El mes pasado os hablé de “Un hogar junto al mar”, la primera novela de esta tetralogía de Julie Klassen. Como me gustó mucho, no he dudado en leer la segunda y ya tengo preparada también la tercera.
Éstas son mis impresiones
Ficha técnica
Editorial: Libros de Seda
Páginas: 384
ISBN: 978-8419386458
Sinopsis
Cuando los duques de Kent alquilan el vecino Woolbrook Cottage para pasar el invierno, las hermanas Summers reciben el encargo de hospedar a tres miembros del personal de los duques en su hotel. Pronto, no obstante, se darán cuenta de que a los tres hombres les acompañan secretos y de que, además, quizá el amor haya llegado a su hogar. Entretanto, Emily Summers, que sueña con convertirse en escritora, presenta un manuscrito en una editorial local. Pero el desencanto la invade cuando el editor lo rechaza. Sin embargo, un apuesto competidor le promete que tomará en cuenta su novela si primero escribe para él una guía de Sidmouth. Así las cosas, Emily se pondrá manos a la obra con la ayuda del apuesto secretario del duque. Sin embargo, nada resultará fácil cuando, de repente, alguien del pasado se presente en el Sea View y… ¿Qué hará? ¿Seguirá persiguiendo sus sueños literarios?
Impresiones
Los duques de Kent, Eduardo y Victoria deciden pasar el invierno en Sidmouth y alquilan un palacio llamado Woolbrook Cottage. Como no todo el servicio cabe allí, las hermanas Summers alojan en su pequeño hotel a tres miembros del personal.
Si en la primera novela la protagonista fue Viola, en esta lo es su hermana gemela Emily. Emily es una ávida lectora y tiene el sueño de escribir una novela. Empezará por escribir una guía de la población, que un editor le encarga. Mientras tanto, su vida amorosa sale a la palestra y se ve dividida entre un antiguo amor y un recién llegado.
En esta segunda novela se potencia bastante la ficción histórica gracias a la presencia del príncipe Eduardo, hijo del rey Jorge y padre de la futura reina Victoria. Él, su mujer, su pequeña bebé y algunos miembros del séquito real son personajes reales aunque en la novela aparecen como secundarios, dejando el protagonismo a las hermanas Summers e interactuando con ellas en varias ocasiones. Lo que le ocurre al príncipe Eduardo es verídico y ocurrió allí. Aunque, como dice la autora, se toma algunas licencias, lo cierto es que la parte histórica resulta muy interesante.
Pero centrémonos en Emily y su familia. Por lo visto, en cada novela nos centramos en una de las hermanas (son cinco aunque una vive en Escocia) y en este caso toca Emily, la bella y talentosa Emily. Su historia de amor es muy bonita, me ha gustado mucho. Digo lo que dije en la reseña del libro anterior: no pasa nada si, como yo, no sois de leer romántica porque, aunque hay siempre una parte amorosa, no es lo único ni lo más importante; ni, desde luego, empalagosa. Yo diría que prima la historia familiar y esa ambientación histórica (sobre todo en esta novela). El ansia de Emily por escribir le da un punto metaliterario a la novela también muy interesante.
Como la anterior, es una novela fácil de leer y ritmo ágil que deja muy buen sabor de boca
Alabar la labor de la traductora, Noelia Rodríguez, y sus maravillosas e instructivas notas a pie de página, llenas de anécdotas y chascarrillos.