"El príncipe de los piratas" - Edmundo Díaz Conde

En octubre se pusieron en contacto conmigo desde la editorial Algaida para informarme de la próxima publicación de este libro y ofrecerme la organización, junto a Tatty de El universo de los libros. Tras mirar atentamente la sinopsis y consultarlo con mi “compi”, dije que sí y al poco llegó a casa este libro. Un libro de un género del que no había leído nada antes: una novela de piratas.

Éstas son mis impresiones

Edmundo Díaz Conde

Edmundo Díaz Conde nació en Orense en 1966.

Se licenció en Derecho, carrera que, por convicción, no llegó a ejercer jamás. 
Ha trabajado como asesor editorial y colaborado, entre otras publicaciones, con El Correo de Andalucía y la revista cultural Mercurio (Fundación José Manuel Lara). 
Residió en Orense, Santiago de Compostela, Madrid y, actualmente, en Sevilla. 

Su primera novela, Jonás el estilita, mereció el III Premio Ciudad de Badajoz. 
Su siguiente obra, La ciudad invisible, se alzó con el finalista del XXXIII Premio Ateneo de Sevilla.

El club de los amantes fue su tercera novela publicada y El veneno de Napoleón (finalista del Premio de Novela Histórica Alfonso X el Sabio 2008) ha sido publicada en Rusia.

Concibe la escritura como una pasión, además de un oficio. Concibe la vida como un oficio, algo menos apasionante.

Datos técnicos

Título: “El príncipe de los piratas”
Autor: Edmundo Díaz Conde
Editorial: Algaida
Edición: tapa blanda con solapas
Publicado en octubre de 2013
Páginas: 432
Precio: 18 euros
ISBN: 9788498779592

Argumento

Hubo un tiempo en que corsarios británicos, bucaneros franceses y filibusteros holandeses eran los amos del Caribe. Pero poco se ha contado de piratas españoles como Íñigo Santa Cruz, forzado a convertirse en caballero de fortuna por una patria que desampara a sus propios hijos y los obliga a vagar por el mundo. En aquella misma época también había tesoros fantásticos como el de la Dama del mar, por el que Henry Morgan organizará la mayor flota de filibusteros jamás conocida, ciudades como Panamá, que se dicen inexpugnables y encienden la codicia de los hombres, y mujeres como Elena, capaces de provocar la pasión y la ternura del corsario más insensible. El príncipe de los piratas es la historia de Íñigo Santa Cruz —llamado Lefthand por los ingleses—, tan falsa como todas las leyendas y tan cierta como cualquier historia de piratas.

Iñigo Santa Cruz, también conocido como Lefthand, es rescatado del penal en el que se encuentra cumpliendo condena, en espera de su ejecución. Los rescatadores son dos esbirros de John el Duque, pirata como él, lugarteniente del legendario Henry Morgan. Éste se ha hecho con el mapa que indica dónde está un legendario tesoro, el de la Dama del mar, y necesita la ayuda de Lefthand. Para convencerle, le habla de su hija y de su próxima adopción por el amante de su ex mujer; sólo una inyección de dinero podrá dar a la niña un futuro sin estrecheces. 
Lefthand acepta, recupera su barco, enrola a una variopinta tripulación y pone rumbo al Caribe. Allí se encontrará con traiciones, amistades inesperadas, amores más inesperados aún y, sobre todo, muchas aventuras.

Impresiones

Es ésta la primera novela de piratas que leo y tenía curiosidad por ver cómo resultaba el experimento. Los piratas en pantalla me gustan mucho (salvo Los piratas del Caribe –que no me gustan por su parte fantástica y fantasiosa) e incluso de niña no me perdía una película que contase las aventuras de estos malvados pero románticos personajes.

He de decir que el experimento ha resultado bien y que he disfrutado bastante con la lectura de la novela pues me he encontrado una novela de aventuras que me ha entretenido durante casi una semana.

La novela mezcla, acertadamente, elementos históricos y elementos de ficción. No es, sin embargo, una novela estrictamente histórica pues, partiendo de hechos históricos e introduciendo algún personaje que existió en la realidad, el autor crea una obra de ficción. No obstante, los datos que han salido de la imaginación del autor han sido bien encajados con los que ocurrieron realmente, creando una historia consistente.

Existió realmente Henry Morgan, un pirata galés que llegó a ser sir. Y es cierto que tomó la ciudad de Panamá aunque no buscando un tesoro legendario sino con la finalidad de saquear las posesiones españolas. Es verídico la simulación de rendición de Santa Catalina, la toma del castillo de San Lorenzo y la entrada en Panamá a través de la selva. Lo que, entiendo, es ficticio, es lo relacionado con el tesoro de la Dama del mar y con Iñigo Santa Cruz

Podéis ver la vida y milagros y los datos reales de la conquista de Panamá en la Wikipedia

Pero, aunque el autor da hechos históricos, su intención no es hacer una novela histórica sino una novela de aventuras; una novela que entretenga al lector. Y yo creo que lo consigue.

La novela tiene bastante ritmo e interés aunque, en mi opinión, va de menos a más. Al principio me costó un poco entrar en la historia. Durante la primera mitad más o menos, me estaba gustando lo que leía pero sin más. Todo cambio, eso sí, cuando se hicieron a la mar y, sobre todo, cuando llegaron al Caribe. La segunda mitad del libro tiene más ritmo que la primera, en ella pasan más cosas y se vuelve más y más interesante y más y más entretenida

Iñigo Santa Cruz es el pirata más temido que ha dado a luz la nación española. Afortunadamente, está en prisión. Pero por poco tiempo ya que ya en el primer capítulo unos secuaces de John el Duque asaltarán la prisión y le sacarán. Le llevan ante su amo el que le propondrá un plan: se trata de ayudar al mítico pirata inglés, Henry Morgan, a encontrar el legendario tesoro de la Dama del mar. El pirata inglés ha encontrado un mapa que indica dónde se encuentra enterrado y en dicho mapa se hace referencia a que sólo una persona podrá encontrarlo. Morgan y John el Duque piensan que esa persona es Santa Cruz. Éste se resiste pero amenazas veladas a su hija consiguen cambiar su voluntad.

Un montón de naves se embarcan hacia el Caribe con la misión de asaltar la ciudad de Panamá, donde suponen se encuentra enterrado el tesoro.
Durante el viaje, podremos conocer a los tripulantes del barco de Lefthandm alguno de ellos muy inesperado. Y también podremos saber algo de su oscuro pasado. Y es que cuando era niño, pasó algo horrible relacionado con su padre…

Santa Cruz no es un personaje especialmente simpático. La verdad es que no lo es ninguno de los protagonistas ni casi de los secundarios. Quitando algunos miembros de la tripulación que resultan un poco más agradables, los demás están en su papel de hombres duros y rudos, violentos a veces, sin demasiados escrúpulos. Aunque al final acabaremos conociendo bastante bien a Iñigo e, incluso, cogiéndole un poco de cariño.

Sus caracteres son los que podríamos esperar de un pirata. No están especialmente desarrollados pero tampoco creo que la historia lo exija. Realmente, su caracterización me parece correcta.

Además de ser una novela de aventuras en la que no faltarán amores, amistades íntimas y amistades extrañas, camaradería, lealtad y traiciones, hay también un cierto toque crítico a la sociedad de la época: España era entonces un pueblo de envidiosos, mentirosos y chanchulleros: “una tierra donde la envidia y la mentira eran monedas de curso legal, donde un pícaro levantaba más adhesiones que un político decente, el talento era humillado y los mediocres triunfaban”… Por cierto, como que me suena esto y no precisamente referido al siglo XVII, ¿no os parece que también se podría aplicar en la actualidad? Pero, por muy mal que gobernasen España, por mal que fueran aquí las cosas, la patria tira, ¿no? ¿Le tirará también a Iñigo o se pondrá de parte del inglés?

Conclusión final

“El príncipe de los piratas” ha resultado ser una novela entretenida, llena de aventuras, amores, amistades y traiciones que me ha hecho pasar unos buenos ratos. ¿Os animáis a leerla?

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