"Nada importante" - Mónica Rouanet

Tras “No oigo a los niños jugar”, “Despiértame cuando acaba septiembre” y “Las calles no tienen nombre” (todas ellas reseñadas en el blog, si pincháis en los títulos os llevará a las respectivas reseñas), hoy os hablo de la última novela de Mónica Rouanet: “Nada importante”.

Éstas son mis impresiones

Ficha técnica

Editorial: Roca
Páginas: 315
ISBN: 9788418557897


Sinopsis

En el Madrid de los años noventa, una joven logra sobrevivir a lo que parece un brutal ataque de violencia de género. La prensa y la opinión pública hacen eco de la noticia y, durante días, no se habla de otra cosa. Incluso hay quien afirma que se lo estaba buscando. Cuando por fin despierta del coma, Minerva no recuerda absolutamente nada, ni siquiera a su agresor que, desde ese instante, se mezclará entre sus amigos más íntimos para convertirse en su sombra y permanecer a su lado durante años esperando, a pesar de los cambios sociales, el momento oportuno para finalizar su «autoencargo». Pero ¿las cosas han cambiado tanto como creemos? ¿Por fin la sociedad ha dejado de juzgar a las mujeres que sufren agresiones de este tipo?

Impresiones

Minerva es una joven que vive en Madrid desde hace unos años. Un día fue salvajemente atacada sexualmente. Su vida pendió de un hilo y estuvo un tiempo en coma pero, milagrosamente, consiguió salir adelante. Su ex novio apareció a su lado, muerto de un disparo. Todo parece más que evidente: otro caso de violencia de género en el que el agresor mata (o intenta matar a su pareja o ex pareja) y luego se suicida. Eran los años noventa.

Han pasado unos años, Minerva es una mujer que sigue adelante con su vida sin recordar nada de su agresión. Obviamente, sabe que fue agredida y que su ex novio del pueblo fue tenido por su agresor pero es incapaz de recordar nada de aquel día. Minerva ha conseguido rehacerse y rodearse de personas que le quieren: su madre, su íntima amiga del pueblo y dos hombres que le ayudaron en los noventa y siguen siendo una especie de protectores para ella.

La trama se articula en dos espacios temporales: uno, el que da origen a la historia, se sitúa en el año 1991, momento en el que se produce la agresión. El otro transcurre en la actualidad, justo en los momentos pre-Covid. La autora nos hablará de Miranda, obviamente, pero aprovechará para hablar de la situación de la violencia de género en España en estos dos momentos. Vemos cómo ha evolucionado la sociedad al respecto, no tanto como sería de desear porque aún hay muchas conductas y forma de pensar heredadas de la sociedad anterior pero, obviamente, ha habido mejorías y el tema de la violencia de género se trata de otra manera. En el pasado, una sociedad mucho más machista que la actual, no era nada raro encontrarse con expresiones tales como “se lo merecía”, “se lo estaba buscando”. No sé vosotros pero yo recuerdo, más o menos cuando estaba estudiando Derecho, una sentencia que se hizo famosa porque el magistrado que la dictó culpó a una chica de haber sido violada: y es que, provocación de las provocaciones, ¡llevaba mini falda! Algunos personajes secundarios nos harán ver esa forma de ver a la víctima, como si realmente no lo fuera: una herencia clara de aquella idea de la mujer como pecadora y tentadora. Y no sólo respecto a eso, también respecto a la forma de pensar sobre la situación de la mujer en sí. A este respecto es muy reveladora la actitud de Sagrario, la madre de Minerva: una mujer que adora a su hija, por supuesto, pero que está chapada a la antigua y no entiende por qué se tuvo que ir a estudiar y trabajar a Madrid, por qué dejo a su novio, “un buen partido” (con sus cosas, hija, pero como todos los hombres). A Sagrario le cuesta mucho pero también evoluciona…

No cabe duda de que “Nada importante” es una novela reivindicativa y con un fuerte componente de crítica social. La agresión de género sigue siendo un tema pendiente en la sociedad, historias como las de Miranda son, desgraciadamente, pan de cada día. La autora envuelve toda esta historia en una trama calificada de thriller psicológico aunque yo no sé si esa es la calificación más acertada. Sí que hay una parte de intriga y durante bastante tiempo la autora nos plantea un enigma con dos posibles soluciones: personalmente, me inclinaba por una o por otra según el momento aunque más por la que realmente fue al final, así que digamos que acerté (aunque después de bastante dudar). Pero más que la intriga, yo diría que lo que prima en esta novela es la denuncia social y la situación personal de Minerva, más próximo al drama que al thriller.

Los personajes están bastante bien caracterizados. No son muchos en realidad: Minerva, Sagrario, la amiga del pueblo de Minerva y los dos hombres que acompañan a Minerva en su nueva vida. Además, hay otro personaje misterioso que no sabremos quién es hasta el final pero que lleva a cabo “una misión”, que cumple “autoencargos”. De este y los otros personajes alrededor de Minerva no os cuento nada, es mejor que los descubráis por vosotros mismos.

Como siempre, la prosa de Mónica Rouanet es exquisita. Poco a poco, cuidando cada palabra, con un estilo muy cuidado pero de lectura fluida y sencilla va desgranando una historia que por momentos nos pone los pelos de punta y nos emociona por la situación en la que se encuentra Miranda. Un narrador omnisciente va focalizando en los diversos personajes y no sólo en la protagonista, con eso consigue que el lector vaya siempre por delante de Miranda y las vea venir, aumentando la tensión cuando pintan bastos.

Conclusión final

Me ha gustado “Nada importante”. Una novela reivindicativa, que muestra la situación de la mujer en el pasado y que llama la atención sobre todo lo que queda por hacer. Al mismo tiempo, una novela entretenida con su dosis justa de intriga y tensión. Recomendable.

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