Conocía a Arnaldur Indidason de su serie de novela negra nórdica. No la he leído entera pero, lo que he leído, me gustó mucho. Por eso me decidí a leer su último libro, en el que se adentra en otro género: la novela histórica.Éstas son mis impresiones
Ficha técnica
Editorial: RBA
Páginas: 320
ISBN: 9788411325424
Sinopsis
En Copenhague, un relojero de origen islandés repara un reloj astronómico de más de doscientos años de antigüedad en el palacio real. Allí, recibe la visita del monarca danés, Cristián VII, que, acusado de ser mentalmente inestable, ha sido apartado del trono por su propio hijo.
Las charlas nocturnas entre los dos hombres se convierten en algo habitual y cada vez más confidencial, y el relojero acaba relatando el trágico destino de sus progenitores. Será entonces cuando el rey descubra de una forma descarnada lo que oculta el despiadado ejercicio del poder.
Impresiones
Siglo XVIII. Cristian VII es rey de Dinamarca, Islandia y Noruega. En Copenhague, un relojero de origen islandés llamado Jón Sivertsen encuentra en unas galerías del palacio un antiguo reloj obra del maestro Habrecht. Hace tiempo que no funciona, incluso faltan piezas. Anteriores relojeros intentaron arreglarlo sin éxito. Él también quiere intentarlo.
Mientras trabaja en el reloj, una noche el propio rey se acerca al lugar y entabla conversación con el relojero. Coge esto por costumbre y, a través de estas charlas nocturnas, el relojero le va a contar la historia de su padre y de su ama de llaves.
“El rey y el relojero” es una novela histórica pura y dura. No considero que sea un thriller como dice en la sinopsis porque le falta ritmo para eso. La historia transcurre poco a poco, bastante despacio y carece del ritmo y la intriga que van asociados a la palabra thriller (aunque lleve el adjetivo de histórico). Creo que hay que tener esto claro a la hora de abordar la lectura porque, de otra manera, podemos llevarnos una decepción. Ahora bien, si sois de leer novela histórica, esta podría gustaros.
Me ha gustado la ambientación y la parte histórica me ha resultado instructiva. La verdad es que no sé nada de la Historia de los países nórdicos; ni siquiera sabía que tanto Noruega como Islandia pertenecieron a la corona danesa. También desconocía el odio entre suecos y daneses. Evidentemente, no sabía nada de Cristian VII ni de su familia. Tras la lectura, sé más de lo que sabía y eso siempre es algo positivo.
También me ha gustado mucho descubrir algunas de las costumbres islandesas, entre ellas el horrible código de conducta que castiga como delito (no como pecado) la fornicación, con penas realmente tremendas. He disfrutado con la historia que Jón cuenta al rey. La parte de Islandia es, sin duda, la más bonita. Tanto por lo que pasa, como por sus personajes, como por ser la que más implica. A mí me ha suscitado una rabia tremenda ante tanta injusticia.
Sin embargo, la parte del rey danés me ha gustado menos. Se hace un tanto lenta y repetitiva y, aunque al final entiendes el porqué de la misma y del interés del rey en las historias del relojero, hasta llegar a ese final sientes que no avanzas y que le sobran páginas a la novela (y eso que es más bien corta). Eso sí, el final me ha gustado mucho: contiene alguna sorpresa y da sentido a todo.
Conclusión final
Prefiero al Indridason de Erlendur, el protagonista de su serie negra. No me ha disgustado su incursión en la novela histórica pero tampoco me ha encantado.
Sinopsis
En Copenhague, un relojero de origen islandés repara un reloj astronómico de más de doscientos años de antigüedad en el palacio real. Allí, recibe la visita del monarca danés, Cristián VII, que, acusado de ser mentalmente inestable, ha sido apartado del trono por su propio hijo.
Las charlas nocturnas entre los dos hombres se convierten en algo habitual y cada vez más confidencial, y el relojero acaba relatando el trágico destino de sus progenitores. Será entonces cuando el rey descubra de una forma descarnada lo que oculta el despiadado ejercicio del poder.
Impresiones
Siglo XVIII. Cristian VII es rey de Dinamarca, Islandia y Noruega. En Copenhague, un relojero de origen islandés llamado Jón Sivertsen encuentra en unas galerías del palacio un antiguo reloj obra del maestro Habrecht. Hace tiempo que no funciona, incluso faltan piezas. Anteriores relojeros intentaron arreglarlo sin éxito. Él también quiere intentarlo.
Mientras trabaja en el reloj, una noche el propio rey se acerca al lugar y entabla conversación con el relojero. Coge esto por costumbre y, a través de estas charlas nocturnas, el relojero le va a contar la historia de su padre y de su ama de llaves.
“El rey y el relojero” es una novela histórica pura y dura. No considero que sea un thriller como dice en la sinopsis porque le falta ritmo para eso. La historia transcurre poco a poco, bastante despacio y carece del ritmo y la intriga que van asociados a la palabra thriller (aunque lleve el adjetivo de histórico). Creo que hay que tener esto claro a la hora de abordar la lectura porque, de otra manera, podemos llevarnos una decepción. Ahora bien, si sois de leer novela histórica, esta podría gustaros.
Me ha gustado la ambientación y la parte histórica me ha resultado instructiva. La verdad es que no sé nada de la Historia de los países nórdicos; ni siquiera sabía que tanto Noruega como Islandia pertenecieron a la corona danesa. También desconocía el odio entre suecos y daneses. Evidentemente, no sabía nada de Cristian VII ni de su familia. Tras la lectura, sé más de lo que sabía y eso siempre es algo positivo.
También me ha gustado mucho descubrir algunas de las costumbres islandesas, entre ellas el horrible código de conducta que castiga como delito (no como pecado) la fornicación, con penas realmente tremendas. He disfrutado con la historia que Jón cuenta al rey. La parte de Islandia es, sin duda, la más bonita. Tanto por lo que pasa, como por sus personajes, como por ser la que más implica. A mí me ha suscitado una rabia tremenda ante tanta injusticia.
Sin embargo, la parte del rey danés me ha gustado menos. Se hace un tanto lenta y repetitiva y, aunque al final entiendes el porqué de la misma y del interés del rey en las historias del relojero, hasta llegar a ese final sientes que no avanzas y que le sobran páginas a la novela (y eso que es más bien corta). Eso sí, el final me ha gustado mucho: contiene alguna sorpresa y da sentido a todo.
Conclusión final
Prefiero al Indridason de Erlendur, el protagonista de su serie negra. No me ha disgustado su incursión en la novela histórica pero tampoco me ha encantado.
Creo que esta vez lo voy a dejar pasar, que no estoy viendo mucho entusiasmo en vuestras reseñas.
ResponderEliminarBesotes!!!