en la entrega anterior pero en ésta aún vamos a conocer más cosas de ellos. Saúl sigue siendo un auténtico cielo, un hombre muy sensible, un artista que roza la genialidad. Y un enamorado del amor, muy ingenuo, sí, pero es que es tan buena gente que es incapaz de pensar que no todo el mundo es igual. Berta es una mujer que parece muy fuerte pero que, en el fondo, es muy sensible y está llena de inseguridades. Crecer sin el amor de tu propia familia es lo que tiene, una forma especial de forjar la personalidad de una persona. Lo que en la entrega anterior descubrió de su propia familia, tanto de su padre como de su madre y su hermana, le ha roto aún más de lo que ya estaba. Y su amor imposible no sirve precisamente para arreglar las cosas. En estas circunstancias, ya no encuentra ningún cobijo en su trabajo que era donde hasta entonces canalizaba todas sus energías y donde ponía toda su ilusión.

Junto a ellos, tenemos al enigmático Alfonso. Ya se veía en “Cartas a una extraña” que Alfonso tenía muchas cosas guardadas en su maleta. En “Mensajes desde el lago”, las va a ir sacando, poco a poco, y así la autora va dando respuesta a muchos de los interrogantes que se nos plantearon a los lectores. Sigue siendo uno de mis personajes favoritos. También conoceremos más a Yolanda, la hermana de Berta. Ya sabíamos que no era precisamente un angelito pero en esta ocasión la vamos a ver actuando en vivo y en directo y será inevitable que la odiemos profundamente. Como contrapunto a tanto dramatismo, finalmente tendremos la ternura de Teresita y la cabeza loca de Mary (amiga de Berta) que aflojarán un poco la tensión dramática que siempre acompañan al resto de personajes.

La novela está dividida en 32 capítulos de corta extensión (unas diez hojas por capítulo). En cada capítulo se nos dice en qué lugar y fecha estamos, empezando por julio de 2014 y acabando en marzo de 2015. La novela abarca, por lo tanto, unos nueve meses de la vida de los personajes. Se irán alternando los capítulos dedicados a Berta y los dedicados a Saúl. Ambos resultan muy interesantes. Quizás me hayan gustado un poco más los de Berta porque son los que más suspense tienen (y ya sabéis lo que me gusta a mí el suspense y el misterio) pero hay que reconocer que la cantidad de cosas que le pasan a Saúl (¡pobre hombre!) hace que tampoco puedas parar de leer su parte.

Es una historia que avanza con buen ritmo. Sigue siendo muy fácil de leer, gracias a la abundancia de diálogos, la alternancia de narradores e historias y el estilo ameno y entretenido que caracteriza a Mercedes Pinto. Como siempre, el estilo de Mercedes es impecable. Su prosa es elegante, entretenida y reflexiva, sabe crear tensión narrativa e intriga en el lector y, si la ocasión lo requiere, también emoción. Son novelas llenas de sentimientos y con el toque justo de intriga que hace que no puedas parar de leerlas.


Conclusión final

“Mensajes desde el lago” es una digna continuación de “Cartas de una extraña” que nos permite atar todos los cabos sueltos que quedaban de esta novela , profundizando en los hechos más interesantes y descubriendo otros muchos que, a veces nos dejarán con la boca abierta, otras nos horrorizarán y otras nos emocionarán. Una muy bonita novela en definitiva.

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