"La saga de los longevos" - Eva García Sáenz

Hacía un montón de tiempo que tenía pendiente esta novela. De hecho, la tenía en dos formatos: en digital –pues primero se autopublicó en Amazon y ahí fue dónde yo la adquirí- y en papel, pues la gané en un sorteo. Sabía que me iba a gustar pero ya sabéis cómo son estas cosas: iba quedándose en la estantería, esperando (im)pacientemente que pudiera hacerle un hueco… Al final, para “autoobligarme” a leerla de una vez, decidí hacerlo de forma conjunta con otras muchas personas, convocando una lectura simultanéa (que la lectura es una actividad solitaria pero no me digáis que no se disfruta más si se va comentando con otros lectores). Una lectura a la que se apuntó mucha gente y que, ya veremos los demás, pero yo ya os adelanto que he disfrutado un montón.

Éstas son mis impresiones

Eva García Sáenz

Eva García Sáenz de Urturi nació en Vitoria en 1972 y vive en Alicante desde los quince años.

Se diplomó en Óptica y Optometría y durante una década ocupó varios puestos de dirección en el sector óptico. En la actualidad trabaja en la Universidad de Alicante, además de impartir ponencias y cursos de redes sociales.

Casada y madre de dos niños pequeños, durante tres años dedicó todas las noches a documentarse y escribir su primera novela: La saga de los longevos.

Después de esperar una respuesta por parte de las editoriales, decidió autopublicar su novela en Amazon, la mayor librería online del mundo. Para ello contrató su propia portada, diseñó su página web y se lanzó ella sola a dar a conocer su novela en Internet.

Sin más ayuda que la de los propios lectores, que la recomiendan entusiasmados, La saga de los longevos se ha convertido rápidamente en un fenómeno literario en las redes sociales, y en un caso de estudio al superar en ventas a los best sellers tradicionales. Tanto es así que a no tardar fue “fichada” por una editorial, La Esfera de los Libros, que la publicó con una bonita edición.

Hace unos meses, publicó con Espasa, del grupo Planeta, “Pasaje a Tahití” y, aún más recientemente, ha publicado en Amazon “Los hijos de Adán”, continuación de “La saga de los longevos”. Nos chiva un pajarito que se encuentra ultimando la tercera entrega de esta fantástica serie

Datos técnicos

Título: “La saga de los longevos”
Autora: Eva García Sáenz
Editado por La esfera de los libros
Fecha de publicación: 24 de mayo de 2012 
Páginas: 590
ISBN: 978-84-9970-750-1
Edición: Tapa dura con sobrecubierta
Precio: 19,90 edición de tapa dura /2,99 ebook

Argumento

¿Qué harías si tu jefe, un experto arqueólogo, te confesara que nació hace 10.300 años?

Iago del Castillo, un carismático longevo de 10.300 años al frente del Museo de Arqueología de Cantabria, se ve arrastrado, en contra de su voluntad, a dirigir una investigación genética: sus hermanos Nagorno —un conflictivo escita de casi 3.000 años— y Lyra —una huidiza celta de 2.500 años—, cansados de enterrar durante siglos a sus familias efímeras, están obsesionados con identificar su rara mutación y tener hijos longevos.

Adriana, una joven y resuelta prehistoriadora, regresa a su Santander natal, contratada por el museo, dispuesta a rehacer su vida y aclarar el extraño suicidio de su madre, la psicóloga de cabecera de la alta sociedad cántabra, ocurrido quince años atrás.

Iago y Adriana chocan desde el primer momento, aunque entre ellos surge una intensa atracción que ambos intentan ignorar. No imaginan que su pasado determina su destino. Cuando descubran la cruda realidad y reaccionen, las consecuencias de sus actos les dejarán marcados para siempre.

Impresiones

Empiezo diciendo que he disfrutado muchísimo leyendo esta novela y que ya estoy deseando leer la segunda (“Los hijos de Adán”) por lo que, si os animáis, podría convocar también una lectura simultánea de ella…

“La saga de los longevos” nos plantea la existencia de una extraña familia compuesta por personas que tienen muchos pero que muchos años. No son seres fantásticos, no son inmortales; tan sólo son gente que tiene una extraña mutación en unos de sus genes y esta mutación les permite vivir mucho más que el resto de la humanidad. Tanto que alguno de ellos tiene más de dos mil años pues nació en la Prehistoria.

Uno podría asustarse y pensar que estamos ante una novela de ciencia ficción o de fantasía, género que a muchos no nos atrae en absoluto. Y no es el caso pues, si bien no existen personas tan longevas (al menos que yo sepa), la novela es de corte realista e incluso la misma existencia de los longevos viene suficientemente explicado en unas razones científicas: la mutación de un gen. Por lo tanto, no estamos ante una novela de ciencia ficción. No sé realmente en qué género podríamos encuadrarla; probablemente en ninguno en particular salvo que recurramos al socorrido género de la narrativa. Porque es una novela en la que se mezclan varios géneros: narrativa, cierta intriga, romántica, un toque histórico…

Es una novela que me ha parecido muy original por varios motivos. Por supuesto, por el argumento en sí: la mera existencia de unas personas que nacieron en la Prehistoria, han pasado por todos los períodos de la Historia (qué gusto daría hablar con ellos, ¿no os parece?) y en el siglo XXI siguen aparentando unos treinta-cuarenta años, es sumamente original. Y da mucho juego. También me ha parecido original el estilo narrativo de la autora en cuanto a narrar la historia desde dos puntos de vista: el de los dos protagonistas principales, Iago del Castillo y Adriana o Dana. Así, la novela aparece narrada en todo momento en primera persona con la peculiaridad de que esa primera persona varía en cada capítulo: en unos es Iago el narrador, en otros Dana. Es una forma curiosa de contarnos la historia y tiene, además, la ventaja de que nos acerca más a los dos protagonistas, dándonos una doble versión del mismo hecho.

Los personajes están bien desarrollados. La verdad es que, para ser una novela tan extensa, hay muy pocos. Está Adriana que en un principio parece que va a ser la protagonista principal. Adriana es una joven historiadora santanderina que, tras vivir mucho tiempo en Madrid, ha decidido aceptar un trabajo en un Museo especializado en la época que ella mejor domina: la Prehistoria. Hace tiempo que no vive en Santander pues allí murió su madre y la ciudad le trae malos recuerdos.

El museo está regido por una familia: los del Castillo. Héctor, Iago y Jairo. Y allí trabaja también Kira

Iago del Castillo es, junto a Dana, el principal protagonista y co-narrador de la novela. Iago nació con el nombre de Urko hace más de diez mil años. Un tipo imponente, con unos ojos intensamente azules por el que Dana se sentirá atraída desde el minuto uno. Dana y Iago darán lugar a la parte más romántica de la novela.

Héctor del Castillo o Lur es el decano de la familia. El padre de los demás: Iago, Jairo y Kyra. Aunque, evidentemente, esto no se puede desvelar porque no aparenta mucho más que sus hijos. Héctor es el que mantiene unida a su familia. Algo que le resulta sumamente difícil pues Iago y Jairo apenas se soportan (y motivos hay). Pero, ya sabéis, por muchas cosas malas que haga un hijo, un padre siempre le perdona y Héctor perdona una y otra vez a Jairo. Su apellido viene del hecho de haber nacido en la cueva de Monte Castillo (en Cantabria); es todo un cro-magnon.

Jairo del Castillo es un poco más “jovencito”. Nació hace más de dos mil años en Escitia, hijo supuestamente de un jefe guerrero. Mujeriego, pasa de mujer a mujer sin pararse más de unos días con cada una. Pendenciero y mala gente sus fechorías se cuentan por miles.

Kyra es la más jovencita de todos. La hermana pequeña aunque en el museo se hace pasar por una trabajadora más. Nació en La Galia y quiere tener hijos longevos pues no ha podido superar la pérdida de su último marido y de sus hijos “efímeros”. También Jairo quiere tener hijos longevos y por eso Kyra y él utilizan el laboratorio del museo para intentar averiguar cuál es el gen de la longevidad que ellos mismos tienen y descubrir cómo hacer que sus vástagos lo hereden.

Si bien Dana e Iago tienen un poco más de protagonismo, no se puede decir que Héctor, Kyra y Jario sean secundarios porque su papel es casi igual de importante. Serían también protagonistas con un poquito menos de papel.

Junto a todos estos personajes tendríamos algún otro personaje, éstos ya sí que sí secundarios: algunos de los trabajadores del museo, algún miembro de la familia de Dana, etc...

Entre rencillas familiares, el nacimiento de la relación amorosa de Dana e Iago, el descubrimiento por parte de Dana de los últimos días de su madre e investigaciones genéticas, se desarrolla esta entretenidísima novela que, en mi caso, ha volado entre las manos.

La historia transcurre en el presente y de forma lineal pero hay, dispersos a lo largo de la narración, saltos al pasado en forma de recuerdos que tienen los personajes de la novela. Así, nos retrotraeremos por momentos a la Prehistoria así como a la época escita para ver qué fue de nuestros amigos en aquellas épocas. Ni qué decir que los saltos a la Prehistoria me han encantado pues, como he dicho en alguna otra reseña que toca ese período, es uno de mis períodos históricos preferidos y me encanta viajar a él en forma novelada.

Se ve que detrás de la novela hay un importante trabajo documentación de la autora que, sin embargo, se nota sutilmente en la novela: Eva no da datos y datos históricos o técnicos, pero se nota que ha tenido que leer mucho sobre las épocas históricas que describe para hacerlo de forma tan verídica y precisa. Igualmente, se ha documentado sobre genética y los datos que da parecen de lo más pausibles. Pero Eva tiene el acierto de no abrumar con datos –ni históricos ni genéticos- de tal manera que el ritmo y el entretenimiento así como la facilidad lectora, se mantienen incluso en los momentos más “científicos"

La prosa de la autora es cuidada, clara y sencilla, de fácil lectura. Me ha resultado una novela muy entretenida y sumamente fácil de leer. Dio la casualidad que, dado que la llegada de los ejemplares de “Khimera” se retrasó, tuve que empezar a leer esta novela el mismo día que la otra. Y “Khimera” es un thriller que, casi por definición, debería haberme enganchado más. Sin embargo, no fue así pues ambas me engancharon de la misma manera. Aunque “La saga de los longevos” no tenga un ritmo vertiginoso, el ritmo y el interés se mantiene constante y tiene la ventaja de que su lectura es sumamente sencilla; como suelo decir, es el típico libro que te pones a leer y, sin darte cuenta, te has leído cincuenta páginas.

Finalmente, tengo que hacer mención de la preciosa edición que nos ofrece en papel la editorial La esfera de los libros. La portada es preciosa, con ese monumento a los fallecidos en el incendio que asoló Santander en 1941. Y lo bueno es que no sólo está ilustrada la sobrecubierta sino también la cubierta en sí, dando un precioso resultado.

Conclusión final

Ya habéis visto por mi reseña que he disfrutado muchísimo leyendo –y comentando con otras personas en Twitter- esta novela. Tal y como terminaba, daba pie a una continuación. Tres años después ya sabemos que tal continuación existe y se titula “Los hijos de Adán”. Es más, en breve existirá una tercera entrega. Y yo espero leerlas todas.

Podéis comprarlo en Popular libros

  1/2