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viernes, 7 de septiembre de 2012

"Penurias exquisitas" - César Blasco


Hace ya más de un mes que terminé de leer este libro y, por unas cosas y otras, hasta ahora no he tenido tiempo de escribir la reseña. Ya va siendo de compartir con vosotros este libro que, os adelanto, me ha hecho reir a carcajadas.



César Blasco

Tras varios años tratando de vivir del cuento, César Blasco (Teruel 1964) terminó por aceptar que tendría que buscarse un empleo. Como no quería agotarse en el trabajo, se hizo funcionario. Y tan descansado vivía que, después de llenar su tiempo libre con todo tipo de lecturas, acudió a un taller de narrativa y se lanzó a escribir relatos. Penurias exquisitas es su primera novela. En estos momentos, se esconde del acoso de sus muchos admiradores en un barrio obrero de Barcelona, donde prepara su siguiente ataque a la literatura más aburrida.


Datos técnicos

Autor: César Blasco

Colección: Círculo rojo - Novela

Páginas: 376

ISBN: 978-84-9991-287-5

Formatos: Edición rústica con solapas

Tamaño: 15x21 cm

Editorial: Editorial Círculo rojo

Precio: 15,00 €


Argumento

El protagonista de la novela es Mariano de la Barriga, funcionario de Hacienda, soltero, que vive con su madre y muy sibarita en sus gustos. Mariano es un pedante al que le gusta vivir bien: invierte prácticamente todo su sueldo en caprichos caros: trajes de marca (le gusta ir impoluto al trabajo), aparatos electrónicos de alta gama (especialmente, un karaoke pues es muy aficionado a cantar), un Rolex. Coge el taxi para ir al trabajo; trabajo donde, haciendo gala a lo que se suele decir de los funcionarios, no pega ni sello.

Vive con su madre viuda y ésta es una auténtica criada: cuando llega a casa Mariano se encuentra la comida preparada, la ropa limpia y planchada…; él no tiene que mover un dedo y ni siquiera es capaz de agradecerle a su madre el esfuerzo. Pero todo cambia cuando su  madre fallece y él se encuentra solo en la casa, teniendo que administrar sus finanzas. Al principio todo le resulta fácil: ¿qué hay que comer? Pues nos vamos a un restaurante (y, como es de gustos finos, mejor de 3 tenedores que de comida rápida, por supuesto), sigue yendo en taxi y, en general, despilfarrando a manos llenas. Hasta que llega un momento en que su modesto sueldo de funcionario de Hacienda no le llega para pagar todos los créditos al consumo en los que se ha metido. Y su casa es un auténtico desastre.

La solución le viene de la mano de sus amigos: buscarse una mujer para casarse; así, de forma totalmente gratuita, tendrá cocinera, limpiadora, planchadora… y alguien que le haga compañía.

Pero ¿sabéis eso del cazador cazado? Pues eso es lo que le pasa al pobre Mariano…



Impresiones

Fijaos que es difícil hacer reir con un libro. Un libro no cuenta con la gracia de las imágenes, las caras que pueden poner los protagonistas de una película, los gestos…, sólo cuenta con la mayor o menos gracia que pueda tener el escritor. Pues, creedme: César Blasco tiene gracia a raudales, para dar y regalar. “Penurias exquisitas” es un libro divertidísimo, lleno de situaciones hilarantes, una detrás de otra. Ya desde antes de empezar la novela te estás echando unas risas con el acertado prólogo de agradecimientos, escrito por el propio autor en el que da las gracias a las “grandes editoriales que, rechazando la publicación de esta novela, me abrieron la puerta a una serie de maravillosas experiencias. Gracias a ellas, me vi obligado a invertir todos mis ahorros en la impresión de la primera edición de Penurias exquisitas. De otra manera, nunca habría desarrollado el agudo sentido de la austeridad y de la contención del gasto que me han sido de gran ayuda para afrontar con éxito la crisis económica que estamos atravesando. También debo agradecerles que me hayan permitido participar activamente en la distribución de los ejemplares de mi novela, transportándolos en mi mochila a las pequeñas librerías de la  ciudad, lo que me ha ayudado a desarrollar unos impresionantes pectorales que han disparado mi éxito entre el público femenino”… Y suma y sigue. Como comprenderéis, después de leer frases como las que os he transcrito y las que le siguen, una tiene mucha curiosidad por seguir leyendo y ver si todo el libro es del mismo tenor. Y sí, lo es, y mucho más. Es un libro no para sonreir sino para reir, a mandíbula batiente. No es por ello adecuado para llevar en el transporte público porque os pueden tomar por locos, advertidos quedáis.

Y es divertido porque César Blasco tiene una gracia tremenda. Además, su humor es como muy natural: de ésos que hacen reir casi como sin pretenderlo, no sé si me entendéis. Si nos referimos a humoristas de televisión, un ejemplo para mí de humor natural sería Gila que decía las cosas tan formal que daba la impresión de que él mismo se sorprendiese de que fuesen graciosas; mientras que gente como Los Morancos, para mí, serían un ejemplo de humor forzado y artificial. César plantea unas situaciones que, a veces por lo absurdas, a veces por ridículas, otras por absolutamente normales, resultan risibles. Además, al ir sumándose una a la otra, se forma un embolado tremendo que hizo, en mi caso, que una vez que empezar a reir, no pudiera parar de hacerlo. No podría elegir una escena que me parezca más graciosa que las demás porque todas son para apuntar: la muerte de la madre es para partirse de risa (con perdón), la violación de la caniche es de aúpa, el piso patera, la persecución en taxi…, son todas tremendas!

El personaje principal es Mariano de la Barriga. Un especímen que al principio, irremediablemente, nos cae fatal. Funcionario típico (de los que se tocan la barriga a la que hace honor su apellido a dos manos), chupóptero en casa, machista, rebuscadísimo en el hablar, egoísta…, el hombre lo tiene todo. Pero luego, le pasan tantas cosas que empieza a darnos pena y acabamos cogiéndole cariño. Porque, en el fondo, es muy buena persona y no se merece todo lo que le acaba pasando. A Mariano le gusta vivir bien y, por eso, aprovecha su sueldo para ir comprando cosas de lujo: trajes de marca, un Rolex, carísimos aparatos electrodomésticos. Los paga a plazos y disfruta mucho de esa vida de confort. También le gusta que le hagan las cosas; por eso, cuando muere su madre, se encuentra perdido. Tras una etapa horrible en la que se va endeudando más y más, siguiendo los consejos de sus amigotes, busca una mujer para casarse y se casa. Pero Soledad,  la bella, dulce y hacendosa joven que iba a ser la solución a sus problemas, le sale rana: resulta que la comida con la que obsequiaba a Mariano no la cocinaba ella sino su madre; y ésta era quien le planchaba la ropa cuando eran novios. Soledad demuestra ser una inepta para las labores de casa: no sabe hacerlas y, lo peor, no quiere aprender. Si Mariano buscaba una chacha con el matrimonio, Soledad buscaba un hombre que la mantuviese: el cazador cazado. Al final, Mariano se encuentra en peor situación que antes: además del trabajo de Hacienda tiene que buscar otros cuantos trabajillos para saldar las deudas que va contrayendo con sus dispendios Soledad; cuando llega a casa agotado, le toca hacer las tareas del hogar porque “la pobre Soledad” siempre tiene una buena excusa para no hacerlas. Ya os digo que acaba dándonos pena el pobre!

La novela aparece narrada en tercera persona. Utiliza un lenguaje de lo más rebuscado cuando es Mariano el que habla; y es que éste es todo un repipi. Para que os hagáis una idea de cómo habla el buen Marianico os pongo un par de frases extraidas al azar del texto:

.- “Señor facultativo, no alcanzo a vislumbrar la causa de tan jocosa aserción”

.- “Tras el ímprobo esfuerzo que efectué para reciclar mi imagen y publicitarla en establecimientos de ocio nocturno, y transcurrido un lapso temporal considerable, no he encontrado ninguna fémina con la que compartir mi caótica existencia hallándome ahora cautivo de la desesperanza”

Al principio, este lenguaje tan escogido (y culto) se hace un tanto extraño porque hoy día no habla así, de forma tan rebuscada y con un vocabulario tan especial. Pero te acostumbras enseguida además de que no supone, en absoluto, ninguna dificultad para la lectura que resulta amena y ágil en todo momento.

Conclusión final

Por todo lo dicho, podéis imaginar que recomiendo –y mucho- la lectura de “Penurias exquisitas”. No resulta fácil hacer reir a través de las letras y César Blasco lo consigue sobradamente. Por eso, le doy la máxima valoración, porque pocos libros tan divertidos como éste he tenido ocasión de leer.

¿Queréis leerlo? Pues tenéis dos opciones:

.- En papel está autoeditado en la editorial Círculo Rojo: enlace

.- Si tenéis ereader, casualmente me ha llegado hoy un mail del autor comentándome que ofrece gratuitamente la novela (en pdf y en epub) a todo el que se pase por su blog. Os dejo el enlace y os recomiendo que  leáis el post, ya que no tiene desperdicio y os dará una idea cabal del tipo de humor que destila el libro. Al final del mismo tenéis los enlaces para la descarga

También podéis comprarlo en Amazon, tanto en papel como en ebook (si pincháis en la foto os lleva directamente al producto):







28 comentarios:

  1. Hola!! ya he vuelto de las vacaciones y me estoy poniendo al día!
    Este libro hace tiempo que voy detras de él! no se a quien le leí una reseña muy parecida a la tuya y ya me entraron ganas de leerlo, pero como todo, pues se olvida... pero ahora que te he leído me han vuelto a entrar unas ganas locas de leerlo!!!! así que ahora mismo voy a mirar los enlaces a ver por donde lo pillo!!
    Besotes y me ha encantado la reseña!

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  2. Ya lo tengo descargado en el reader. Lo iré intercalando entre lecturas más densas para reír un rato y desconectar.
    Un beso.

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  3. Tiene muy buena pinta. Para los libros de humor prefiero que me aconsejen porque así como soy de lágrima fácil, leer con un libro suele resultarme difícil. Lo tendré en cuenta.
    Besos

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  4. Me lo apunto para cuando busque una lectura amena y divertida. Un beso.

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  5. A pesar de que somos compañeros de editorial, no conocía ni al autor ni al libro, pero tomo buena nota, porque me ha encantado tu reseña y me han entrado ganas de leer el libro y pasármelo bien seguro que me río pero eso sí, te haré caso y no lo leeré en el metro. Muchos besos.

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  6. Pues me lo apunto que por lo que cuentas creo que me va a gustar.

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  7. Yo lo apunto sobre todo para mi marido, porque estoy segura de que le gustará. Un beso

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  8. Jolines pues sí que te has reído... la verdad que apetece de vez en cuando leer libros así.

    Voy a ver su blog.

    Un besote

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  9. Gracias por presentarme a este autor y su simpática obra; ya me he hecho con su novela y espero leerla en un rato de bajona, para alegrarme el día! 1beso!

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  10. A mí también me gustó mucho, es super divertído. Hacerme reir a mí es complicado, soy de las difíciles y con este libro en algunos momentos se me saltaban las lágrimas de la risa. Genial sin duda
    besos

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  11. Me alegra mucho que el libro te haya causado tan buena sensación como a mí. Es un libro que logró hacerme reir manteniendo un buen punto crítico y reflexivo.

    Un abrazo!

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  12. Con esa nota y esas risas me la apunto. Por cierto, Los Morancos en directo cambian mucho respecto a la tele, hacen unos diálogos vestidos con traje que son la monda.
    Besos

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  13. Qué bien, me gustan los libros de humor, vienen muy bien de vez en cuando. Besillos

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  14. Que buena pinta tiene...tomo nota para cuando quiera echar unas risas

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  15. Por lo que dies tiene muuuy buena pinta! Tu descripción me ha recordado mucho a David Safier o Jonas Jonasson. Me lo miraré! :)
    Un beso

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  16. Pues apuntadito me lo llevo, que siempre está bien reír un poco. Y parece que con este libro se consigue.
    Besotes!!!

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  17. Ahora mismo voy a cotillearlo, qu me has dejado con muchas ganas...sobre todo si te ríes tanto.
    Un beso!

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  18. Pues pinta fenomenal.
    Lo había visto pero no sabía de opiniones sobre él, parece interesante =)

    Besotes

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  19. Este libro me tiene desubicada, hace tiempo que no leo algo que me haga reir pero no se si sería de mi estilo. Y así van pasando las semanas...
    Besos

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  20. Pues voy a ver, porque me encanta reírme con los libros. No es la primera vez ni será la última que me río a carcajadas con algún libro y tengo que parar porque me caen las lágrimas de la risa, y sí, esto me ha pasado varias veces en público. Yo no creo que sea más difícil hace reír con un libro que con una película. En los libros juega un gran papel la imaginación y a veces dicha imaginación puede ser más hilarante aún que verlo en una pantalla. XD
    Voy a ver su blog
    Besitos.

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  21. Parece que hoy nos presentas un libro muy divertido. Tomo nota porque creo que puede ser una buena lectura 'puente' entre dos libros más densos.
    ¡Muchos besos!

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  22. Me has hecho reflexionar que nunca leo nada divertido, casi todo lo que leo tiene un punto de dramón. Lo voy a apuntar.

    Un beso

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  23. Me estoy aficionando a este tipo de libros. Ahora estoy con "tengo ganas de morirme para ver que cara pongo" y me está encantando.
    Madre mía, la de tiempo que has estado para leerte este libro, eh?
    Abrazos
    Lupa

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  24. gracias por la información , voy a disfrutarlo que en los tiempos que corren que las malas noticias nos pillen riendo

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  25. El otro día cuando leí tu opinión en el Ciao! me bajé el pdf así que seguramente dentro de poco me animaré con él.

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  26. vaya, llego tarde!!! porque me has convencido y quiero leerlo!!! Un besote!!!

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  27. Voy a ir a descarlo, me han dado ganas de leer el libro con tu reseña.

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  28. Descubrí este libro primero gracias a su Tatty, y después a su autor. Debido a mis circunstancias actuales y de los últimos meses, no he tenido todavía la ocasión de hacerle un hueco... pero caerá... caerá

    besos

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Gracias por tu comentario