"Cincuenta sombras más oscuras" - E. L. James

Hace como dos meses os hablé de “Cincuenta sombras de Grey”, la primera parte de la trilogía que está en boca de todos. Si recordáis, os dije que me había gustado mucho y que el final me había dejado con ganas de abalanzarme sobre la segunda parte. Pues bien, ya está leída y éstas son mis impresiones.

E. L. James

E.L. James ha desempeñado cargos ejecutivos en televisión. Está casada, tiene dos hijos y vive en Londres. De niña, soñaba con escribir historias que cautivarían a los lectores, pero postergó sus sueños para dedicarse a su familia y a su carrera. Finalmente reunió el coraje para escribir su primera novela Cincuenta sombras de Grey.

Es también la autora de Cincuenta sombras más oscuras y Cincuenta sombras liberadas. Con motivo del fenómeno editorial que ha supuesto su trilogía «Cincuenta sombras», con gran repercusión en los medios y que ya ha vendido millones de ejemplares, la revista Time ha nombrado a E.L. James una de las cien personas más influyentes del año.

Los derechos de traducción ya se han vendido en cuarenta países, y Universal Pictures y Focus Features han comprado los derechos cinematográficos.

Datos técnicos

Título: Cincuenta sombras más oscuras
Autora: E. L. James
Editorial: Grijalbo
Precio: 17'90€. Disponible en ebook por 9,90 euros
Temática: Erótica
ISBN: 9788425348846
Edad: para mayores de 18

Argumento

El principal problema con el que me encuentro a la hora de redactar esta reseña es el tema de los spoilers. ¿Cómo hablar de una segunda parte sin revelar nada de la primera? Creo que es imposible. Por eso, en el argumento, primero voy a copiar la sinopsis que la editorial nos ofrece ya que cualquier interesado la encontrará en cualquier parte. Aunque ya os digo que, en apenas cinco líneas, se las arregla para revelar lo que fue el final de la primera parte. Pero supongo que es imposible no hacerlo… Y luego os daré mi propia sinopsis aunque, si queréis, podéis saltárosla, no sea que revele más de la cuenta.

Sinopsis de la editorial:

Intimidada por las peculiares prácticas eróticas y los oscuros secretos del atractivo y atormentado empresario Christian Grey, Anastasia Steele decide romper con él y embarcarse en una nueva carrera profesional en una editorial de Seattle

Pero el deseo por Christian todavía domina cada uno de sus pensamientos, y cuando finalmente él le propone retomar su aventura, Ana no puede resistirse. Reanudan entonces su tórrida y sensual relación, pero mientras Christian lucha contra sus propios demonios del pasado, Ana debe enfrentarse a la ira y la envidia de las mujeres que la precedieron, y tomar la decisión más importante de su vida

Sinopsis personal:

A finales del libro anterior Ana dejó a Christian no convencida de sus prácticas sexuales. Pero ambos lo están pasando muy mal y no han transcurrido ni cinco días que ya están hablando, viéndose y, por supuesto, cayendo de nuevo en la tentación. Christian lo ha pasado fatal y se da cuenta de que ama a Ana; no la quiere perder por lo que está dispuesto a tener la relación que ella quiere, una relación digamos normal, como cualquier pareja de novios.

Pero las cosas se les complican con la aparición de una ex sumisa, profundamente transtornada que sigue a Ana y pone en riesgo su seguridad. Igualmente, las apariciones esporádicas de Elena (la Sra Robinson de Christian) no van a favorecer precisamente la relación de ambos jóvenes.

Impresiones

“Cincuenta sombras más oscuras” me ha gustado pero no sé deciros si más o menos que la primera parte. Acabo de terminarla ahora mismo, hace cinco minutos y todavía estoy pensando cuáles son mis impresiones. Y es que, resumiendo mucho, la segunda parte me parece mucho menos original que la primera pero me ha gustado cómo evolucionan los personajes.

Efectivamente, la primera parte es muy original. Ya os comenté que sólo había leído un libro erótico antes que ése (“Las edades de Lulú” de Almudena Grandes) por lo que el género ya me resultaba novedoso; pero, además, el tema del BDSM que sólo había oído mencionar en una novela negra para mí era muy original. No sabía qué esperarme y me encontré una novela diferente pero, sobre todo, entretenida y muy adictiva. La segunda parte pierde en originalidad lo cual resulta perfectamente lógico ya que todo el bacalao (en el tema erótico, me refiero) ya estaba vendido en la primera entrega de la trilogía. En este aspecto, no vamos a encontrarnos grandes novedades; hay, eso sí, muchas escenas de sexo pero nada nuevo respecto a las que ya vimos en la anterior novela. Esto puede, quizás, decepcionar a los que esperaban de esta trilogía sexo fuerte pero a los que, como yo, teníamos un poco miedo de que el tema del BDSM (Bondage, Dominación, Sumisión y Masoquismo) nos pareciera demasiado y, precisamente, nos gustó “Cincuenta sombras de Grey” porque no era demasiado fuerte y porque, en el fondo, era una historia de amor, creo que no nos importará. En esta segunda parte se profundiza más en el tema romántico y menos en el erótico. Hay muchas escenas de alto voltaje, por supuesto, pero muchas de ellas son “vainilla” y las que pueden considerarse un poco más “pervertidas” (utilizo términos que aparecen en el propio libro para definirlas) no lo son en demasía; aptas para corazones sensibles, je, je.

La relación entre los personajes va evolucionando al mismo tiempo que lo hacen ellos mismos. Ya no es –si es que alguna vez lo fue- una mera atracción sexual sino una relación de amor. Y es que ya lo vimos claramente en la primera novela: Ana y Christian se habían enamorado. Ellos no parecían darse cuenta –y menos aún Ana, cazurra que es ella…- pero los lectores lo vimos claramente. En esta segunda parte, también ellos se percatarán de lo que existe entre ellos es amor y del bueno por lo que ambos intentarán adaptarse a las preferencias y gustos del otro.

El que más evoluciona es, sin duda alguna, Christian. Ya pudimos intuir en la primera novela que fue aquello tan horroroso que le pasó en la infancia y que le hace ser como es. En la segunda entrega nos contará , con cuentagotas eso sí, algunos aspectos de su pasado que hace que entendamos mejor su forma de actuar. Si en la primera parte Christian era el Amo, el poderoso, el jefe, el que dirigía la vida de todos, en esta segunda parte vemos su lado más vulnerable. Vemos que es un hombre roto por dentro, que no cree en sí mismo ni cree que nadie le podrá querer nunca. Esta vulnerabilidad me ha gustado mucho; me gusta mucho más este Christian vulnerable que el Christian dominante de la primera parte.

Ana también evoluciona aunque no deja de lado su timidez y torpeza pero también su individualismo y terquedad. Pero, aunque aún insegura, va deshibiéndose un poco y soltándose la melena. A veces resulta un poco cargante, no lo voy a negar, con esa necesidad de que le expliquen las cosas con todas las letras y una inseguridad supina que hace que no vea lo que ocurre aunque lo tenga delante de las narices.

Como parte negativa, diré que se me ha hecho un poco repetitiva en alguna ocasión. Al final, todo se reduce a unos cuantos –muchos- encuentro sexuales. Son tantos que, no sé, llegan un poco a cansar aunque la autora sigue transmitiendo perfectamente la tensión sexual que hay entre los protagonistas y creando un buen ambiente erótico-festivo. Cierto que la historia se adereza con la entrada en escena de algunas ex de Christian pero su papel se me ha quedado un poco corto; hubiese preferido que se hubiera extendido un poco más en la historia particular que nuestro chico vivió con cada una de ellas y que se nos hablara también de las demás.

Por lo demás, el libro es tan adictivo como el primero. Se lee fácil y rápidamente a pesar de tener casi 600 páginas. Ello se debe al estilo de la autora, sencillo y sin complicaciones, la abundancia de diálogos y los mails que se envían Ana y Christian (el punto divertido de la historia). Abusa un poco de gestos de los que ya abusó en la novela anterior: morderse el labio, poner los ojos en blanco, referencias a la diosa anterior… pero, bueno, ésa es la nota distintiva de la casa!

Conclusión final

Me ha gustado, no lo voy a negar. Y por los mismos motivos que me gustó el anterior: por ser una novela adictiva dirigida al mero entretenimiento. Que es lo que yo, en definitiva, busco en mis lecturas (si, además de entretenimiento me aportan algo más, genial, esa novela quedará en mi memoria; pero si sólo me aporta entretenimiento, para mí es suficiente porque es lo que busco). Quizás un poco menos que la primera porque ya no tiene el factor sorpresa que sí tenía la primera pero, vamos, que no me arrepiento de haberla leído y que, por supuesto, leeré la tercera entrega.

Eso sí, cuando creía que acababa la novela (antes de darme cuenta de que había una página más), pensé que ojalá acabara ahí. La trilogía podía quedarse en un dúo perfectamente, porque la historia quedaría cerrada y con un final que a mí me hubiese agradado. No veía qué podía aportar una tercera parte (de más de 500 páginas, no lo olvidemos). Sin embargo, esa última página, nos da un adelanto de lo que nos vamos a encontrar en “Cincuenta sombras liberadas” y parece que vamos a leer una novela con más acción (y no me refiero en el ámbito sexual) lo que podría estar muy bien, pienso yo. Así que habrá que leerla a ver qué nos tienen que contar Anastasia y Christian.

¿Y vosotros? ¿Os vais a animar?

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