"El amo del fuego" - Enrique Osuna

Como ya sabéis, en verano organicé, con sorteo incluido, una lectura conjunta-simultánea del último libro de Enrique Osuna, “El amo del fuego”. El día 22 de septiembre comenzamos a leerlo, (casi)todos a la vez y a comentarlo en Twitter. Y esta semana se publicarán las reseñas. Aquí va la mía

Éstas son mis impresiones

Enrique Osuna

(Biografía extraída de su página web )

Vine al mundo el 20 de septiembre de 1.966, en la costera ciudad de La Línea de la Concepción. Como le ocurrió a tantas familias humildes, la mía recibió la llamada a filas de la emigración. Viví tres años en Londres y regresé justo a tiempo de ser privilegiado testigo de la Transición. Mis padres consiguieron una vivienda social. Las Palomeras se convirtió pronto en un referente de barrio marginal y peligroso, un sambenito que injustamente nos vimos obligados a portar todos los moradores. Yo me siento orgulloso de haber compartido quince años de mi vida con gente humilde, honrada y trabajadora. Buenos amigos hice allí y gratísimos recuerdos conservo del colegio Santa Ana, donde conseguí mi primer premio literario, quién sabe si el último. La flor que cura a la princesa Violeta fue mi versión de un cuento que oí de mi padre. Contaba once años. El premio, un libro de Julio Verne: Miguel Strogoff. Por esas fechas me topé con el apasionante mundo de las 64 casillas. Pero literatura y ajedrez aguardarían aún muchos años. Apenas trascienden ligeros escarceos con ambas artes en mi etapa de instituto. El Menéndez Tolosa; allí cursé cuatro maravillosos años y allí conocí a la mujer de mi vida. El 4 de septiembre de 1.982 sellamos nuestra unión. La boda llegaría casi diez años después y la felicidad suprema nos abrazaría por dos veces, en 1.995 y 1.999. En 1.986 me hice socio de la Peña Ajedrecística Linense. Me dediqué con entusiasmo al estudio y práctica del ajedrez, hasta alcanzar el primer puesto por ranking de mi ciudad. El ansiado título de Campeón de la provincia de Cádiz llegó por fin en 2.006. Le debo mucho, muchísimo al ajedrez. Pero también tendría que rendirle cariñosamente cuentas por tantas horas de lectura robadas.

Me diplomé en Relaciones Laborales y tuve variopintas ocupaciones, desde vendedor ambulante hasta empleado de la Administración Pública, pasando por representante de comercio, asesor laboral, profesor de educación secundaria y una curiosa variedad de puestos en distintos sectores. Mi vida está plagada de proyectos, de bandazos descontrolados, hasta que, afortunadamente, un día comprendí que había llegado la hora de liberar a la escritura de su confinamiento. 2.009 fue testigo del encuentro entre ambas aficiones, gracias a la publicación de mi primer artículo en la revista Jaque. El verano de ese mismo año decidí dar carta de naturaleza a un sueño. De algún modo, siempre supe que escribiría una novela. El mismo día que cumplí 44 años presenté a mi familia El eterno olvido.

Datos técnicos

Título: “El amo del fuego”

Autor: Enrique Osuna

Editorial: autopublicado en CreateSpace Independent Publishing Platform

Edición: tapa blanda, sin solapas /ebook

Fecha de publicación: febrero de 2014

258 páginas

ISBN: 978-1495999987  / ASIN: B00IVJVOM0

Precio: 11,85 € edición en papel / 2,68 euros el ebook

  Tapa blanda: 258 páginas

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    Editor: CreateSpace Independent Publishing Platform; Edición: 1 (18 de febrero de 2014)

Argumento

Daniel Salgado es un joven universitario, de familia acomodada y acostumbrado a una existencia plácida. Sin saber muy bien cómo, un día retrocede en el tiempo cientos de miles de años. Angustiado por la situación y aferrándose a la pesadilla como única explicación posible, se ve indefenso, perdido en un paraje inhóspito y obligado a sobrevivir sin más ayuda que su inteligencia. Pero ¿es tan poderosa la elogiada mente del Homo sapiens? ¿Sería el hombre actual capaz de fabricar útiles, encender el fuego, enfrentarse con éxito a las fieras con armas rudimentarias, guarecerse del frío y procurarse alimentos? Con su mayor capacidad craneal y su ingente arsenal de conocimientos, ¿lograría usted sobrevivir como lo hacían nuestros primitivos ancestros? "El amo del fuego" es una historia de lucha, de solidaridad, de sacrificio y de amor en un mundo mucho más cercano de lo que parece.

Impresiones

Hace ya unos años que organicé la lectura conjunta de “El eterno olvido”. Fue mi primera lectura conjunta y todo un éxito pues a todos los participantes nos gustó mucho el libro. Así que, con mucha ilusión organicé la lectura conjunta de “El amo del fuego”; la segunda novela de Enrique Osuna. Ya iremos viendo esta semana, a través de las distintas reseñas que van a ir saliendo, qué os ha parecido aunque, por los comentarios que he ido leyendo en Twitter, yo diría que también ha gustado.

“El amo del fuego” no tiene absolutamente nada que ver con “El eterno olvido”. El autor cambia aquí totalmente de registro, dibujando una novela de historia-ficción que, no obstante, también me ha gustado mucho. Tenía unas altas expectativas que, por suerte, no se han visto defraudadas.

La novela comienza en la actualidad. Daniel Salgado junto a su novia y una pareja amiga están visitando la exposición prehistórica de Atapuerca. Daniel se retrasa un momento del grupo y tiene un accidente que le lleva a un sitio que no parece el mismo en el que se encontraba antes. Y es que, sí es el mismo y, al mismo tiempo, no lo es pues se encuentra en Atapuerca pero miles de años antes. Ha pasado por un agujero del tiempo o a saber qué y se encuentra en la Prehistoria. Al principio no se lo cree, claro. Cuando ve una tribu prehistórica, piensa que son figurantes y se emociona con lo bien representados que están. Pero, pasan las horas, ve lo que hacen, cómo viven, el escenario en el que se manejan y, aunque le parece increíble, al final tiene que pensar que sí, que no sabe cómo ha viajado en el tiempo. Su único afán será, lógicamente, regresar al presente. Pero, mientras lo consigue, tiene que sobrevivir; tarea que no será nada fácil pues él tiene muchos conocimientos científicos, tecnológicos y de todo tipo pero pronto se da cuenta de que no sirven para nada en una sociedad tan natural como la que se encuentra. Así que no tendrá más remedio que integrarse en la tribu y aprender de ellos.

Comienza así una aventura llena de peligros pues, para una tribu pequeña como lo es la suya, compuesta por hombres, mujeres, niños y un anciano, la supervivencia es algo que se logra día a día. Catástrofes naturales, hambre, ataques de animales…, qué difícil era la vida para el hombre en aquellos tiempos!

Es ésta una novela llena de aventuras. No paran de pasar cosas por lo que me ha resultado interesante en todo momento. Además, no sé si os lo he comentado alguna vez, la Prehistoria es –junto al Antiguo Egipto y la Edad Media- mi época histórica preferida, por lo que el hecho de que estuviese situada parcialmente en este período histórico ha sido un aliciente más para mí.

No sólo hay aventuras en este libro. También hay humor. No se puede decir que sea un libro de humor pero sí que siempre hay un cierto toque humorístico que, incluso, aumenta capítulo a capítulo. El humor viene de la parte de Daniel, el protagonista, que no se toma demasiado en serio a sí mismo. Me ha parecido un personaje simpático, agradable, con el que he conectado (a pesar de que haga alguna cosilla, como lo de aquel cachorro que yo me sé…).

Toda la historia está narrada desde su punto de vista; en primera persona, por el propio Daniel. Técnica que, como he comentado muchas veces, a mí me gusta pues me hace empatizar más con el personaje. A veces, además, cuenta las cosas como si estuviera dirigiéndose directamente al lector, con un “de tú a tú” muy natural y coloquial. Este punto de vista, al menos en mi caso, ha hecho que conectase mucho con Daniel, un tipo simpático, que se hace de querer. Me ha gustado su forma de ser, un tanto socarrona, dispuesta a reírse de sí mismo y de los demás. Y me ha gustado mucho cómo cambia su perspectiva de la vida a tenor de lo que le pasa.

La novela está escrita con un tono desenfadado y coloquial, muy cercano al lector, buscando su complicidad. Con un lenguaje sencillo, sin llegar a ser un “page-turner”, es un libro que me ha tenido enganchada desde el primer momento. Primero por las aventuras que narra y el escenario en el que transcurre la historia. Pero luego por el giro inesperado que da. Y es que, no sabía muy bien adónde pretendía el autor dirigir la novela pero, desde luego, no me esperaba cómo, de repente, cambia todo y se convierte en una novela distinta. Daniel crece en la Prehistoria como persona. Se da cuenta de que esos seres primitivos, a los que ni siquiera se considera hombres, tienen mucho que enseñarle; sobre la vida, sobre la naturaleza y sobre sí mismo incluso. Su forma de ver la vida y sus aspiraciones cambian (para bien). Esta última parte me mantuvo aún más enganchada que la anterior. En ella hay una importante crítica social que no puedo por menos de compartir. Y llegamos al final. Durante esa última parte (más o menos, para que os hagáis una idea, ocupa el último tercio de la novela) se me plantearon dos posibles finales. Uno es el que ha elegido el autor; sin duda, mi preferido; yo quería que la novela acabase así. El otro hubiese dado un giro total a la historia; quizás hubiera sido más efectista pero considero que el elegido es el que mejor le va al tenor de la historia y el que más probablemente gustará a los lectores.

La historia transcurre en Atapuerca. Tanto la Atapuerca del presente - donde, ya sabéis, hace no demasiados años se descubrieron restos de un asentamiento prehistórico-, como la Atapuerca del pasado. "El complejo arqueológico de Atapuerca constituye el único lugar en Europa que encierra la evolución del último millón de años" (pag. 6). Los escenarios están muy bien descritos. La zona arqueológica nos permite hacer una visita virtual y hacernos una idea de cómo es. La parte situada en el pasado me parece que está bien dibujada. Sin ser una novela histórica ni exigirse un gran rigor en este aspecto, considero que está bastante bien dibujada la forma de vida de una tribu prehistórica: su forma de organizarse, la cueva en la que viven, la importancia que le dan al fuego, la forma en la que se distribuyen las tareas, la lucha por la supervivencia, etc… La novela comienza en el presente y, tras unas pocas páginas, se traslada al pasado donde ya transcurrirá algo más de la mitad de la historia para, en el último tercio volver al presente. La parte del pasado me ha gustado por intereses personales (desde que leí “El clan del oso cavernario” me encantan las novelas prehistóricas) y la parte del presente porque te mantiene en vilo sobre cómo va a terminar todo y porque plantea temas muy interesantes que te hacen reflexionar sobre cuestiones importantes.

"Aprendí a valorar todo mucho más, a agradecer cada regalo de la naturaleza, a disfrutar los buenso momentos. No somos conscientes de que nos pasa la vida por encima y no nos enteramos, engullimos su jugo en lugar de saborearlo" (pag. 216)

Conclusión final

“El amo del fuego” me ha parecido una novela la mar de entretenida, divertida incluso. Una novela de aventuras que va  más allá para hablar de temas importantes como nuestra forma de entender la vida, el respeto por la naturaleza, etc…

Aventuras, amor, amistad e, incluso, (aunque parezca mentira) metaliteratura (me ha hecho gracia la alusión a los autopublicados jejeje); una novela dentro de una novela. Con personajes entrañables – el hombre Arbusto, Medio Pie, Brujita, Ojos Claros…- y un estilo cercano, ágil y coloquial, es una lectura que recomiendo sin dudar.